Las ajedrecistas han escrito una carta abierta, suscrita por compañeras de profesión de otros países, en la que acusan a jugadores, entrenadores, árbitros y directores de torneos
Cuando aún no se han apagado los ecos de la denuncia contra el maestro y entrenador Alejandro Ramírez en Estados Unidos, acusado de acoso sexual por ocho mujeres, catorce jugadoras de ajedrez francesas han encendido otra mecha. En una especie de “Yo acuso” colectivo, las ajedrecistas aseguran en una carta abierta publicada el jueves que dichas prácticas son algo habitual en el mundo de las 64 casillas, por parte de jugadores, entrenadores, árbitros y directores de torneos. Según ellas, esta es una de las causas del abandono temprano del ajedrez por parte de las jóvenes.
Entre las firmantes originales no figuran las principales estrellas del ajedrez francés, pero ya la han firmado también ajedrecistas de otros países, como la española Patricia Llaneza, la británica Jovanka Houska y la estadounidense Jennifer Shahade, quien destapó el escándalo de Ramírez en Estados Unidos y se ha convertido en una abanderada de la causa. La propia Federación Francesa de Ajedrez ha asegurado que está “junto a las víctimas y testigos de la violencia machista y sexual”.
“Es tan poderoso ver a tantas ajedrecistas de primer nivel en Francia hablar alto y claro contra la misoginia y la violencia en nuestro amado juego. Esto ya no se puede minimizar ni silenciar. Orgullosa de añadir mi nombre a su carta”, ha escrito Shahade en Twitter.
“hemos sufrido violencia sexista o sexual”
“Nosotras, mujeres ajedrecistas, entrenadoras, árbitros y directoras, hemos sufrido violencia sexista o sexual perpetrada por ajedrecistas, entrenadores, árbitros y directores”, empieza la carta. “Estamos convencidas de que este acoso y estas agresiones siguen siendo una de las principales razones por las que las mujeres y las jóvenes, especialmente en la adolescencia, dejan de jugar al ajedrez“.
“Ante estos hechos de violencia, hemos permanecido en silencio durante demasiado tiempo. Sin embargo, permanecer en silencio significa llevar solo la carga de la vergüenza. Encontrar las palabras y el coraje para hablar puede llevar tiempo, pero creemos que es necesario y curativo”, añade el texto.
“Hoy nos pronunciamos y animamos a todas las jugadoras a denunciar la violencia que han sufrido. Para que el miedo y la culpa cambien de bando. Para que los perpetradores ya no puedan actuar con impunidad Para que los jugadores, entrenadores, árbitros, gerentes y padres de apoyo estén al tanto del alcance del problema y puedan ser parte de la solución. Tu vigilancia, apoyo y firmeza son esenciales”.
MENSAJE A LAS VÍCTIMAS
El documento termina con un mensaje directo a las víctimas: “A cualquiera que haya sufrido violencia machista o sexual, queremos decirle: No estás sola. Te creemos. Estaremos ahí para ti”.
Entre las firmantes originales hay grandes maestras femeninas (Mitra Hejazipour y Andreea Navrotescu), maestras internacionales y maestras FIDE. Aunque de momento no han firmado la carta las grandes estrellas del ajedrez galo, no se puede desdeñar en absoluto el nivel de las firmantes, entre las que hay varias jugadoras de élite.
La Federación francesa también ha expresado su “apoyo total” a las denunciantes, y ha ofrecido recursos y ayuda para denunciar el caso ante el Ministerio de Deportes. “Junto a la asociación Coloso con pies de barro y con las herramientas puestas en marcha por el Estado, la FFE fomenta la libertad de expresión y acompaña a las víctimas y testigos de la violencia sexual y de género”.
Otra de las voces más autorizadas del ajedrez mundial, Susan Polgar, denunció también cuando se destapó el caso de Ramírez que ella misma había acusado a un jugador hace años, sin ningún éxito. “No sólo no hicieron nada, sino que me castigaron severamente y me pusieron en la lista negra”, declaró.
El mes pasado, la jugadora y árbitra Patricia Llaneza, una de las firmantes del documento francés, desgranaba cuatro claves del acoso en el ajedrez. “Sí, las mujeres son acosadas en los torneos. No, no todas las mujeres y no en todos los torneos, y (antes de que algunos empiecen a chillar, no todos los hombres son acosadores. Sí, todavía ocurre incluso si tú dices que no pasa. Y no, no va a terminar por negarlo”.