La resurrección del Valencia solo alcanza para agarrar un empate ante el Betis en Mestalla

Actualizado Domingo, 9 noviembre 2025 - 21:04

No está muerto el Valencia de Corberán a pesar de parecerlo. Ante el Betis fue capaz de resucitar su mejor versión, asfixiar al rival y coserlo a ocasiones, aunque cuando entró una ya era para remontar. Y es que los verdiblancos, con transiciones veloces comandadas por Antony, pudo haber hecho mucho daño. El punto es valioso para Mestalla más por las sensaciones que por el reflejo que tiene en la clasificación. El Valencia, que toma aire, suma siete jornadas sin ganar. [Narración y estadísticas: 1-1]

No hubo respiro en un duelo que viajó de área a área sin descanso. Los valencianistas sabían que la grada no perdonaría que no mordieran los tobillos, más cuando Antony ganó la primera carrera por la orilla para servir un centro perfecto que Abde, sin explicarse cómo, no logró encajar entre los tres palos. Al aviso respondió Danjuma contra contra endiablada que mandó por encima del larguero de Valles. Otra tuvo el neerlandés con un centro de Gayà que estrelló en el travesaño.

El Valencia estaba encerrando al Betis, que necesitó media hora para estirarse y salir del dominio valencianista. Corberán no apuntaló su defensa de manera evidente, con tres centrales, pero sí incrustó a Pepelu para darle salida de pelota y dejó al capitán y a Thierry el camino despejado para sumarse al toque de arrebato. Le funcionó la idea, con futbolistas más concienciados y entregados a una fórmula en la que se sintieron cómodos en ataque y fueron efectivos en defensa.

Cierto es que el acierto del Betis ayudó, porque no suele fallar Antony a puerta vacía regalos como el que le hizo Cucho tras una galopada por banda. Y es que no se sentían cómodos ante un Valencia que, por primera vez, era capaz de recuperar balones con soltura en el centro del campo, con Javi Guerra y Almeida multiplicados.

Por eso podían aparecer los laterales, como Gayà para volver a dibujar un centro que no acertó a cabecear Lucas Beltrán y que enganchó Diego López para forzar a Valle a hacer una de las paradas de la noche.

El Valencia se fue al descanso teniendo más balón, más ocasiones, más intensidad, una presión efectiva y haciéndose la vida más fácil en defensa. Lo único que faltaba es el gol.

Tras el descanso, otra vez avisó el Betis, otra vez Antony, que esta vez, atosigado, cruzó en exceso un remate desde la esquina derecha del área. Otra vez respondió el Valencia con una doble oportunidad de Diego López y Lucas Beltrán. Y de nuevo apareció Antony con un disparo que buscó ajustar al palo.

Del fallo al empate

Después de tanto fallo, el gol de los verdiblancos llegó por un error valencianista. Tárrega, obligado a sacar el balón, equivocó el pase y le entregó la pelota en el borde del área a Cucho, que encaró y batió a Agirrezabala.

No se hundió el Valencia ante el palo. El banquillo ya había echado mano de dos armas que se guardó de inicio, Luis Rioja y Hugo Duro, y fue el andaluz el que armó la revolución. Cazó una pelota rebotada en la medialuna y la pegó con la fe necesaria para convertirla en gol. No pasó desapercibido que buscó a su central para dedicárselo como bálsamo.

Nadie se conformó con ese empate, aunque quien más cerca estuvo de romperlo fue el Betis en un mano a mano de Cucho ante Agirrezabala que salvó el meta vasco para apuntalar el punto de crecimiento que puede haber encontrado el Valencia.

El Levante pone la emoción y el Betis y el Alavés los goles en una última jornada copera sin caídas de los grandes

El Levante pone la emoción y el Betis y el Alavés los goles en una última jornada copera sin caídas de los grandes

La tranquilidad de la mayoría de partidos de equipos de Primera en las jornadas previas de Copa se vio truncada por la locura que se vivió en este último día de la primera ronda del torneo del ko en Orihuela. El Levante pasó sobre la bocina y al Espanyol también le costó, no así Celta, Alavés y Betis que ganaron sin problemas sus duelos.

Por volver a la localidad alicantina, el partido entre el Orihuela y el Levante (3-4) fue una auténtica lucha hasta el último minuto. De hecho, fue Espí en el 92, apenas dos después de que el conjunto amarillo empatara por medio de Ayo, el que dio la victoria a los, ayer, blanquiazules.

El Espanyol necesitó del mejor Kike García para resolver un duelo ante el Athletic Lleida que se complicó en la primera parte. Un doblete del ariete periquito salvó a los de Manolo González de caer en primera ronda como le ocurriera el martes al Oviedo.

