Los Chiefs de Travis Kelce (y Taylor Swift) quieren ser los siguientes en jugar un partido de la NFL en España: “Sueño con eso, sería increíble”

Actualizado Jueves, 13 noviembre 2025 - 23:12

La equipación de los Kansas City Chiefs es roja, amarilla y blanca, colores que empujan a la mente directamente hacia España. Hacia ahí quieren ir los directivos y las estrellas de la franquicia, que han mostrado públicamente su deseo de jugar en España el siguiente partido de la NFL. «Sueño con hacerlo, sería increíble. La NFL se está expandiendo y espero que tengamos esa oportunidad», expresó a EL MUNDO Travis Kelce, estrella del equipo junto a Patrick Mahomes y novio de la cantante Taylor Swift, circunstancia también clave en la expansión internacional de la organización.

Los Miami Dolphins y los Washington Commanders disputarán este domingo el primer partido oficial de la liga norteamericana en nuestro país, pero la tentación ya se ha trasladado a más franquicias pensando en los próximos años. Los Chicago Bears y los Kansas City Chiefs tienen derechos comerciales exclusivos sobre el territorio nacional, así que desde ya están intentando posicionarse para disputar el segundo partido, que podría ser de nuevo en el Bernabéu, en el Metropolitano o en el Camp Nou. «Esperamos jugar en España. Y si eso sucede, el lugar donde juguemos influirá en con quién nos asociemos», explicó a este periódico Mark Donovan, presidente de los Chiefs.

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La franquicia del estado de Missouri hará acto de presencia en los alrededores del Bernabéu con la 'Chiefs House', una carpa gigante en la que realizará actividades y venderá merchandising de un equipo que casi no necesita presentación. Han disputado cinco de las últimas seis Super Bowl y han ganado tres, situándose como la gran dinastía de la liga tras el fin de los New England Patriots de Tom Brady. Y por si fuera poco, la relación entre Kelce, una de sus grandes estrellas, y Taylor Swift, icono mundial, les ha dado un foco mediático que piensan aprovechar para convertirse, dicen, en «el equipo del mundo».

«Creemos que tenemos todo para lograrlo. Un entrenador que entrará en el Salón de la Fama, un quarterback histórico como Patrick (Mahomes), estrellas como Travis (Kelce), Chris Jones... Y el detalle de Taylor (Swift). No podemos garantizar la victoria para siempre, así que nuestro deber y responsabilidad es aprovecharlo», explica Lara Krug, vicepresidenta de la franquicia, en una charla con este periódico.

La expansión de la NFL y de los Chiefs llega ahora a Madrid después de años de pruebas, partidos y actividades en otros países. España está verde todavía en cuanto al fútbol americano, pero es precisamente ahí donde reside la oportunidad que varias franquicias quieren aprovechar, entre ellas Kansas City. «Vimos una gran oportunidad porque España no estaba tan bien posicionada como Alemania sobre la NFL, no tenía la misma afición, pero por eso era una oportunidad. Podíamos estar presentes en el mercado rápidamente. Nuestra estrategia es intentar dominar Europa. Y en eso estamos», aseguran.

Así ha transformado la NFL el Bernabéu con dos millones de euros: gradas, vestuarios, salas de prensa, tienda... Y paneles contra el ruido

Así ha transformado la NFL el Bernabéu con dos millones de euros: gradas, vestuarios, salas de prensa, tienda… Y paneles contra el ruido

La NFL ganó 23.000 millones de dólares el año pasado, cuatro veces más que la Liga y la Premier Aunque muchos de ustedes no la sigan, se trata de la competición con mayores ingresos del mundo. Más que la NBA o la MLB de béisbol (11.000). Nadie se le acerca. Y la NFL, ocupando el trono millonario del deporte desde Estados Unidos, quiere crecer y expandirse. Ha celebrado partidos en cinco países extranjeros (Reino Unido, Irlanda, Brasil, Alemania y México) y llega ahora a España, al Santiago Bernabéu, donde se dejará dos millones, cifra irrisoria viendo su bolsillo, para transformar el coliseo del Real Madrid en el gran show del deporte americano.

Este domingo, los Miami Dolphins y los Washington Commanders disputarán uno de los partidos de la jornada 11 de la temporada regular. Allí utilizan el término 'semana', pero mantengamos la tradición. Este curso, la liga ya ha tenido encuentros en Sao Paulo, Dublín, Londres (dos en el estadio del Tottenham y uno en Wembley) y Berlín, y el modus operandi de la organización norteamericana es siempre el mismo: la NFL no se adapta al entorno, sino que convierte el entorno en su propia casa. Eso hará con el Bernabéu.

