El jinete irlandés Michael O’Sullivan murió este domingo a los 24 años tras caer a principios de febrero en una carrera en Thurles, en el sur de Irlanda.
“Michael falleció tristemente en las primeras horas de la mañana del domingo rodeado de su querida familia en el Hospital Universitario de Cork”, dijo la directora médica de la Junta Reguladora de Carreras de Caballos de Irlanda (IHRB, en inglés), Jennifer Pugh, en un comunicado.
El jinete había permanecido ingresado en coma inducido y cuidados intensivos en el citado centro hospitalario irlandés, a donde fue trasladado tras el incidente ocurrido el 6 de febrero, cuando cayó en la última valla del hipódromo de Thurles mientras montaba al caballo ‘Wee Charlie’.
O’Sullivan se convirtió en jinete profesional en 2022, acumulando un total de 90 victorias en Irlanda y cinco en Reino Unido.
El director general de la IHRB, Darragh OLoughlin, describió al joven como un “jinete excepcionalmente talentoso” y aseguró que “será extrañado profundamente por todos los que tuvieron el placer de conocerlo en el mundo de las carreras”.
La sala de prensa del Santiago Bernabéu estaba abarrotada para recibir a uno de los hombres que más veces la había visitado. Pep Guardiola, que decidió que el entrenamiento del Manchester City previo a la ida de Champions contra el Madrid se iba a realizar en tierras inglesas y no en el césped de Chamartín, lideró la expedición 'citizen' que aterrizó en España a las siete menos cuarto de la tarde.
La rueda de prensa estaba marcada en el horario de la UEFA para las 19:15 de la tarde, pero no fue hasta las 19:45, con media hora de retraso, cuando Rodri y Guardiola aparecieron por la puerta de la sala. Era demasiado optimista pensar que el autobús podría cruzar la ciudad en hora punta en apenas unos minutos.
Hablaron el entrenador y un futbolista español. Suena lógico. Y lo es, pero tiene su parte de superstición. El año pasado, el City decidió cambiar el hotel que utilizó el equipo en la visita al Bernabéu en la temporada 21-22, con aquella remontada histórica en el descuento y en la prórroga. Antes de la ida de semifinales, durmieron en el Hotel Villamagna y Rodri fue el elegido para hablar ante la prensa. Salió bien y este año han querido repetir. Mismo hotel, mismo portavoz.
"Conocemos a Jude"
"No pensamos mucho en el año pasado, sabemos que es un Madrid diferente, juegan diferente y son los favoritos siempre", aseguró el centrocampista español, que no quiso darle mucha importancia a la hipotética ventaja que puede tener el Madrid por llevar ocho días sin jugar ningún partido. "Estamos en la pelea por la Premier y no descansamos. Ellos tenían el parón por la final de Copa y han podido descansar, quizás es algo de ventaja. Pero no nos preocupa".
El ex del Villarreal y el Atlético elogió a Bellingham y Kroos. "Conocemos a Jude porque nos cruzamos con el Dortmund un par de veces. No me gusta centrarme solo en un jugador. Ahora con él tienen más control del juego, han cambiado la manera de jugar, llegan más desde segunda línea... Kroos es el metrónomo".
"Lo liberador es ganar la Champions"
Minutos después apareció Guardiola, con gesto serio y argumentario relajado. "Es casi imposible ganar al Madrid dos veces seguidas", admitió, en referencia al 4-0 del año pasado en Manchester. "Hace dos temporadas perdimos, el año pasado ganamos. Es un clásico. Tenemos una ventaja con la vuelta en casa, pero tenemos que jugar mañana. Veremos diferentes partidos en el mismo partido, ellos tienen la potencia que tienen en transiciones, con Bellingham, Vinicius, Rodrygo...".
Cuestionado sobre ese 4-0, el técnico catalán aseguró que su equipo fue "mucho mejor" que el Madrid. "Dicen que el Madrid lo hizo muy mal, pero no lo creo, nosotros lo hicimos muy bien. Es fútbol. Creo que somos equipos de un nivel muy parecido", añadió, y reconoció que "lo liberador es ganar la Champions, no ganar al Madrid".
El técnico quiso elogiar a Ancelotti: "Usted no sabe lo difícil que es ser un 'buen gestor', como dicen de él. Ser estable, gestionar jugadores, no solo la táctica, millones de factores. Jamás consideraré que Carlo no es un gran entrenador táctico. Puso a Pirlo de mediocentro, a Kroos en un perfil más bajo, encontró la posición ideal de Bellingham... Que le quede claro que en Manchester tenemos una opinión muy buena sobre él", y ya adelantó que el italiano habrá buscado "alternativas" al 4-0. "Será diferente, seguro. Carlo habrá buscado alternativas y nosotros hemos de cambiar algo, porque nos faltan piezas en defensa. El partido será distinto. Intentaremos especular lo menos posible".
Sobre su futuro, admitió que es "especial" llegar al Bernabéu pero que cada año es más "rutina" al repetir tantas veces. "Me gusta este negocio, me lo paso bien. Me pagan bien y me lo paso bien. Me gusta la competición, me gusta venir aquí, intentar seguir adelante... El día que no, me iré a casa".