Pocas opciones dieron el Celta y el Alavés al Puerto de Vega y al Getxo respectivamente. Los vigueses no necesitaron subir de marcha y ganaron de manera gris al equipo de Navia (0-2), que consiguió mantener su puerta a cero hasta el descanso. Óscar Marcos, el debutante en el equipo de Giráldez abrió el marcador y dos minutos después lo cerró Damián de penalti.

El Alavés fue una apisonadora en Getxo (0-7). Los vitorianos ya iban 0-4 en la primera parte con dobletes de Mariano y Carlos Vicente. El delantero caribeño completaría su póker en la segunda parte y los babazorros terminarían haciéndole un siete al conjunto vasco.

Otra fue el Betis, Riquelme fue un puñal por la banda y Altimira gobernó el medio campo ante el Palma del Río (1-5). Poco pudo hacer el ex bético Sergio León, aunque una asistencia suya dio el gol del honor a los cordobeses. Finalmente, los de Pellegrini terminaron con siete tantos.

El Atlético pone fin a su maldición a domicilio ante el Betis

El Atlético pone fin a su maldición a domicilio ante el Betis

Había que luchar contra el Betis y contra una maldición. Jugar lejos del Metropolitano era hacerlo contra el conjuro de una bruja, 11 victorias de 36 duelos. Los verdiblancos, encima, fueron el barro desde que el Atlético se impulsó la temporada pasada para inaugurar su gran racha que le llevó a ser campeón de invierno. El lunes fueron un tobogán, con algún bache, pero sin grandes amenazas. Valieron los goles de Giuliano y Baena y un Oblak sólido. [Narración y estadísticas, 0-2]

Quizás cueste sentirse en casa cuando uno juega en el exilio. Aunque voluntario, no es lo mismo el Villamarín que la Cartuja. Quizás por eso el Betis pareció llegar tarde al encuentro y se encontró con el zurriagazo de Giuliano con la zurda, que le puso el partido cuesta arriba. Un gol que no retrasó al Atlético sino que le animó a ir hacia delante, a incrementar la presión y a aprovecharse de la siesta verdiblanca.

Tardó casi 20 minutos en Betis en salir al césped de la Cartuja. Se agarró a sus extremos, como no podía ser de otra manera con la ausencia de Isco, su principal puntal ofensivo cuando está en el campo. Antonio de Triana puso un centro al que Cucho no llegó por centímetros y luego Abde obligó a Oblak a un paradón de esos para hacerse un póster.

El Atlético no se agobió con ese despertar y con perder la posesión. Saben los de Simeone que también tienen nombres para correr como Nico y Giuliano. El Cholito se aprovechó a la media hora de partido de un despiste de Ricardo Rodríguez y de la lentitud de Amrabat para llegar casi al área pequeña de Pau, pero se terminó embolicando y cedió a Julián, que no pudo concretar. El argentino dio el susto en el banquillo del Atlético poco después. Simeone se llevó las manos a la cabeza cuando vio a su estrella quejarse del codo izquierdo, pero fue un pisotón.

Amrabat se ha sentado en la medular de Pellegrini. Sonó por cierto para la de Simeone, y se entiende. Omnipresente el 14 hasta que le sorprendió otra contra fulgurante ante la perplejidad de los béticos. Y es que se quedaron protestando un penalti sobre Natan mientras los rojiblancos salían como centellas. Julián cedió a Baena en el pico del área y el almeriense amagó con un disparo, se abrió un paso y la colocó en la escuadra. El primer aviso fue un cañito a Amrabat a los segundos del inicio del duelo y el segundo fue ese tanto de bandera.

Giuliano, tras anotar un tanto ante el Betis.

Giuliano, tras anotar un tanto ante el Betis.CRISTINA QUICLERAFP

La segunda parte la anunció Abde con un lanzamiento de falta que despertó la Cartuja. Habían pasado 10 minutos anodinos, pero el disparo del marroquí conectó al Betis, que empezó a inclinar el campo sobre la portería de Oblak. A ello también contribuyó la salida de Lo Celso, el argentino da un punto más de creatividad al ataque bético a falta de Isco, dejarlo en el banquillo da solidez, pero dos goles abajo obligaba a tomar riesgos.

Simeone, por contra, sacó a Julián y Baena, sus dos mejores peloteros, por Griezmann y Sorloth. Sólo tres partidos completos ha jugado el 19 rojiblanco esta temporada, sintomático. Aún quedaba media hora y cualquier cosa podía pasar, así que un gol del Betis iba a despertar rencores. Casi lo hace Lo Celso a los cinco minutos, pero respondió bien Oblak.

La charla con Sorloth

Se esperaba más actitud del noruego, especialmente después de la charla con el Cholo en el entrenamiento abierto al público del domingo. Le felicitó el argentino por su labor en Londres, donde el Atlético perdió 0-4. Cosas de entrenador. Hay que tener a todos remando a favor, aunque su aportación sea infinitesimal respecto al curso pasado.

