El entrenador de boxeo de Samoa muere de un infarto en la Villa Olímpica

El entrenador de boxeo de Samoa muere de un infarto en la Villa Olímpica

Actualizado Sábado, 27 julio 2024 - 16:35

El entrenador del equipo olímpico de boxeo de Samoa, Lionel Elika Fatupaito, murió el viernes en la Villa Olímpica de París-2024 a los 60 años después de haber sufrido una parada cardíaca, confirmó el sábado la fiscalía de Bobigny (cerca de París).

La Federación Internacional de Boxeo (IBA) presentó "sus más sinceras condolencias a la familia, a los amigos y a los colegas", en un comunicado en su página web.

El entrenador se encontraba en su habitación con un deportista cuando sufrió el ataque cardíaco, hacia las 10:20 de la mañana de este sábado (hora de la Península y Baleares)

A pesar de que la intervención de los servicios de emergencia, se decretó su muerte "por causa natural", precisó la fiscalía, añadiendo que no se decidió imponer ningún obstáculo médico-legal para su inhumación. La investigación sobre esta muerte fue confiada a la policía judicial del departamento de Seine-Saint-Denis (región parisina).

Pedro Sánchez y Begoña Gómez animan en París a los judocas españoles

Pedro Sánchez y Begoña Gómez animan en París a los judocas españoles

Actualizado Sábado, 27 julio 2024 - 15:22

El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha acudido este sábado al pabellón del Campo de Marte, construido temporalmente para los Juegos de París, para animar a los judocas Fran Garrigós y Laura Martínez.

Vestido de rojo con la equipación oficial española, Sánchez ha aplaudido las victorias de Garrigós (-60 kilos), que ganó a Ryuju Nagayama (6º) por ippon por estrangulamiento y se clasificó para semifinales, y de Martínez (-48), que se deshizo en el alargue de la serbia Milica Nikoli (sexta) y accedió a cuartos.

A pesar de contar con luchadores de primer nivel, España no gana una medalla en judo desde que Isabel Fernández logró el oro en Sídney 2000.

Sánchez ha conversado animadamente con el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco. También ha estado presente en el pabellón a ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría.

En las fotografías de la delegación española en París también aparecen José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes, y Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez.

El viaje de Pedro Sánchez y Begoña Gómez a París se produce unos días antes de que el próximo martes 30 de julio el presidente del Gobierno preste declaración como testigo ante el juez Juan Carlos Peinado, que investiga a su esposa por tráfico de influencias y corrupción en los negocios.

Sánchez solicitó que esa declaración -prevista para las once de la mañana- se realizara por escrito, una petición que el juzgado de instrucción 41 de Madrid desestimó, por lo que finalmente tendrá que responder de forma oral y en el complejo de La Moncloa, adonde se desplazará el juez Peinado.

Alegría y tristeza entre los olímpicos ucranianos en París: "Luchamos por los que, por desgracia, no pueden venir"

Alegría y tristeza entre los olímpicos ucranianos en París: “Luchamos por los que, por desgracia, no pueden venir”

Para los competidores ucranianos que participan en los Juegos Olímpicos de París, la alegría va de la mano de la tristeza.

Los atletas se esfuerzan por disfrutar del sueño de competir en uno de los acontecimientos deportivos más prestigiosos del mundo, al tiempo que cargan con el peso de la guerra en su país.

"Cuando leemos las noticias, nos sentimos muy disgustados", declaró Polina Buhrova, una jugadora de bádminton de 20 años que participa por primera vez en unos Juegos.

Los alojamientos de los atletas de todo el mundo están adornados con banderas y lemas en la villa olímpica. En la casa ucraniana hay dibujos de niños con mensajes como: 'Los resistentes no se rinden y luchan por la victoria' y 'Gloria a las Fuerzas Armadas Ucranianas'. Estos dibujos, una tradición para apoyar a los soldados ucranianos en el frente, se han extendido a los vítores a sus atletas.

"Me alegran el corazón", declaró la esgrimista Olga Kharlan, sonriendo al ver los dibujos. Y añadió: "Queremos terminar esta temporada con éxito, porque lo hacemos por nuestro país".

Kharlan tuvo un camino único hasta los Juegos de París. En los campeonatos del mundo del año pasado quedó emparejada con la esgrimista rusa Anna Smirnova.

