El pasado noviembre, Hunter Campbell, el jefe de negocios de la UFC, viajó a Barcelona para reunirse con Ilia Topuria e imaginar juntos el futuro. Hace años que la mayor competición de artes marciales mixtas -esa mezcla de boxeo, kick boxing, judo o lucha grecorromana- busca expandirse en el sur de Europa, pero nunca tuvo una oportunidad como esta. Por fin, un luchador de nivel: desde este domingo Topuria es campeón del peso pluma tras noquear en el segundo asalto a Alexander Volkanovski, dueño del cinturón desde 2019. Por fin, un luchador carismático: imagen de marcas, habitual del prime time televisivo, amigo de celebrities –Pablo Motos, Omar Montes, Sergio Ramos…- y con cinco millones de seguidores en redes sociales entre Instagram y TikTok.
«Definitivamente vamos a ir a España», confirmó Dani White, presidente de la UFC, sobre un plan que todavía guarda dudas. ¿Dónde será? ¿Cuándo? ¿Y a quién se enfrentará Topuria? Todo está por ver.
Para saber más
Antes de elevarse a ídolo mundial con un directo al mentón de Volkanovski en un Honda Center de Anaheim abarrotado, Topuria ya había repetido su objetivo. «Abriré el Santiago Bernabéu», llegó a anunciar antes de viajar a California, pero la ambición puede ser exagerada. El propio Campbell, en su reciente visita, señaló que el evento en España podría ser en Madrid… o en Barcelona.
En Estados Unidos, donde tiene su sede y la mayoría de sus aficionados, la UFC ha llenado pabellones tan grandes como el Madison Square Garden de Nueva York, el TD Garden de Boston o el T-Mobile Arena de Las Vegas, pero nunca ha intentado el salto a los estadios. En sus viajes internacionales, a Australia, Brasil o Canadá, sí lo ha hecho, con récord mundial de asistencia en el Estadio Docklands de Melbourne -57.127 aficionados-, pero de ahí a llenar los 85.000 asientos de la casa del Real Madrid hay diferencia. El Wizink Center o el Palau Sant Jordi parecen opciones más factibles. En todo caso, pondría a prueba la afición por los deportes de contacto en España, con escasos referentes en los últimos tiempos. De hecho, este siglo, el fenómeno Topuria sólo puede compararse con el público que movía el boxeador Kiko Martínez, que organizó veladas en el Gran Canaria Arena o el Palacio de los Deportes de Gijón.
Los jóvenes y McGregor
Aunque esta vez parece que el éxito puede ser mayor. El tirón mediático de Topuria es mayor y las artes marciales mixtas tienen hoy más tirón que el boxeo entre los jóvenes. También dependerá de la fecha y, sobre todo, del rival. Empezando por el día sólo hay una cosa clara: será en 2025. Este año es probable que el español vuelva a pelear, que consolide su título, pero debería ser en Estados Unidos y ante algún joven prometedor. Topuria ya ha dicho que los mejores de su peso, el propio Volkanovski, Max Holloway o Yair Rodríguez, le parecen adversarios de escaso interés por su veteranía y que confirmará su dominio ante otro luchador joven y imbatido como él, como por ejemplo el ruso Movsar Evloev. Después de eso, si mantiene su cinturón, llegaría el gran combate.
EFE
Como confirma su representante, Pedro Dols, a EL MUNDO la intención de Topuria es atraer a Conor McGregor, leyenda de la UFC, el mejor luchador de siempre. ¿Lo conseguirá? Será otro reto. Después de tres años parado, McGregor volverá a pelear este año, en otoño, ante Michael Chandler y después no está claro qué hará. Podría retirarse definitivamente o volver a enfrentarse a los mejores, la intención del español.
Para un duelo entre ambos, Topuria debería subir de peso y exponerse ante un rival más grande, aunque ya ha asegurado que no le supondría un problema. La presencia de McGregor en el octágono eliminaría el mayor inconveniente para la UFC, la diferencia horaria entre España y Estados Unidos y la consecuente caída de espectadores yankees en PPV, y abriría las puertas del Santiago Bernabéu.