Los rojiblancos sólo tuvieron que aguantar a pie quieto las embestidas sin mucho filo del Betis. Quizás un remate en área pequeña de Bakambú, que salió por Cucho, fue lo más cerca que los béticos tuvieron acercarse en el marcador. No hubo muchas más claras ni para un lado ni para otro. Se rompió el maleficio con oficio. Que valga la rima consonante en tierra de poetas. Tranquilidad para el Cholo, que no ve cómo se aleja más el vecino. Aún está lejos, pero el Atlético es cuarto.

El "amistoso" que acabó en puñetazos": los jugadores del Betis y el Como se enfrentan en el campo

El “amistoso” que acabó en puñetazos”: los jugadores del Betis y el Como se enfrentan en el campo

Actualizado Jueves, 7 agosto 2025 - 07:41

El partido de fútbol amistoso entre el Betis y el equipo italiano Como ha sido interrumpido por un altercado entre los jugadores de ambos equipos. El suceso se ha desencadenado poco antes del descanso, tras dos entradas por parte del equipo italiano. La tensión escaló cuando el bético Álvaro Vallés empujó a un rival, que derivó en una confrontación física con empujones y golpes entre varios jugadores.

Quizás uno de los momentos más destacados fue cuando el jugador Chucho Hernández, del Betis, intentó golpear a un jugador del Como, pero el impacto del puño alcanzó a su compañero, Natan.

Ante la creciente tensión de la trifulca, el árbitro inicialmente expulsó a Perrone, del Como, y a Bellerín, del Betis, a pesar de que ninguno de los jugadores había participado directamente en el altercado en cuestión. Posteriormente, al término de la primera parte, el árbitro hizo pública la rectificación de su decisión inicial retirando la tarjeta roja a Bellerín para asignarla a Fornals.

Varios jugadores del equipo italiano también recibieron tarjetas amarillas. En el enfrentamiento, Fornals y Perrone se encararon, y en el área técnica, Cesc Fábregas y Riquelme también mantuvieron una discusión.

Betis y Como (2-3)

El Betis ha caído derrotado este miércoles por 2-3 ante el Como italiano en partido amistoso de pretemporada disputado en el estadio Municipal de La Línea de la Concepción.

El Como se adelantó al minuto de juego, con gol del exbético Assane Diao, que anotó el rechace de un penalti lanzado por él mismo y detenido por Álvaro Valles, que sustituyó a Pau López, lesionado cuando cometió la pena máxima.

El equipobético tomó el mando del encuentro en la primera parte dirigido por Francisco Alarcón 'Isco' y tuvo su mejor oportunidad en un cabezazo del brasileño Natan Bernardo que un defensa sacó bajo los palos. El Como anotó su segundo gol en un trallazo desde fuera del área del francés Lucas Da Cunha.

En la segunda mitad, que ambos equipos jugaron con diez futbolistas, el Betis recortó distancias en el minuto 54, al transformar Isco un penalti cometido sobre Sergi Altimira. Lograron empatar los béticos en un centro chut del dominicano Júnior Firpo que entró en la meta italiana después de tocar en un defensa.

Un minuto después, Isco pudo adelantar al Betis, aunque su buen disparo fue repelido por el portero visitante Butez. Valles también intervino de manera acertada en un cabezazo de Marc Oliver, salvando a los béticos del tercer gol, que sí llegó en una acción individual del zaragozano Iván Azón, quien le dio el triunfo al Como en el minuto 91.

La reconstrucción de Isco camino de la selección: el plan para un físico nuevo, las historias de Joaquín, el whatsapp de su agente y el sí de Pellegrini

La reconstrucción de Isco camino de la selección: el plan para un físico nuevo, las historias de Joaquín, el whatsapp de su agente y el sí de Pellegrini

El caballo cartujano debe su nombre a los monjes cartujos que, a finales del siglo XV, criaron la yeguada original de la estirpe en los alrededores de Jerez de la Frontera. Apreciados en todo el mundo por su belleza, la sangre cartujana es, además, codiciada por quienes buscan el cruce ideal para los ejemplares de doma clásica, en la que caballos de hasta 500 kilos dan pasos de ballet. La preparación física, con ejercicios monitorizados, con y sin montura, y una alimentación ad hoc, que incluye suplementos especiales, hacen posible, junto a la docilidad de la raza, que puedan soportar los entrenamientos necesarios, pero esos pasos están en la sangre. Lo mismo le ocurría a Isco Alarcón, dueño de los pasos del duende sobre la hierba, aunque, menos dócil y disciplinado que un caballo cartujano, estuviera desconectado del fútbol de élite desde su errático final en el Madrid, a la espera de encontrar montura en el tiovivo del fútbol.