Smirnova protestó después de que Kharlan se negara a estrecharle la mano, y la ucraniana fue descalificada. De todas formas, el Comité Olímpico Internacional concedió a Kharlan una plaza en París. La esgrimista declaró que la preparación para los Juegos de este año fue todo un reto, no sólo por la agotadora rutina típica de un atleta olímpico, sino porque tuvo que entrenarse en el extranjero debido a la guerra de Rusia y hacía mucho tiempo que no veía a su familia. Pero está decidida, y afirma que su demostración va mucho más allá de cualquier ámbito deportivo.

"Luchamos y actuamos por aquellos que, por desgracia, no pueden venir aquí porque fueron asesinados por Rusia", declaró.

Este año, Ucrania estará representada por el menor número de atletas en su historia de participación en los Juegos de Verano, con 140 competidores en 26 deportes. El mayor número está en atletismo, con 25, mientras que sólo hay uno -Buhrova- en bádminton. El Comité Olímpico Internacional prohibió a rusos y bielorrusos participar en los deportes de equipo en París, y aquellos que superen un procedimiento de selección en dos fases pueden competir individualmente como neutrales. No deben haber apoyado públicamente la invasión rusa de Ucrania ni estar afiliados a organismos militares o de seguridad del Estado.

"Me sentiría mucho mejor si no estuvieran aquí", declaró la remera ucraniana Anastasiya Kozhenkova en una rueda de prensa celebrada el viernes en París. En Ucrania, Buhrova afirmó que la guerra socavó la importancia del deporte y la accesibilidad para muchos, y que conoce a muchos atletas que dejaron de practicarlo tras la invasión rusa. "Cuando intentas elegir entre la vida y el deporte, eliges primero la vida", afirmó. "Si el gobierno puede elegir, es comprensible que elija salvar primero nuestras vidas y luego apoyar el deporte".

Buhrova, originaria de la ciudad oriental de Járkiv, sometida a intensos bombardeos rusos desde hace tres años, dijo que tuvo que ser evacuada al extranjero para seguir entrenándose.

El trauma de la guerra aún la afecta profundamente. Incluso después de salir de Ucrania, los fuertes ruidos le recuerdan a menudo los bombardeos de su país. A pesar de estas dificultades, está entusiasmada y decidida: «Estoy muy contenta de tener la oportunidad de mostrar mi rendimiento, lo mejor de mí», afirma.

Kozhenkova, una remera ucraniana que ganó una medalla de oro con su equipo en los Juegos Olímpicos de verano de 2012, dijo que es un logro significativo para Ucrania incluso estar representada en medio de la guerra: "En invierno, hubo muchas explosiones, y fue muy aterrador, porque a pesar del entrenamiento, no sabías si ibas a llegar a los Juegos Olímpicos o no", dijo.

Kozhenkova dijo que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se dirigió al equipo el miércoles por Internet, deseándoles éxito y señalando que su participación ayudaría a la nación a tomarse un respiro de la dura realidad de la guerra.

La ucraniana espera que haya menos cortes de electricidad y que no se produzcan atentados graves para que los ucranianos puedan disfrutar de las competiciones: "Será un pequeño alivio para nuestra gente", afirmó. "Tal vez si hay electricidad y la gente puede animar, experimentará emociones (positivas)".

Los aficionados empapados por la lluvia que asistieron a la ceremonia inaugural vitorearon a los atletas ucranianos, encabezados por la superestrella del tenis Elina Svitolina y el nadador Mykhailo Romanchuk, abanderados del país, mientras los olímpicos desfilaban por el río Sena en un barco.

"Es un gran honor, y una responsabilidad aún mayor", escribió Svitolina a AP poco antes de la ceremonia. "Ahora compito por la conciencia y la atención del mundo, lo cual, en el contexto de la guerra, es una recompensa mucho mayor", declaró una de las atletas más queridas de Ucrania, propietaria de un fondo benéfico y embajadora de la plataforma estatal de recaudación de fondos UNITED 24.

Mientras los atletas ucranianos se preparan para competir, Svitolina afirmó que su país necesita urgentemente el apoyo del mundo, ya que "sin él, ésta podría ser la última vez que vean el azul y el amarillo en los Juegos Olímpicos y otros acontecimientos deportivos".

El COI pide disculpas a Seúl por confundir Corea del Sur con Corea del Norte en la inauguración de los Juegos de París

El COI pide disculpas a Seúl por confundir Corea del Sur con Corea del Norte en la inauguración de los Juegos de París

Actualizado Sábado, 27 julio 2024 - 13:27

Para saber más

El Comité Olímpico Internacional (COI) pidió el sábado disculpas por el error durante la ceremonia de apertura de los Juegos de París 2024 en la que los atletas surcoreanos fueron presentados como la delegación de Corea del Norte.