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La transformación será total en el campo, en la grada, donde desaparecerán los escudos del Madrid, y en el interior. El césped del coliseo blanco mide 105 metros de largo, mientras que los de la NFL se van hasta los 109 (120 yardas). 100 yardas de 'juego' y 10 en cada extremo, donde se sitúan las zonas de touchdown. Ahí, la organización ha ganado metros a las gradas del Fondo Norte y Sur quitando filas de asientos.

En los laterales también se están realizando modificaciones. Olvídense de los banquillos que suelen ver en el fútbol. En la NFL, los equipos se sitúan cada uno en una banda del terreno de juego, en todo lo ancho. Son 53 jugadores y decenas de asistentes, el triple que una plantilla de 'soccer'. La ventaja en este sentido es que el ancho en la NFL es más corto que en el fútbol y no serán necesarias obras en las primeras filas de los laterales, aunque sí se han realizado modificaciones en los túneles que van al vestuario.

Vestuarios y salas de prensa

De nuevo, olvídense de la imagen futbolera. Las plantillas no saldrán por las escaleras que suelen utilizar el Madrid y sus rivales, sino que se han creado dos zonas en ambas esquinas de los banquillos para que los jugadores y los entrenadores salgan desde los vestuarios con más espacio y comodidad. Además, algunos de los miembros del cuerpo técnico se colocarán en las cabinas de televisión para seguir el partido desde lo alto. Unas obras que han obligado a cerrar el Tour del Bernabéu de jueves a domingo.

Para que esos 53 jugadores se cambien y se duchen, se han ampliado los vestuarios y se ha colocado una nueva sala de prensa en la sala donde se realiza la zona mixta, ya que cada equipo usa una sala de prensa diferente. Hasta eso ha transformado la NFL, que no quiere que el día a día de las franquicias lejos de sus fronteras sea diferente al de 'casa'.

La 'fan zone' de los Dolphins, el jueves en Madrid.

La 'fan zone' de los Dolphins, el jueves en Madrid.EFE

En el interior, el Museo Bernabéu ha dejado espacio al Museo de la NFL, una serie de rincones por todo el estadio en los que los aficionados podrán conocer equipaciones históricas y reliquias de la liga.

El Madrid, a través del departamento que se encarga del estadio, denominado ya 'Bernabéu', también ha cedido gran parte del espacio de la tienda oficial para que la NFL venda ahí todo su merchandising, no sólo de Miami y Washington, sino de todas las franquicias de la liga.

Una 'mini Super Bowl'

En lo alto del estadio ya no estará el escudo del conjunto blanco, sino que gobernará el techo del Bernabéu la bandera de España, la de la NFL y la de Estados Unidos, cuyo himno sonará en la previa. En el descanso habrá una actuación estelar de Daddy Yankee y Bizarrap, intentando imitar el show de una Super Bowl. No en vano, los responsables de la liga ya dejaron claro en este periódico que querían «hacer una mini Super Bowl en el Bernabéu». Ese espectáculo deportivo y cultural es lo más conocido de la NFL fuera de sus fronteras, y no podía faltar en el partido de Madrid.

Al hilo de la actuación, los operarios han trabajado esta semana instalando diferentes paneles para tapar algunas zonas de lo alto del estadio para tratar de reducir el ruido exterior para evitar problemas con los vecinos, que denunciaron al Madrid por pasar los niveles de decibelios permitidos en la zona. La hora del partido (15:30) ayudará, pero el club no quiere correr riesgos.

Un casco gigante de la NFL, el jueves en el Palacio de Cibeles.

Un casco gigante de la NFL, el jueves en el Palacio de Cibeles.AP

Más allá del Bernabéu, la ciudad se ha engalanado para la ocasión. La Comunidad de Madrid y el ayuntamiento han invertido 3,3 millones de euros (1,5 el gobierno de Ayuso y 1,8 el de Almeida) para promocionar el partido, que aparece en todas las calles del centro de la ciudad gracias a unos carteles colocados en lo alto de las farolas. Las instituciones esperan un impacto económico de 70 millones de euros, fruto de todas las acciones publicitarias que se generarán a lo largo y ancho de la capital. Habrá actividades en Cibeles, Plaza Mayor, Sol o Vallehermoso, y presencia de otras franquicias que no juegan el partido, como los Kansas City Chiefs o los Chicago Bears.

El Bernabéu actuará como «punto de inflexión», así lo admite la organización, para la expansión definitiva de la NFL en España.

