Premier League
Un gol y ninguna asistencia en ocho partidos llevan a Potter a prescindir del portugués mientras él asegura haber encontrado la felicidad lejos de Simeone
No había pasado ni minuto y medio del Leicester-Chelsea cuando Joao Félix recibió un plantillazo y tuvo que ser atendido. En el 23, el ex del Atleti recibió solo ante el portero pero tiró al palo. En el 33 marcó el que iba a ser el 0-2, pero el VAR lo anuló por fuera de juego. En el 38 se lio en la salida de balón, le robaron la pelota cerca de su área y el Leicester marcó el 1-1. Al descanso, Graham Potter decidió dejar al portugués en el banquillo. Su equipo acabó ganando 1-3.
Pasan las jornadas y las estadísticas de Joao Félix en la Premier siguen engordando en calamidades, ayer con el expulsado de la BBC Gary Lineker, y seguidor del Leicester, como testigo en la grada.
El pasado lunes, en rueda de prensa previa al partido de Champions ante el Dortmund, el portugués se mostraba encantado de haber salido de las garras de Simeone: “El Chelsea es un equipo al que le gusta atacar, tiene el balón, domina el juego. Así que ese es el juego que me gusta jugar. Me siendo muy libre jugando aquí. Me encanta”. Tampoco es que haya mucha diferencia, la posesión del Atlético ronda el 50%, la del Chelsea el 55%.
La consecuencia de su felicidad es hasta el momento un solo gol en ocho partidos. Ni una sola asistencia. Tampoco se encuentra entre los jugadores del equipo que más pases dan o más pases reciben. Con él en el campo el equipo sólo ha conocido la victoria en tres encuentros, y la titularidad que se ganó a las 24 horas de aterrizar en Stamford Bridge, empieza a ser cuestionada. Hace dos semanas, ante el Leeds, lo sacaron del campo en el 68, el martes ante el Dortmund en el 67. Hoy ya no regresó al campo tras el descanso.
Aunque se especuló que podría estar lesionado por culpa de la patada que recibió al minuto y medio de partido, Potter explicó en rueda de prensa que el portugués le sobraba: “Tácticamente quería usar un mediocampista extra (…) Sentí que necesitábamos a alguien que pudiera ganar la pelota, un perfil diferente y pensé que Conor era fantástico”.
El Chelsea invirtió este mercado de invierno once millones de euros por la cesión de Joao Félix. Entonces el equipo era décimo, y ahí sigue, a once puntos de la Champions. En su primer partido, ante el Fulham en Craven Cottage, vio la roja a los 58 minutos, la segunda de su carrera. El partido iba 1-1 y su baja le acabó costando la derrota. De los tres partidos que jugó el Chelsea durante su sanción no perdió ninguno.
Aún así Todd Boehly estaría negociando su compra con el Atleti para construir desde el portugués, que ahora tiene 23 años, su nuevo proyecto. Necesita antes cien millones de euros, que pretende recaudar con la salida de jugadores con Mason Mount, Koulibaly o Aubameyang.