Isco necesitaba entrenamiento, comprensión y hábitat. Lo primero exigía un cambio en su cabeza, no sólo en su cuerpo. Para lo segundo necesitaba a quien mejor lo ha entendido en un campo de fútbol, que ha sido Manuel Pellegrini. Lo tercero no tiene explicación, era duende por duende. El Betis es una forma muy particular de entender Sevilla, la gran Sevilla de los supervivientes que rompe su geografía, de los artistas y los antihéroes, y en la que el relato importa más que la victoria, al contrario que su, hoy, maltrecho vecino. Isco no se encontró en el Sevilla porque necesitaba a Pellegrini y necesitaba el relato verdiblanco, contado al oído por Joaquín. El tiovivo que jamás se detiene lo devuelve a la selección, y no como un caballo de cartón piedra.

RAÚL ARIAS

Cuando el Madrid ganó la Champions en París, en 2022, la UEFA no inscribió a Isco entre los campeones. La razón es que no había jugado un solo minuto en toda la competición. Había pasado prácticamente un decenio de blanco, de más a menos, siempre irregular. En su primera temporada, que era también la primerísima de Carlo Ancelotti, acabó por ganar la Décima con un importante protagonismo en la crecida del Madrid en la segunda parte de la final de Lisboa, además de la Copa. La comparación entre esas dos Champions blancas era, pues, insoportable, después de años de grandes apariciones y largos desencuentros en un equipo en el que siempre se encontraba a contraestilo, como si fuera el último mohicano de la era de la posesión en la tierra del vértigo y la verticalidad. El carácter, a menudo indolente, tampoco le conectaba con la idiosincrasia racial del Bernabéu. Si quedaba algún refugio, era la selección, pero se acabó de desmoronar con el partido que llevó la posesión al absurdo, en el Mundial de Rusia ante los locales. Isco fue titular.

A los 30 años, se imponía, pues, un cambio, pero debía ser en dos direcciones, hacia afuera y hacia dentro. Un equipo nuevo, pero también un Isco nuevo, más sacrificado consigo mismo. Convencido, el jugador contactó con Rodrigo Carretero. Diseñaron un programa específico, con dobles sesiones, y un plan de alimentación a la medida, con la suplementación necesaria. «Nos encontramos a un futbolista que había perdido la dinámica y la motivación en el Madrid. Cuando llegó al Sevilla, estaba ya al 100%, en mi opinión, pero meses después, cuando fichó por el Betis, su estado de forma era del 110%», explica Carretero. El torso era distinto al de sus peores épocas en el Madrid.

El Sevilla fue su elección, nada más dejar el Bernabéu, pero en diciembre rompió su contrato. No era lo que buscaba. Surgió la oferta del Unión Berlín, pero antes de aceptarla, Isco pidió a Pedro Bravo, su agente, que llamara al Betis. La razón era que allí se encontraba Pellegrini, el entrenador que mejor partido había sacado del de Arroyo de la Miel. Había sido precisamente en su tierra, en un Málaga que llegó a soñar con la Champions, detenido en cuartos por el emergente Borussia Dortmund de Jürgen Klopp, y donde también había coincidido con Joaquín, que le explicó todo lo que se podía saber sobre su Betis, al que había regresado para decir adiós.

El buen criterio de Ramon Planes

El whatsapp de Pedro Bravo sorprendió a Ramón Planes, entonces director deportivo verdiblanco, cuando el Betis se encontraba en la pretemporada, en Inglaterra. Sorprendido, Planes llamó al representante y le dijo: «Déjame que hable con Manuel [Pellegrini] y, si lo ve, hablaré con el jugador». El entrenador dio luz verde a la prospección. «Hablamos con Isco ambos por separado, Manuel y yo, y los dos coincidimos en probarlo. Charlamos sobre fútbol, sobre sus propósitos y su ilusión. En el consejo de administración había dudas, pero aceptaron nuestro criterio y el fichaje se cerró en menos de dos días, creo que es el más rápido que he visto», añade Planes, en la actualidad a los mandos de la dirección deportiva del Al-Ittihad de Benzema.

Cucurella e Isco, en Las Rozas.

Cucurella e Isco, en Las Rozas.RFEF/Ángel MartínezEFE

«De su técnica no teníamos dudas, porque era un futbolista contrastado, pero lo que nos sorprendió mucho fue su capacidad de liderazgo, algo que no esperábamos», concluye Planes. En su segunda temporada en el Betis, ya sin Joaquín, Isco ha ejercido con madurez y con el brazalete de capitán, algo que, según ha confesado, le ha hecho sentir responsabilidades desconocidas, del mismo modo que la consolidada estabilidad familiar, casado finalmente con la actriz Sara Sálamo, junto a la que tiene dos hijos, más uno de una relación anterior.

«Sólo había sido capitán por ausencia de otros en el Madrid o en la selección», confiesa Isco, a sus 33 años. A esa selección regresó, ayer, tras caer en la final de la Conference contra el Chelsea de Cucurella, que le recibió en Las Rozas con un abrazo y una frase: «Ahora me toca disfrutarte». A todos.