Super Bowl: Los Philadelphia Eagles humillan a Patrick Mahomes delante de su fan Donald Trump

Super Bowl: Los Philadelphia Eagles humillan a Patrick Mahomes delante de su fan Donald Trump

Eligió un mal día Donald Trump para convertirse en el primer presidente de Estados Unidos en acudir a una Super Bowl. O, al menos, eligió mal a quién dar su apoyo. Horas antes del partido declaró su amor por Patrick Mahomes y, aún más, por su mujer Brittany, fan declarada del republicano (o lo que sea). Ni siquiera le desanimó compartir la bufanda de los Chiefs con su odiada Taylor Swift, que le hizo más daño en las elecciones que Kamala Harris, y su novio, Travis Kelce, la otra gran estrella de Kansas City y supervillano en el planeta MAGA por ser el rostro de la campaña de vacunación durante la pandemia. Nada de eso desanimó a Trump porque él había ido a Nueva Orleans a ganar y, jubilado Tom Brady, nadie acerca tanto la victoria en la NFL como Mahomes. Un rato después, los Philadelphia Eagles celebraban el título tras una de las mayores humillaciones de la historia (40-22, gracias al maquillaje final).

No fue una victoria, fue una aniquilación, un partido para el que se deberían haber recuperado los dos rombos. Hay cosas que los niños no deben ver. La primera vez que Kansas City cruzó el mediocampo, acababa el tercer cuarto, perdía ya 34-0 y los Eagles pensaban ya en dónde ir a celebrarlo.

No necesitó siquiera el equipo dirigido por Nick Sirianni, que ha pasado en un año de hombre-meme cuya cabeza peligraba a campeón, un gran partido de su superestrella ofensiva, Saquon Barkley, que cerró el, seguramente, mejor año que se ha visto de un corredor con una actuación discreta para sus estándares. Más brillante estuvo su quarterback, Jalen Hurts (nombrado MVP con dos touchdowns de pase y otro de carrera), pero tampoco necesitó grandes heroicidades. La Super Bowl se decidió cuando ambos descansaban, en el ataque de unos Chiefs absolutamente destrozados por la defensa que vestía de verde. Fue una exhibición. Si hubiera sido boxeo, la esquina de Mahomes habría tirado la toalla antes del descanso.

Donald Trump, junto a su hija Ivanka y su nieto Theodore, en la Super Bowl.

Donald Trump, junto a su hija Ivanka y su nieto Theodore, en la Super Bowl.AP

Una y otra vez, liderados por un sensacional Josh Sweat (probablemente más merecedor del MVP que Hurts, pero el ataque siempre reina), golpearon al mejor jugador del planeta hasta convertirlo en un pelele que regaló dos intercepciones impropias a los fantásticos Cooper DeJean y Zack Baun. Y es que, para poner en perspectiva la obra de arte de la defensa coordinada por Vic Fangio, hay que recordar que Mahomes, aún sin cumplir los 30, buscaba su cuarto título (el segundo, contra estos mismos Eagles hace dos años) y el tercero seguido, un triunfo que le haría mirar ya sólo hacia Brady (siete anillos y que comentaba su primera Super Bowl en la tele) y la Historia. Aún está a tiempo, pero de Nueva Orleans salió su leyenda magullada.

Todo estaba ya resuelto (24-0) cuando Kendrick Lamar salió a actuar en el descanso. No fue el espectáculo más brillante que hemos visto, la propia NFL le había puesto la zancadilla sacando a Beyoncé a hacer magia en la jornada navideña, pero sí uno de los más morbosos. Primero, porque terminó de rematar al pobre Drake cantando ‘Not like us’ ante el mundo entero y acompañado de Serena Williams y Samuel L. Jackson. Tanto flow es abusar. Segundo, porque uno de los bailarines lució un buen rato una bandera palestina mientras regateaba a seguratas como Lamine Yamal a defensas. Tercero, porque nunca ha ocultado su (pésima) opinión sobre un Trump que le observaba desde el palco con cara de estar pensando a cuántos de esos tipos que en nada se parecían a él y a sus amigos podría deportar. A veces, la música no es lo más importante de un show.

La segunda parte fue un plácido paseo de Philadelphia hacia la gloria, hora y media de ver qué famosos aparecían en pantalla. Como siempre, no escaseaban. La citada Taylor Swift (que gestionó conuna fabulosa media sonrisa el tremendo abucheo de la afición de los Eagles al verla en el videomarcador), Jay Z, Kevin Costner, Bradley Cooper, Adam Sandler, Paul McCartney... y una llamativa representación de nuestro fútbol: Messi, Rodri, Griezmann, Koke, Luis Suárez, Busquets... Todos viendo cómo los Eagles ponían en pausa el ascenso de Patrick Mahomes a la sala más exclusiva del Panteón de los quarterbacks. Tendrá más oportunidades, no lo duden. Para la próxima, tal vez decida pedirle a Donald Trump que se quede en casa. Una humillación así tarda en curarse. Si es que se cura...