Ellos y ellas invierten los papeles. Los jugadores del perfil bajo, liderados por Fermín López, estarán en la gran final del Parque de los Príncipes, nada menos que ante Francia, hecho que va a crear una atmósfera de finalísima. Sólo falta en el reparto Kylian Mbappé, que suelta las piernas en Valdebebas. Las jugadoras que llevan un año bajo los focos por lo bueno y por lo malo, y que acaparan títulos, Balones de Oro y pasarelas, saltaran al terreno de juego para jugar por el bronce lejos de París, en Lyón, frente a Alemania. Ellos lo hacen en calma, la misma que traslada Santi Denia. Ellas, en mitad de las críticas, externas e internas, tras la decisión de Montsé Tomé de no contar con Alexia Putellas como titular el día del desplome ante Brasil.
El fútbol masculino español llega a la cuarta final olímpica, de las que ha perdido tres, de una forma muy diferente a otras ocasiones. Después de lo ocurrido en Tokio, donde Pedri reventó por haberlo jugado todo, Eurocopa y Juegos, junto a otros cinco futbolistas, la Federación, en una situación de más debilidad, fue condescendiente con las lógicas peticiones de los clubes. Los Juegos no eran esta vez la gran prioridad, por lo que se dio continuidad al grupo de los sub'21 de Santi Denia, con dos futbolistas, Fermín y Álex Baena, seleccionados para ambos torneos, aunque con un papel mínimo en la Euro. Fermín jugó 29 minutos. Ambos tienen ahora la oportunidad de cerrar un año redondo como internacionales.
Todo lo contrario sucede con la selección femenina, convertida en una prioridad de la Federación y el Gobierno en todos los órdenes después de la crisis del beso. Lo que pidan. Montse Tomé fue, de hecho, un nombramiento pactado entre todos mientras se sellaba la paz junto al anterior secretario de Estado, Víctor Francos. Después de ganar el Mundial y la Liga de Naciones, el oro parecía señalado por el destino. La realidad empezó a mostrar su dificultad con un torneo en el que España no ha desplegado buen juego. Al contrario.
MONTSE TOMÉ, EN EL FOCO
La derrota ante Brasil, inapelable, dejó ver carencias defensivas y falta de recursos por parte del banquillo, donde se quedó Alexia Putellas. Lo mismo le había pasado a Jenni Hermoso ante Colombia. "No lo entiendo", dijo la madrileña. Apareció en el once en semifinales. La inesperada caída, puesto que habían derrotado a las brasileñas en la primera fase, es especialmente frustrante en un equipo que no se planteaba otro objetivo, con clanes internos en torno a sus grandes jugadores, Jenni, Alexia y Aitana Bonmatí.
Jennifer Hermoso durante la semifinal entre Brasil y EspañaKiko HuescaEFE
"Otros días les ha tocado a otras jugadoras entrar desde el banquillo. Lo he dicho muchas veces, la gran suerte que tenemos de tener tanta competitividad en el equipo. Ellas se muestran competitivas siendo titulares o entrando desde el banquillo", dijo Montsé Tomé en Marsella. Alexia se siente titular siempre. Incluso con lesiones recientes, ha entrado en convocatorias, como la de la pasada Liga de Naciones, algo que no entendieron en el Barcelona. Una vez en Lyón, Montse Tomé se focalizó en el partido, lo mismo que Jenni: "Somos unas privilegiadas y vamos a intentar ganar un bronce para cerrar un año redondo".
Problemas, en realidad, que recuerdan a los de la selección masculina en el pasado y que son un síntoma del lugar en el que se ha situado esta selección femenina de fútbol. Se sienten y son 'top'. Pese a estar en sus primeros Juegos, ahora el trabajo es encontrar la motivación para luchar por el bronce frente a una Alemania potente y con un gran recorrido olímpico, ya que fue campeona en Rio 2016 y plata en 2000, 2004 y 2008.
Para saber más
Ellos, en cambio, sienten un objetivo cumplido y ahora buscan un sueño. Les sucede lo mismo a los franceses y a su seleccionador, Thierry Henry, que ha trabajado con una presión enorme. "Yo tuve la suerte de ver el gol de Kiko. Al llevar tantos años sin un oro. Esto significa un reto más", dijo Santi Denia. España lo perdió en Sydney 2000 y Tokio, en 2021, además de la final perdida por la primera selección española, plata en Amberes'20. Entonces era la furia, ahora es el juego.
Atmósfera patriótica
Francia tiene que remontarse más, hasta Los Ángeles'84, para recordar un oro. Henry, sin embargo, ha preferido rememorar otra cita de ese mismo año: la Eurocopa en la que la Francia de Michel Platini derrotó a España en el Parque de los Príncipes, con un maldito gol de falta del centrocampista que entró bajo el cuerpo de Arconada. "Recuerdo ese ambiente, recuerdo ese partido", señaló el técnico, que entonces contaba seis años.
Henry también se refirió a la última Euro, en la que España venció en semifinales a 'Le Bleus', y pidió el apoyo de los franceses con un discurso patriótico: "Somos un gran país cuando vamos juntos". La escenografía en el Parque de los Príncipes será la de las grandes ocasiones, la escenografía que ellas esperaban.