La victoria del 'hijo' sobre el 'padre', la maldición del Betis y el tinte de Caicedo: "Seguro que Pellegrini se alegra por mí"

La victoria del ‘hijo’ sobre el ‘padre’, la maldición del Betis y el tinte de Caicedo: “Seguro que Pellegrini se alegra por mí”

Resultaba difícil eclipsar a un jugador que nunca había perdido una final europea, que acumulaba cinco Champions en su palmarés y que vivía una segunda juventud en un renacido Betis. Isco fue el futbolista que todo el mundo esperaba que fuera en Breslavia, el problema es que sus compañeros no le acompañaron, especialmente un Antony ausente y desconectado del juego, principalmente por la estrecha vigilancia de Cucurella, sobresaliente toda la noche. "La primera parte muy bien, tuvimos opciones de ir con algún gol más, de la segunda nos han sobrado 30 minutos", apuntó el malagueño.

Pero la final de la Conference resultó más un escenario de un mérito que de una debacle, aunque tras el descanso el Betis, especialmente a nivel defensivo, dejó mucho que desear. "En la segunda han empezado a hacer daño en el lado donde hemos tenido que hacer dos cambios por lesión y no es fácil entrar y mantener el nivel", reflexionó Bartra. Los sevillanos recibieron cuatro tantos en media hora y la gran mayoría por obra y gracia de un futbolista sobresaliente y que quiere coger el testigo del duende del malagueño.

Cole Palmer demostró que es la estrella emergente de este Chelsea y quizás más rutilante que emergente. El británico no había terminado esta temporada como la empezó, pero en este partido quiso demostrar con dos jugadas la calidad que tiene. "El mal momento de palmer le hará mejor jugador. Sabemos que es top, hay que ayudarle a estar en el mejor posición en el mejor momento", concedió su técnico Enzo Maresca. Lo peor es que Jesús Rodríguez salió en ambas fotos. El canterano bético se comió un triple recorte que dio espacio a poner el centro del primer tanto Blue y también la pisadita que dio origen al segundo. El tercero y el cuarto ya fueron contras con el Betis volcado. De hecho el último fue obra de Caicedo, que tiene un secreto para anotar. "Cada vez que me tiño el pelo marco", confesó el ecuatoriano.


Los británicos se agarraron a la magia del dorsal 20 que terminó siendo elegido como MVP de la final. Esas dos asistencias no solo remontaron el choque sino que hundieron psicológicamente a un Betis que ya venía con una mochila llena de 118 años de historia. "Se le ha notado la calidad y la capacidad de hacer daño", le alabó Bartra.


La desgracia para el Betis es que, con la derrota de ayer, rompe una racha de 24 años sin perder una final que acumulaban equipos españoles. Habían sido 19 finales consecutivas ganadas ante rivales no españoles. Una efeméride triste que se ha encontrado además con la felicitación del Sevilla, el eterno rival, a Maresca, ex jugador hispalense de principios de siglo. "Ganar un trofeo es un punto de partida. Da mentalidad ganadora. Y nos hará mejores", explicó el técnico italiano.

El técnico del Chelsea confesó que había hablado con Pellegrini en la víspera y tanto antes como después del partido. Le tiene mucho que agradecer en lo que a aprendizaje táctico se refiere, le llama su 'padre' futbolístico, ya que fue su segundo en la aventura británica del chileno en el West Ham. "Coincidimos que él quería ganar por un lado yo por el otro. El que ha perdido está contento por el otro. Por suerte hemos ganado nosotros", explicó el técnico blue sobre las conversaciones entre ambos.

Padre e hijo

El del Betis, en cambio, se mostró muy triste por el encuentro. "Es una de las noches más duras para mí, claro, pero nos enfrentábamos al Chelsea, no es un rival menor. Me deja peor que les superamos en el primer tiempo", lamentó un técnico con grandes logros en campeonatos nacionales, pero ningún éxito europeo. Villarreal, City, Málaga y Real Madrid, en todos ha caído antes del último partido. En esta ocasión el destino ha querido ser más cruel. "El segundo tiempo fue condicionado por las lesiones, de Ricardo y Abde, nos hicieron más daño por la izquierda y con esos goles le dieron la vuelta en pocos minutos", detalló.

Mientras el Chelsea afronta en un par de semanas el Mundial de Clubes del que su técnico aún no quiere ni hablar, el Betis comienza desde ya sus vacaciones con ganas de volver más fuerte el curso que viene. "Tenemos que partir de cero la próxima temporada, hacer un plantel lo más competitivo posible para Europa League y Liga. Creo que llegar a esta final fue meritorio y también llegar a Europa. Nos queda la amargura de este partido", concluyó Pellegrini.