Las reglas de juego de la NFL para entender la Super Bowl: del papel del 'quarterback' a cómo se anotan los puntos

Las reglas de juego de la NFL para entender la Super Bowl: del papel del ‘quarterback’ a cómo se anotan los puntos

La final de fútbol americano, conocida como Super Bowl, es el partido que proclama al campeón de una liga disputada por 32 equipos pertenecientes a las principales ciudades de los EEUU y divididos en dos conferencias: Conferencia Nacional (NFC) y la Conferencia Americana (AFC). A su vez cada una de ellas se subdivide en otras cuatro: Norte, Sur, Este y Oeste.

Tras disputarse 17 partidos, repartidos en 18 semanas, se clasifican 14 equipos para los playoffs, 7 por cada conferencia y de ahí salen los dos finalistas. Éste año los dos finalistas son los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles. El partido tendrá lugar en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, en Luisiana EEUU, a partir de las 00.30 horas, hora peninsular española.

La duración de un partido de la NFL (National Football League) se puede alargar más de tres horas, aunque el tiempo real de juego es de una hora repartida en cuatro cuartos de 15 minutos cada uno. El reloj se detiene solo cuando la pelota se sale de los márgenes del terreno de juego pero las lesiones, la repetición de las jugadas en pantalla para su revisión, las faltas y un intermedio largo, prolongan el partido varias horas.

Las actuaciones del descanso superan en audiencias al partido

Durante el descanso tiene lugar una de las actuaciones musicales más esperadas del año. Michael Jackson (1993), Tina Turner (2000), U2 (2002), Rolling Stone (2006), Bruce Springsteen (2009), Madonna (2012), Coldplay (2016) o Lady Gaga (2017) han sido algunas de las más recordadas con el paso de los años. Para esta edición la responsabilidad recae en el rapero californiano Kendrick Lamar, reciente ganador de 5 premios Grammy. Los más agoreros no descartan que el cantante interprete junto a Taylor Swift el tema 'Bad Blood', tema que lanzaron hace 9 años.Por su parte, Jon Batiste cantará el himno nacional con Donald Trump, Leo Messi o Taylor Swift en las gradas.

ALGUNOS DETALLES PARA ENTENDER LAS REGLAS DEL JUEGO

El terreno de juego mide más de 100 metros de longitud y unos 50 metros de ancho, similar en longitud a un campo de fútbol de la Liga española pero más estrecho. Cada equipo debe intentar llevar la pelota a las zonas de anotación, conocidas como 'End Zones' situadas en ambos extremos para lograr puntuar. El equipo contrario debe impedirlo buscando el contacto físico como el choque o el placaje, no estando permitido agarrar.

Cada equipo está formado por 53 jugadores divididos en tres grupos, ataque, defensa y equipos especiales aunque en el terreno de juego solo juegan 11. La brutalidad de algunos placajes exige que cada jugador esté equipado con casco y protecciones en la parte superior e inferior del cuerpo. La condición física de los jugadores es muy exigente, hasta el punto de que algunos corredores del equipo podrían competir con los grandes velocistas olímpicos.

CÓMO SE PUNTUAN LAS DIFERENTES ACCIONES

Cuando un jugador llega a la zona de anotación con el balón se anotan 6 puntos. Puede llegar corriendo sorteando a los rivales o encontrándose desmarcado en la zona y recibir un pase del ‘quarterback’. Cualquiera de estas estas dos acciones valen 6 puntos (Touchdown!).

Tras cualquiera de estas dos acciones, los atacantes disponen de un punto extra si logran patear desde la línea de 15 yardas y meter la pelota entre los dos postes. Esta acción vale 1 punto. (Punto extra!).

Si tras tres intentos no han logrado avanzar 10 yardas, el equipo especial del pateador entra en el campo. Si la pelota se encuentra a una distancia adecuada para el pateador, éste intentará pasar la pelota entre los dos postes. Esta acción vale 3 puntos, (Fieldgoal!).

Por ultimo, la acción más improbable, cuando la defensa logra placar a un atacante en su propia área de anotación en la ‘End Zone’.
Esta acción vale 2 puntos,
(Safety!).

DAZN, Forbes, Wikipedia, Universidad 'North Carolina NC State University' , 'Super Bowl: A Money Machine, But for Whom?' by Mike Edwards, profesor de 'NC State', Nielsen, New York Times y NFL.