"Pedimos profundas disculpas por el error que ha ocurrido mientras se introducía al equipo surcoreano durante la emisión de la ceremonia de apertura", publicó el COI en su cuenta de X en coreano.

El comité olímpico surcoreano dijo luego haber recibido un mensaje del COI indicando que su presidente, Thomas Bach, quiere disculparse en una conversación telefónica con el jefe de Estado surcoreano.

Durante el espectáculo en el Sena, el presentador francés del evento anunció la entrada de la embarcación con la delegación surcoreana con el nombre oficial del vecino septentrional: "República Popular Democrática de Corea".

El error generó malestar en Corea del Sur, que todavía está técnicamente en guerra con el Norte después de que el conflicto librado entre 1950 y 1953 terminara con un armisticio en vez de un tratado de paz.

El Ministerio de Deportes surcoreano expresó "su pesar por el anuncio durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024, donde la delegación surcoreana fue presentada como el equipo norcoreano", señaló en un comunicado.

El viceministro segundo de deportes Jang Mi-ran, campeón olímpico de halterofilia, pidió un encuentro con el presidente del COI, Thomas Bach, para hablar de la cuestión, añadió.

Además, la cartera de deportes instó al Ministerio de Relaciones Exteriores a "presentar una firme protesta al lado francés" por esta cuestión, agregó.

El Comité Olímpico de Corea del Sur también prevé reunirse con el comité organizador de París 2024 y con el COI para expresar su protesta y pedir medidas para evitar que se vuelva a repetir, agregó el Ministerio de Deportes.

España arranca a correr para ganar a Eslovenia y lanzarse en los Juegos

Actualizado Sábado, 27 julio 2024 - 10:51

Fue al descanso cuando España miró hacia abajo y supo que la caída sería mortal. El formato de unos Juegos Olímpicos engaña porque la fase de grupos es muy amable -son seis equipos y pasan cuatro-, pero un par de derrotas te sitúan en unos cuartos de final muy desagradables, quizá ante Francia, quizá ante Dinamarca. Por eso, entre la primera y la segunda parte de su debut contra Eslovenia, la selección que dirige Jordi Ribera comprendió que se estaba jugando la vida. Era pronto, muy pronto en el recinto Puerta de Versalles, las nueve de la mañana del día después de la ceremonia de inauguración, pero no importaba. Tocaba despertar. Y despertaron.

Después de 30 minutos grises, España reaccionó con mucho carácter para llevarse el partido por 25 a 22 y lanzarse en los Juegos. Quedan rivales de peso en la primera fase, Croacia, Alemania, Suecia y Japón, pero ahora hay cierto margen y un futuro más despejado. Alcanzar las semifinales, la lucha por las medallas, ya está más cerca.

Eslovenia, con Uros Zorman como seleccionador, planteó un balonmano como el que jugaba él no hace tanto: control, creatividad y, en cierta forma, lentitud. En la primera parte, el partido se jugó al ritmo pausado que impuso el equipo balcánico y ahí España estaba perdida. Dani Dujshebaev o Ian Tarrafeta intentaron responder a los bombazos de Dean Bombac, pero la selección no es eso. Desde hace una década la selección es velocidad, correr al contraataque, construir jugadas a toda prisa, y eso faltaba. En ese periodo, España sólo marcó ocho goles.

De ahí la reacción. Al descanso Ribera ordenó correr a toda costa, correr, correr y correr aunque se multiplicaran los fallos y se descontrolara el encuentro y eso hicieron. De repente los extremos, especialmente Aleix Gómez y Daniel Fernández, empezaron a ver la luz y a marcar hasta sumar 10 tantos entre ambos. Con la ayuda de Gonzalo Pérez de Vargas en la portería, que ya sostuvo el marcador durante la primera parte, España cambió el ritmo y lo cambió todo. Aún le quedaría bajar al barro para aguantar los golpes de Eslovenia, ahora un palo a Alex Dujshebaev, ahora un pelotazo en la cara a de Vargas, pero ya tenía el mando. Al final fue un estreno