El Betis casi besó el gran sueño

El Betis casi besó el gran sueño

Actualizado Miércoles, 28 mayo 2025 - 23:40

Un castigo excesivo malogró el gran sueño del bético. Fue una derrota criminal, porque el primer tiempo del Betis de Pellegrini fue una exhibición táctica, técnica y maravillosa. Quizá el solitario tanto de Abde fue precario dado el mérito del Betis.

¿Por qué perdió por cuatro goles a cero en el segundo período? Mi opinión es que fue que el desgaste físico y psíquico de la primera parte. A falta de pulso rítmico y juego para seguir imponiéndose, no tuvo más remedio que replegarse y doblegarse.

El Chelsea tardó, porque el sistema de Enzo Maresca es excesivamente fijo posicionalmente , con jugadores como de futbolín. Los futbolistas parecen castigar a una unidad de juego que precisamente no tiene mucha imaginación goleadora.

Tuvo que ser el talento de Palmer el que abrió la imaginación. Su centro sobre Enzo fue magistral. Era sólo el empate, pero para el equipo de Pellegrini fue como una losa .

Tiró la toalla psíquicamente. Se vio ya perdido. Los cambios vitales del poderío millonario del Chelsea hicieron el resto, con una goleada final absolutamente humillante, donde marcó hasta Caicedo.

Por cierto, vaya bendición de jugador. Es técnico, no se cansa nunca. Me recordaba al estilo de Makelele y encima casi nunca se equivoca. Él y Palmer fueron los dos jugadores fundamentales para la exagerada goleada del Chelsea.

¿Qué decir de Isco? Que es maravilloso y único hasta que le fallan las fuerzas, pierde físico como fue costumbre en toda su carrera. Él sólo no puede con todo el peso del equipo cuando el centro del campo no le ayuda y encima Antony no apareció en todo el partido.

Y sin Antony no hay oasis goleador. Es cierto que Cucurella tuvo gran culpa de que el brasileño no fuera lo que es.

En fin, da rabia y tristeza que el Betis haya casi besado su gran sueño y el beso fuera borrado abruptamente por el poderío y el dinero del Chelsea.

En cualquier caso, jugar una final de una competición europea ya es una hazaña de por sí. Y el primer tiempo del Betis en Polonia quedará inscrito en mayúsculas en la historia del Betis.

El dinero puede a la ilusión y el Betis alarga su maldición en Europa ante el Chelsea

El dinero puede a la ilusión y el Betis alarga su maldición en Europa ante el Chelsea

A veces la historia pesa como una losa. El Betis tuvo 118 a sus espaldas, apretándole, ahogándole, impidiéndole desarrollar el arte, el duende que este equipo ha mostrado especialmente en esta última parte del año gracias a la sociedad Isco - Antony. Murió el equipo sevillano en la orilla ante el dolor de 12.000 almas que nunca pararon de animar, que siempre creyeron, pero cuyo aliento no sirvió para doblegar al todopoderoso Chelsea, que se repuso al tanto inicial de Abde con una exhibición de Cole Palmer y tantos de Enzo, Jackson y Sancho. [Narración y estadísticas, 1-4]

No es un equipo, sino un ejército lo que tiene Maresca a su disposición. Casi 30 jugadores ha utilizado en esta competición en la que se han paseado con puño de hierro. Apenas una vacía derrota ante el Legia en cuartos de final. El dinero, la diferencia que exhibía Isco con sorna en la previa se ha impuesto a la ilusión. Y eso que el malagueño no fue un cualquiera en este duelo, fue el general que planificó la guerra, pero resultó Leónidas ante los persas.

En la primera batalla, ambos equipos quisieron incomodar al rival desde el inicio. Presiones altas y forzando a los porteros de tal manera que Adrián fue el jugador que recibió la primera falta. En unos primeros cinco minutos frenéticos, el balón transitaba de área a área en apenas segundos en busca de un fallo, de un error. Y éste llegó pronto.

Adivinó Johnny un pase de Gusto y cedió el estadounidense a Isco que atrajo a la defensa tanto que olvidaron a Abde solo en un costado. El malagueño cedió en el momento justo para que el extremo cruzara el disparo ante Jorgensen. El sueño estaba más cerca y Johnny casi lo abraza cinco minutos después con otro robo y un disparo desde 40 metros que a punto estuvo de sorprender al portero sueco. Si Pellegrini había pedido a los chicos que siguieran fieles a sí mismos, éstos acusaron el recibo.

Y entonces Isco agarró el balón, lo domó, lo mimó, lo recuperó, lo pasó y los del Chelsea miraban, pero no podían quitárselo. Antony, Johnny, Abde, Bartra todos buscaban al malagueño, al hombre de las finales y este respondía. En otro desplazamiento que terminó en la banda del hispanomarroquí, éste ganó la porfía a Gusto, recortó a Caicedo y cedió a Johnny sin vigilancia en el punto de penalti. Su disparo se fue alto porque desvió ligeramente Badiashile. A los puntos el Betis estaba siendo muy superior al Chelsea, pero el fútbol va de tumbar al rival y los ingleses seguían de pie.

