La difícil búsqueda de casa para España en el Mundial: las imposiciones de FIFA, las distancias y el coste

La difícil búsqueda de casa para España en el Mundial: las imposiciones de FIFA, las distancias y el coste

España sabe que jugará sus tres primeros partidos del Mundial 2026 en Atlanta, ante Cabo Verde y Arabia Saudí, y Guadalajara, contra Uruguay, pero aún no ha encontrado casa donde se instalará a principios del mes de junio en Estados Unidos. Y no es una tarea fácil, porque la FIFA ha impuesto normas, las distancias en el país son descomunales y Luis de la Fuente quiere tener un campo base que huya del calor, la humedad y el jolgorio que rodea a un campeonato del Mundo. La intención, como ocurrió en la Eurocopa de Alemania, es encontrar un lugar tranquilo que, además, ahorre kilómetros a sus jugadores en un torneo de mucho desgaste físico. Y si todo eso puede ser al menor coste posible, mejor.

Fue afortunada la selección al tener como sede de los dos primeros partidos Atlanta, aunque para el último tenga que hacer un desplazamiento más largo, hasta Guadalajara. “Hay otras selecciones que se tienen que mover más”, valoró el director deportivo de la RFEF, Aitor Karanka. De los estadios no tienen queja. El de Atlanta es de última generación, techado y hasta con aire acondicionado para los 75.000 espectadores que tienen de aforo. En Guadalajara, la hora del partido, las ocho de la tarde en México, es una ventaja, porque les libra del calor extremo. Además, España ya conoce que, si cumple con lo previsto y se planta en la final de Nueva Jersey el 19 de julio, solo pasará por tres sedes más: dos partidos en Los Ángeles (1/16 y cuartos) y otros dos en Dallas (octavos y semifinales).

Con esto claro, ahora toca elegir casa. La FIFA obliga a que, en la primera fase, todos los equipos tengan un campo base y no permite la itinerancia. Para eso ha ofertado 62 centros de entrenamiento cercanos a todas las sedes que, de forma gratuita, pueden elegir las distintas selecciones, con preferencia a las que tengan sus partidos en estadios próximos. Eso sí, superado el primer tramo de competición, deben cambiar.

Estos condicionantes llevaron a España a mirar opciones fuera del catálogo FIFA y el lugar favorito para instalarse es Chicago. En concreto, las modernísimas instalaciones que inauguraron el pasado mes de mayo los Chicago Fire. El Endeavor Health Performance Center dispone de cinco campos de entrenamiento, uno de ellos cubierto, salas de recreo y de recuperación. Ubicado en un barrio al oeste del centro de la ciudad, no tiene residencia, pero garantiza a la selección la tranquilidad de estar alejada y de alojarse en un hotel de una ciudad que no albergará partidos.

A España también le gusta esta Chicago porque allí estableció su cuartel general en el Mundial de 1994 y el responsable de viajes de la Federación, Antonio Limones, ya preparó aquel campeonato. “Es el momento del departamento de viajes que, como la selección, también es el número 1. Antonio lleva 30 años haciéndolo y, junto a la team manager, Nuria Martínez, y el preparador físico Carlos Cruz, evaluarán las opciones”, explica Karanka.

Gimnasio de las instalaciones de los Chicago Fire.CHICAGO FIRE

Elegir Chicago supone tener que hacer dos desplazamientos de hora y media de avión a Atlanta y, por el horario de los partidos, a las 12 de la mañana hora local, permitirían a la selección volver al campo base después de cada encuentro. A Guadalajara serían más de cuatro horas.

Que estas instalaciones estén fuera del catálogo FIFA tiene como ventaja que España no tendría que abandonarlas tras la primera fase, aunque eso supusiera desplazamientos de más de cuatro horas a Los Ángeles, de casi tres a Dallas, y de apenas dos a Nueva York.

También hay un inconveniente: la RFEF tendría que pagar de su bolsillo toda la estancia, mientras que elegir una de las opciones de los organizadores sería gratis. Este argumento no habría cobrado peso hasta que el sorteo deparó que España jugara dos partidos en Atlanta.

Allí, en esa misma ciudad, la FIFA ofrece dos bases operativas: el centro de entrenamiento del Atlanta United, unido al alojamiento en el JW Marriott Atlanta Buckhead, y las instalaciones deportivas de la Universidad Estatal de Kennesaw, con el hotel InterContinental Buckhead Atlanta como residencia.

Elegir una de estas opciones, en las que la FIFA les da preferencia, supone no solo reducir al máximo los desplazamientos en la primera semana del campeonato sino también evitar un enorme gasto.

En los próximos días, habrá una evaluación de estas sedes, además de la de Chicago, que es, al parecer, la que sigue teniendo preferencia. Incluso es posible que se pudiera valorar alguna otra. La intención de la RFEF es poder cerrar cuanto antes cuál será la casa de España para comenzar a prepararla con todo lo que pueda ser necesario.

kpd