Un diluvio para recibir a la antorcha olímpica en París

Un diluvio para recibir a la antorcha olímpica en París

El cielo hizo su propia revolución y desató toda su furia. El diluvio privó a París de su hora dorada, pero no impidió que hiciera lo que mejor sabe hacer: exhibir su belleza, su historia y su cultura. Mientras las aguas del Sena, emblema de una vieja Europa que hoy parece que se desdibuja, se fundían casi con las del cielo, la capital francesa lo consiguió: brindar al olimpismo sus escenarios más monumentales, transformados en un estadio a cielo abierto, a través de una ceremonia fluvial donde lo más bonito fue el final: el relevo del último tramo de la antorcha, entre los que estaban Zinedine Zidane y Rafael Nadal, y el alumbrado del pebetero olímpico, con el Himno al amor de Edith Piaf cantado por Celine Dion. Un remate bordado tras cuatro horas de espectáculo en las que ha habido guiños a la historia, a su revolución, sus tradiciones y su música, con toda la grandiosidad a la que acostumbra el país, pero que también pretendió ser original y moderno.

A las siete y media en punto, el barco griego inició el baile olímpico desde el puente de Austerlitz, kilómetro cero de los seis, con los colores de la bandera francesa y La foule, de Edith Piaf. El equipo de refugiados olímpicos le siguió, esta vez con Serge Gainsbourg de fondo. A partir de ahí se sucedieron las actuaciones, como las de Lady Gaga o Aya Nakamura. Se oyó a Piaf, sonó el Imagine, de John Lennon, Maurice Ravel o Carmen, de Bizet. Hubo acróbatas, cancanes del Moulin Rouge, raperos o drag queens en un desfile de moda, Sonó la Marsellesa y, cuando ya anocheció, comenzaron las luces sobre los 17 puentes.

En ese recorrido de seis kilómetros por el Sena estaban los puntos cardinales de lo que es Francia, y también Occidente. Su corazón religioso, la Catedral de Notre-Dame; el de la cultura y el arte, que es el Museo del Louvre. El corazón militar, Los Inválidos, donde está la tumba de Napoléon, para acabar en el núcleo industrial de Francia: la Torre Eiffel. A esos cuatro puntos añadió el deporte, en el centro.

La ceremonia se estructuró en 12 representaciones visuales, que tenían lugar en algunos de los 17 puentes que atraviesan el río o en los sitios más emblemáticos de París. Cada una con un título. Hubo enchanté, el bloque liberté con guiños a la revolución francesa; el de egalité, un homenaje al amor libre, o sincronicidad, a los artistas que restauran la catedral de Notre Dame.

Hubo sororidad, con referencia a las mujeres que han marcado la historia de Francia, justicia, deportividad o festividad. En paralelo, el último relevista, el encargado de encender el pebetero olímpico, sirvió de hilo conductor e iba recorriendo París, enmascarado. El misterio se mantuvo hasta el final. El desfile se hizo largo y en ocasiones parecía más una cabalgata.

El colofón fue en el monumento más icónico de París y Francia:la torre Eiffel, donde se alzó la bandera olímpica. Ahí llegó el relevista enmascarado subido en un caballo blanco. Les siguieron los discursos del presidente del CIO, Thomas Bach, y de Paris 2024, Tony Estanguet. Este saludó la «gran historia de amor entre Francia y los Juegos». «Cuando amas los Juegos, no te dejas impresionar por unas gotas de lluvia», dijo..

Por el agua, y sobre todo bajo el agua, desfilaron más de 6.000 atletas de los 10.500 convocados en los Juegos en casi un centenar de barcos de 205 delegaciones. Hacía semanas que no llovía así en la capital. No paró en las casi cuatro horas de espectáculo. Sólo dio tregua a final. De todos los problemas que se habían barajado, este fue al que menos importancia se dio.

Han sido meses de inquietudes: la contaminación del agua del Sena, la inseguridad, la amenaza terrorista... Que la ceremonia de los Juegos saliera bien era determinante para que lo que empieza ahora: ceder parte de esos escenarios a las pruebas deportivas. Francia siempre ha querido distinguirse: en los Juegos de 1900, los primeros que acogió, participaron las mujeres por primera vez, y los de 1924, hace un siglo, fueron los primeros con una villa olímpica.

El desafío de salir del estadio y abrirse al mundo `parecía una locura. Han sido años de preparación, bajo la batuta del escenarista Thomas Jolly. Acudieron un centenar de jefes de Estado, entre ellos los Reyes de España. Iba a acoger a un millón de espectadores, pero se redujo a unos 320.000.

Había varios planes en caso de ataque inminente, pero no hizo falta activarlos porque el dispositivo, el mayor desplegado en la capital, que sacralizó ese espacio en una burbuja. Se cerró el espacio aéreo y en las calles había unos 45.000, entre los propios y extranjeros. Se pidió ayuda a 45 países, que aportaron sus efectivos. También ondearon sus banderas, no sobre el Sena pero sí bajo la lluvia.