Lideraba la resistencia Cole Palmer. El joven británico ha bajado el nivel mostrado en el último curso. Llevaba tiempo sin dar escalofríos, 15 tantos y 9 asistencias en ésta frente a los 22/11 que firmó la anterior. Cada vez que la cogía y encaraba, la grada bética parecía silenciarse. Está claro que la calidad y el duende habitan en Sevilla y en el oeste de Londres.

Segunda parte horrible

Y cuando parecía que nada estaba pasando, con el partido adormilado el inglés se inventó un triple recorte sobre Jesús, la puso al corazón del área y apareció Enzo para cabecear a la red. Las armas volvían a estar en alto, pero con menos tiempo, menos energía y peor dinámica para los chicos de Pellegrini. De hecho, el británico quiso decir a Isco y a Polonia que él también estaba aquí, y de qué manera, realizó una pisadita de nuevo sobre Jesús y lanzó un centro milimétrico a Jackson, que empujó con el pecho. La cuesta se empinaba y los miedos aparecían.

El Betis tenía a Isco, pero necesitaba a Antony, bien vigilado por Cucurella durante todo el encuentro. Los de Pellegrini debían recuperar el duende de la primera mitad, pero el Chelsea amenazaba a la contra. Y terminó por sentenciar el partido a través de ella. Dos fogonazos de Sancho y Caicedo pusieron ya imposible el duelo y silenciaron el fondo norte del estadio de Breslavia. El sueño se escurría entre los dedos y la historia se convertía en interminable. La realización se centraba en las lágrimas de los béticos. De dolor, de impotencia, de ilusión perdida. Ganó el dinero.

Cuatro españoles detenidos en una noche de enfrentamientos entre ultras de Chelsea y Betis en Breslavia antes de la final de la Conference

Cuatro españoles detenidos en una noche de enfrentamientos entre ultras de Chelsea y Betis en Breslavia antes de la final de la Conference

Cuatro aficionados españoles han sido detenidos por la policía polaca en una noche de enfrentamientos entre los seguidores del Real Betis y del Chelsea en la previa de la final de la Conference que enfrentará este miércoles a ambos conjuntos.

Parecía un ambiente de hermanamiento el que vivían las aficiones de Chelsea y Betis por las calles del centro de Breslavia. Con cánticos y contracánticos entre unos y otros especialmente en los alrededores de la plaza del Mercado, centro neurálgico de la ciudad polaca y lugar en el que la UEFA ha establecido el punto de reunión de los visitantes para la final de la Conference.

No obstante, a primera hora de la tarde hubo un primer conato de violencia en una cafetería del centro en el que ultras ingleses y españoles se estuvieron lanzando mobiliario del propio establecimiento y alguna botella que otra.

A primeras horas de la noche, en cambio, un fuerte dispositivo policial pareció controlar y evitar que se repitieran ese tipo de imágenes, pero a medida que fueron avanzando las horas, la plaza del Mercado terminó tomada por ultras de los dos conjuntos y los enfrentamientos entre ambos se recrudecieron.

Con ese lugar del centro de Breslavia ya más vaciado de los miles de aficionados que han venido a apoyar a su equipo, se cree que hasta 15.000 vendrán de parte del Betis, aunque solo 12.000 podrán hacerlo con entrada, los ultras comenzaron a tomar el control y a olvidar los cánticos que cantaron por la tarde al unísino con los del Betis, principalmente los que se metían con el eterno rival de la capital hispalense.

Así, la plaza del Mercado se convirtió en una batalla campal con numerosos lanzamientos de objetos, botellas y demás agresiones entre ultras del Chelsea y del Betis. Algunas páginas especializadas en el movimiento ultra hablaban del grupo radical bético United Family.

La policía polaca tuvo que intervenir de inmediato con lanzamiento de gas y despliegue de antidisturbios "lo que evitó una mayor escalada del conflicto o comportamientos negativos", escribió la Jefatura Provincial de Breslavia en un comunicado. "La cantidad de fuerzas policiales preventivas y operativas, junto con su presencia constante en los puntos donde se reúnen o circulan residentes y aficionados deportivos, es tan grande que todos pueden sentirse seguros", continuó el comunicado.

Según informaron fuentes polacas, cuatro aficionados españoles han resultado detenidos por estos enfrentamientos. Uno de ellos ha sido por conducta agresiva y otros tres por el robo de unas banderas de la afición rival en las fan zones.