¿Cómo se adaptarán Alcaraz y Nadal en la pista? “No son una pareja clásica ni falta que les hace”

Actualizado Viernes, 26 julio 2024 - 23:16

En la Villa, dos colegas, Rafa Nadal y Carlos Alcaraz, siempre juntos: duermen en el mismo apartamento, desayunan, comen y cenan en la misma mesa y normalmente atienden a las mismas peticiones de fotos. Son muchas peticiones, muchísimas, algunas individuales, la mayoría conjuntas. Cuenta David Ferrer, capitán del equipo español, que queda con ellos para almorzar y entran en el comedor a la hora acordada, pero que ambos tardan una eternidad en sentarse. Cuando lo hacen, el plato ya está frío.

Desde que llegaron a París a principios de semana los dos mejores tenistas de la historia de España han convertido su buena relación en amistad y su camaradería es latente en cada entrenamiento en Roland Garros, pero queda una duda: ¿Se entenderán tan bien en la pista? Antes de su debut hoy en los Juegos Olímpicos ante la pareja argentina formada por Máximo González y Andrés Molteni (19.00 horas, La 1), nunca habían jugado juntos y, aunque Nadal tiene experiencia de sobra -fue campeón olímpico en Río 2016 junto a Marc López-, Alcaraz casi es un novato en el dobles. Sólo ha jugado seis partidos profesionales, entre 2021 y 2022, cuatro con Pablo Carreño y dos precisamente con López.

"No va a ser fácil, es un estreno total"

"Yo haré lo que él me diga, me tapo la boca y a cumplir", comentaba Alcaraz en conversación con EL MUNDO medio en broma, medio en serio. Porque al reciente campeón de Roland Garros y Wimbledon le sobra tenis en estos Juegos, pero le falta calle. O mejor dicho, pista. "No va a ser fácil que se compenetren, es un estreno total. La clave va a ser que saquen los primeros partidos y que Carlos escuche las indicaciones de Rafa. Son dos grandes tenistas de individuales y tienen que explotar sus muchísimos recursos cada uno por su lado. No pueden convertirse en unos días en una pareja", analiza Vivi Ruano, ex número uno del mundo de dobles, vencedora de 11 Grand Slam en parejas y de dos platas olímpicas en Atenas 2004 y Pekín 2008.

"Hay dos tipos de parejas: los especialistas en dobles y los 'singlistas' que se juntan para un torneo concreto. Rafa y Carlos serán ese tipo de pareja, pero eso no es malo. Que cada uno cubre su mitad de la pista y ya está. Son buenísimos, no serán una pareja clásica ni falta que les hace. Sergio [Casal] y yo estábamos muy conjuntados y en Barcelona 1992 nos ganaron Boris Becker y Michael Stich, que ni se hablaban", añade Emilio Sánchez Vicario, también ex número uno del mundo, ganador de cinco Grand Slam y de la plata de Seúl 1988.

"Quizá no tengan un juego tan de dobles, pero van a controlar los partidos desde el fondo de la pista, van a marcar diferencias ahí. Los dos tienen grandes habilidades, son de los mejores jugadores de la historia y si lo mezclas todo, aquí, en Roland Garros, está claro que es una combinación ganadora", finaliza Marcel Granollers, actual número uno de dobles, miembro de la otra pareja española en estos Juegos Olímpicos -junto a Carreño- y compañero de entrenamientos estos días de Nadal y Alcaraz.

La intensidad de Nadal

De hecho, este mismo viernes, en la Philippe Chatrier, la pista central de Roland Garros, los cuatro españoles que disputarán los dobles se juntaron para un último entrenamiento antes del debut. A primera hora de la mañana, Nadal y Alcaraz hicieron una sesión completa, ganaron 6-3 en un set de prueba a Granollers y Carreño y aclararon dos cosas. La primera, que Nadal jugará a la derecha y Alcaraz a la izquierda, es decir, que los dos cubrirán el centro con su drive. Y la segunda que Nadal jugará el partido pese a las molestias que arrastra.

Kiko HuescaEFE

Su vendaje en el muslo derecho demostraba que algo ocurre y todavía cabe la posibilidad que se retire del torneo individual antes de su debut mañana ante el húngaro Marton Fucsovics, pero la intensidad del entrenamiento fue la de un tenista dispuesto, nada de irse para casa. Alcaraz también se mostraba concentrado, tanto que al final no acudió a la ceremonia de inauguración pues hoy no sólo tiene el estreno del dobles, también disputará su primer partido individual, ante el libanés Hady Habib (sobre las 14.00 horas, La 1) en la Suzanne Lenglen.

Un equipo de elite en los Alpes, un gurú alemán y otros secretos de Moha Attaoui y Marta García, dos atletas lanzados: “Ahora sólo me tengo que preocupar de correr”

Actualizado Viernes, 26 julio 2024 - 23:13

Marta García acababa de terminar su carrera de Medicina, años de estudio compatibilizados con el atletismo de alto nivel que ahora requerían un esfuerzo más, el MIR, la residencia y, como parecía obligado, ir despidiéndose del sueño del deporte profesional. Moha Attaoui era una diamante, pero apenas le daba a sus 20 años para pagarse de su bolsillo una concentración en altura en Ifran. Hoy ambos, casos tan dispares, nombres para la esperanza del atletismo español, viven en las montañas de los Alpes, en la idílica St. Moritz, porque les llegó una oferta de esas que no se pueden rechazar.

Para saber más

Para saber más

Ella, como nunca, fue bronce europeo en el 5.000 en el pasado Europeo de Roma, batió allí el récord de España (14:44.04) y acude a París esperanzada. Es la revelación de la temporada: desde enero a junio pulverizó cuatro plusmarcas nacionales más. Él, como nunca, adelantó a todos los gallos del 800 nacional y más todavía. Sorprendió en la capital italiana con una asombrosa plata y, hace 15 días, en Mónaco, firmó un tiempo para soñar con cualquier cosa en los Juegos (1:42,04, la novena mejor marca mundial de la historia).

Ni Marta ni Moha son casualidad. Junto a otros 11 mediofondistas de toda Europa forman parte del novedoso proyecto OAC, el equipo de elite auspiciado por la marca deportiva suiza ON que dio un paso más allá en la profesionalización del atletismo.

Encajonado en el impresionante valle de Engadina, a 1.800 metros de altitud, con la estación de esquí más antigua del mundo y un precioso lago que se congela en invierno, un grupo de jóvenes atletas rueda en la pista de atletismo de St. Moritz a las órdenes de Thomas Dreissigacker, que sigue sus evoluciones de cerca en una bicicleta eléctrica. Quedan unas semanas para los Juegos y un pequeño grupo de periodistas tiene la oportunidad de conocer por dentro esta pionera experiencia. No hay tiempo que perder. «Que sean de diferentes países es algo clave. Aquí no hay celos ni competitividad mal entendida, como si se estuvieran jugando el mismo billete. Se mejoran unos a otros. Como mucho y con suerte se tendrán que ver las caras en una final con su compañero», cuenta a EL MUNDO el también jovencísimo entrenador, el gurú alemán, formado en la Universidad de Leipzig y ex técnico de su Federación nacional.

Thomas Dreissigacker, entrenador alemán del OAC.

Thomas Dreissigacker, entrenador alemán del OAC.

«Sólo me tengo que preocupar de correr. Por primera vez tengo un sueldo», admite sonriente Attaoui, que ya se suelta con el inglés, tan lejos de su Torrelavega, más aún de su Marruecos natal. «Ellos creyeron en mí antes incluso que yo. Despejaron todas mis dudas. Ahora todo es muy fácil», relata Marta, que, siguiendo las exigentes directrices de Dreissigacker -«aquí se entrena los siete días de la semana y en sesión doble»- está comprobando a base de tiempazos el salto asombroso en su carrera. Ella cambia: un par de semanas en la altitud de los Alpes, otras en Buitrago del Lozoya, donde se reencuentra con su pareja y con los bosques de la sierra de Madrid.

El germen del proyecto europeo, que cuenta con todo tipo de comodidades y beneficios para los atletas (fisioterapia, alimentación, apoyo para la salud mental, ayuda financiera...) se remonta a Boulder (Colorado). Allí, Dathan Ritzenhein, tres veces olímpico, maneja otro grupo impresionante de atletas, entre los que destacan la reciente ganadora del maratón de Boston y principal favorita al oro en París Hellen Obiri. O Yared Nuguse, plata mundial en pista cubierta (3.000). También el español Mario García Romo, exquisito mediofondista, bronce europeo en 2022 y plusmarquista nacional de la milla, que busca medalla en París en el exigente 1.500.