Dos aviones, tres trenes y horas de esperas en las escalas para llegar desde Sevilla a Breslavia: las locuras de los béticos para llenar a la final de la Conference

Dos aviones, tres trenes y horas de esperas en las escalas para llegar desde Sevilla a Breslavia: las locuras de los béticos para llenar a la final de la Conference

Hay béticos en las puertas de embarque de prácticamente todos los destinos europeos a los que se puede volar desde del aeropuerto de Sevilla, como si, en lugar de una final, el Betis jugara seis u ocho simultáneas en diferentes puntos del mapa. Los aficionados hacen cola para viajar a París, a Praga, a Lisboa, a Copenhague, a Barcelona, a Venecia. El caso es encontrar una conexión que permita llegar a Breslavia (Polonia) a tiempo para estar en el estadio donde se disputa la final de la Conference League. O en sus alrededores, porque no todos tienen entrada para ver el partido frente al Chelsea.

La afición bética tiene fama de ser absolutamente fiel en la adversidad (ya saben, lo del maldito manquepierda). Pero, como a todas, lo que le motiva es ganar y acariciar un título. Por eso las entradas han volado y muchos béticos han exprimido las posibilidades del mapa digital de conexiones aéreas y ferroviarias para conseguir estar este miércoles en la ciudad polaca. Aunque haya que hacer escala por media Europa.

Alberto, por ejemplo, salió este martes desde Sevilla a las 6.45 horas en un vuelo a Barcelona, donde ha conectado con otro vuelo a Berlín. Desde Berlín a Breslavia ha necesitado coger tres trenes diferentes. La noche del miércoles (tras el partido) la pasará en el piso de un amigo junto a sus padres y hermanos, que también han volado desde Sevilla. El regreso lo hará en tren hasta Varsovia, donde cogerá un vuelo a Zurich y, tras una escala de 8 horas y media, volará finalmente a Sevilla. En total, sólo el transporte hasta Breslavia le ha costado unos 400 euros. Cuando él y su hermano comenzaron a buscar vuelos, aún no tenían las entradas, que han conseguido finalmente de las sobrantes de la UEFA, a 190 euros. Francisco también ha volado desde Sevilla a Praga y desde allí ha pillado un coche para hacer casi 300 kilómetros (unas tres horas de viaje) hasta la ciudad donde se celebra la final.

El AVE también ha viajado en las últimas horas cargado de béticos que buscaban conexiones desde Madrid. Miguel llegó así a la capital de España y desde allí cogió un vuelo a Bruselas donde, tras una breve escala de 40 minutos que le obligó a alguna carrera por el aeropuerto, cogió un avión hasta Berlín. El trayecto desde Berlín a Breslavia (346 kilómetros) tenía previsto hacerlo en coche.

11 horas de viaje desde Málaga

Eusebio ha viajado desde Málaga, de donde salió a las 8.30 horas del martes hasta Dublín y desde allí hasta la ciudad polaca de Poznan, donde cogió un tren a Breslavia. En total, fueron 11 horas de viaje.

También Pedro partió desde Málaga y aterrizó en Varsovia. Desde allí cogió un coche con el que viajó a Lodz (Polonia) y después a Breslavia. El regreso será también por carretera hasta Cracovia y desde allí hasta Málaga. Más fácil lo ha tenido Andrés, que vive en Dublín y cogió un vuelo directo a Breslavia.

Otros nueve béticos salieron de Málaga el martes a las 13.15 horas. Llegaron a Frankfurt en tres horas. A las 21 horas salieron hasta Katowice, ya en suelo polaco, a donde llegaron algo antes de las 23 horas. Hicieron noche en Bytom y allí han cogido por la mañana una furgoneta para conducir hasta Breslavia (171 kilómetros).

Hay también muchos 'privilegiados' que llegarán hoy a la ciudad polaca en vuelo directo en uno de los chárter que se han habilitado para conectar desde Sevilla. El billete, comprado poco después de que el Betis superara la semifinal, ronda los 1.000 euros. La mayoría de los que viajan en el día regresarán, ya de madrugada, tras el partido, con lo que se ahorran la estancia a costa de un extra de cansancio para sus huesos. Un triunfo en la final europea aliviará, sin duda, cualquier dolencia.

Pero quienes realmente han triunfado ya son aquellos que compraron los vuelos en febrero, a poco más de 100 euros, mucho antes de que la marcha de la competición permitiera garantizar que el Betis estaría en la final, en un alarde de fe digno de un verdadero creyente.

Cuando termine la aventura europea del Betis, el aeropuerto sevillano de San Pablo habrá atendido un total de 48 vuelos chárter entre salidas y llegadas, según ha informado el aeródromo a través de una nota de prensa, donde se subraya la complejidad de operar todas estas conexiones extraordinarias y hacerlas compatibles con las 180 conexiones comerciales diarias.

Para que las salidas y llegadas se realicen de forma escalonada, se ha previsto prorrogar los horarios y reforzar el personal. También ampliarán sus horarios los servicios de restauración y se han reordenado los aparcamientos para hacer más fluida la llegada y el estacionamiento.