El OAC Team, que también cuenta con sede en Melbourne, supone una revolución en el atletismo, un modelo privado e internacional, independiente de las becas, los apuros y las competencias de los programas de cada país. «Nos gusta hacer las cosas de forma diferente. Y en este caso es simple, aquí el atleta es el centro de todo», razona Oliver Bernhard, bicampeón del mundo de duatlón y creador de On, las zapatillas que ideó con suelas de trozos de manguera y que han sacudido el mercado en los últimos años. Y quien, antes incluso de ponerse manos a la obra con el proyecto deportivo, lanzó una encuesta entre los atletas para desentrañar sus preocupaciones. Los sorprendentes resultados son hoy los seis pilares del "360 Athlete Support": preparación física y mental, salud y recuperación, finanzas, marca personal y medios de comunicación, desarrollo personal y profesional y experiencia familiar On.

Tres días en un monasterio en absoluto silencio: el secreto de la España de tiro con arco para ganar una medalla

Tres días en un monasterio en absoluto silencio: el secreto de la España de tiro con arco para ganar una medalla

Apagar el móvil, eso lo primero. Entrar en el Monestir de les Avellanes, un monasterio en mitad de la sierra de Montsec, cerca de Lleida. Y a partir de ahí, callar. Callar, callar y shhhhhhh, callar. Tres días en silencio. En el desayuno, durante el entrenamiento, en el almuerzo, en las sesiones de meditación y en la cena. Ni un ruido. Horas y horas de escucharse a uno mismo, desenredar los pensamientos propios y descubrirse hasta en lo más profundo. Así fue el stage que el equipo español de tiro con arco hizo el pasado octubre en su preparación para estos Juegos Olímpicos de París.

La semana próxima, entre el martes y el domingo, Pablo Acha y Elia Canales se jugarán tres medallas -dos individuales y el equipo mixto- con el mindfulness como arma. Si ganan a los tiradores asiáticos, especialmente a los surcoreanos, eternos dominadores de la disciplina, pueden decidir que es gracias a conocerse más a sí mismos.

«Fue una idea del seleccionador, Elías Cuesta, que buscaba mejorar la capacidad de concentración del grupo y sabía que existían estos retiros de meditación. Nos pusimos en contacto con Andrés Martín Asuero, que es un experto en mindfulness y él coordinó la actividad», explica Carlos Morillo, director deportivo de la Federación Española de Tiro con Arco y parte de una revolución.

Del método coreano al estilo español

Desde siempre la selección seguía las enseñanzas que llegaban de Corea del Sur y, de hecho, tenía una pareja de seleccionadores del país asiático, Hyung Mok Cho y Mi-Jeong Lee, pero después de los Juegos de Río 2016, al ver que las medallas se volvían a escapar, la Federación decidió romper con todo. Le entregó el equipo a Elías Cuesta, olímpico en Londres 2012, y permitió que trabajara de otra manera. «El método coreano es muy simple: repetir, repetir y repetir. Hacerlo lo más básico posible, dejar la mente en blanco, convertirse en un robot. Con Elías todo es muy distinto», explica Canales, que en primera ronda se medirá a la británica Megan Havers, de sólo 16 años.

Con Cuesta al mando, los tiradores españoles no tienen que ser robots, todo lo contrario: tienen que conocerse, dominar su cuerpo y su mente. En los últimos años han hecho ejercicios de estabilidad o de vista, estudios de biomecánica y mucho trabajo psicológico como el retiro de silencio en el Monestir de les Avellanes. «Trabajamos la meditación. En el monasterio nos enseñaron mucho a estar en el momento presente, a escucharnos, a mantener la concentración en una única cosa. Al final el tiro con arco no es sólo tirar flechas, es relajación, autoconocimiento y control», asegura Pablo Acha, que debutará contra Lin Zih-Siang, de China Taipei, y que admite que lo más difícil del retiro fueron las primeras comidas.

Un esfuerzo durante el almuerzo

La instrucción era que, en silencio, cada tirador podía empezar a comer cuando quisiera y levantarse cuando acabara, que estaban solos aunque se sentaran en grupo, pero al principio costaba aguantarse la risa. «En esos momentos sí era complicado, pero luego ya nos acostumbramos. Los tiradores, por naturaleza, solemos somos tranquilos», añade Acha. En el 'stage' en el monasterio ilerdense, la selección no tuvo ninguna sesión de técnica, aunque sí lanzaron flechas. Colocaron unas dianas en el patio del recinto y cada tirador pasó un par de horas al día practicando, siempre en silencio, para no perder 'feeling' con el aparato.

Ahora, después de todo ese trabajo, España llega con opciones de medalla en tiro con arco por primera vez desde el oro del equipo masculino en Barcelona 1992. Canales es quinta del ranking mundial, aunque puede encontrarse en octavos con la surcoreana Lim Sihyeon, que en la clasificación batió el récord del mundo femenino. Habrá más opciones el dúo mixto, debutará contra la pareja china formada por Xan Yang y Yan Wang.

«Las coreanas no son intratables. En la clasificación lo hicieron muy bien; el nivel lo tienen, pero, al final, en una eliminatoria puede ganar cualquiera. Es complicado, pero no es imposible», comentaba incluso Canales que cuenta con una fortaleza que no tienen las asiáticas: en el más absoluto silencio en el Monestir de les Avellanes se conoció en profundidad a sí misma.

La biodramina de Cooper, los abucheos a Israel y la camiseta de Tonga: las curiosidades de la inauguración de los Juegos Olímpicos

Actualizado Viernes, 26 julio 2024 - 22:37

La arquera Reena Parnat y el judoca Kaljulaid Kristofer, los abanderados de Estonia, miraban a proa y alucinaban. Por orden alfabético -en francés, no en inglés, lo habitual-, al país báltico le tocó compartir barcaza con España y, claro, cualquier intención de hacerse ver quedó en nada. Como siempre, la delegación española fue de las más ruidosas, de las más alegres, de las más festivas y captó la atención de las cámaras. Los deportistas estonios, compañeros sobre las aguas del Sena, se resignaron a salir en la televisión cinco o seis segundos.

La organización de los Juegos Olímpicos de París 2024 intentó lo imposible, que el desfile de países no se hiciera eterno, y no lo consiguió. Aunque redujo al mínimo el tiempo de pantalla de las delegaciones e intercaló los espectáculos, al final quedó la misma sensación monótona de siempre y esta vez, además, quedó lejos la alegría de los protagonistas, el principal sustento de la ceremonia.

"¿Alguien tiene una biodramina?", preguntaba en redes sociales Marcus Cooper, abanderado español y estaba nervioso el piragüista y estaba emocionado por vivir uno de los mejores momentos de su vida, pero apenas se le vio. Desde las orillas del río Sena era imposible distinguir entre unos deportistas y los otros, sólo se diferenciaban banderas y en las pantallas más de lo mismo. La propuesta de los barcos era original, pero resultó rarísima, si no fallida.

Barcos diferentes y la lluvia

Desde el primer abanderado, Giannis Antetokounmpo, baloncestista griego, un tipo enorme, que mide 2,11 metros, quedó claro que habría que afinar la vista para disfrutar del evento y desde el primer barco compartido se evidenció que habría extrañas compañías. Un mal rato pasaron los deportistas de Islandia e Italia en muchos puntos del Sena cuando recibieron un sonoro abucheo que no era para ellos si no para sus acompañantes, los atletas de Israel. Ahí estaban los armenios, con muchísimo espacio, mientras a su lado los alemanes tenían que apretarse para no caer por la borda. Ahí estaban países pequeñitos como Suazilandia y Kiribati solos en unas barquitas pequeñitos. Ahí estaba la delegación en Países Bajos en un yate espectacular o Estados Unidos en un barco que parecía más grande que el propio Sena.

La única vez que entre el público presente ante el río parisino se notó emoción de verdad fue cuando pasó por delante la delegación francesa, que se llevó una ovación tras otra cada vez que cruzaba un puente.

Más allá de los problemas de planificación de la ceremonia, hubo dos decepciones, una grande y otra pequeñita. La lluvia intensa que empezó a caer en la primera hora del evento acabó deformándolo todo, fastidiando el trabajo de artistas y cámaras, y además faltó un animador habitual. Los últimos desfiles olímpicos, siempre tediosos, tuvieron como protagonista a Pita Taufatofua, abanderado de Tonga, que solía viralizarse en redes sociales con su look sin camiseta, pero esta vez no se había clasificado. Esa propuesta la hizo en París Karalo Maibuca, abanderado de Tuvalu, isla cercana a Tonga, pero apenas se le pudo ver como al resto. Al final la inauguración de los Juegos de París acabó deslucida por la distancia de los asistentes con la acción -los últimos actos en el Trocadero ya sólo se pudieron seguir por las pantallas gigantes- y sobre todo con las estrellas de todas las citas olímpicos, los deportistas.