‘Caso Negreira’: El juez extiende la operación a la antigua cúpula arbitral y confisca documentos de Sánchez Arminio y su equipo

'Caso Negreira': El juez extiende la operación a la antigua cúpula arbitral y confisca documentos de Sánchez Arminio y su equipo

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Fachada de la Federación Española de Fútbol en Las Rozas, este jueves.AFP

El Juzgado de Instrucción número uno de Barcelona ordenó intervenir en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) toda la documentación vinculada con el caso Negreira que afectara al histórico número uno del arbitraje español, el recientemente fallecido Victoriano Sánchez Arminio, y a sus principales lugartenientes. El auto de entrada y registro en el Comité Técnico de Árbitros (CTA), al que ha tenido acceso EL MUNDO, autoriza a la Policía Judicial a que confisque todos los dispositivos electrónicos y medios de prueba que considere oportunos para esclarecer los delitos investigados y extendió el mandato a la antigua cúpula arbitral al completo.

De esta forma, el instructor subrayó que, además de la documentación vinculada con Sánchez Arminio y su ex número dos José María Enríquez Negreira, la Guardia Civil estaba autorizada para confiscar cualquier documento vinculado a Ángel Franco González, también antiguo vicepresidente del colectivo arbitral. Asimismo, extendió la orden a otro veterano dirigente, el colegiado gallego José Ángel Medín Prego. El objetivo final de la intervención judicial pasa por documentar el grado de influencia de Negreira en el CTA en relación con el ascenso y descenso de colegiados o su designación para partidos destacados.

Tal y como apuntó la Guardia Civil en el informe aportado en el sumario y que desveló en exclusiva EL MUNDO, Negreira tenía de esta manera capacidad de mejorar considerablemente la retribución de los colegiados o, por el contrario, rebajarla. En esta línea, la Policía Judicial sostiene que el ex número dos arbitral premiaba o castigaba a los árbitros dependiendo de si eran o no afines y disponía de un control directo sobre las designaciones.

Este criterio, compartido ahora por el propio juez instructor, contradice por completo el de los actuales responsables del CTA. No en vano, el presidente de los árbitros, Luis Medina Cantalejo, y el ya ex máximo responsable de la RFEF, Luis Rubiales, han venido sosteniendo durante los últimos meses que Negreira «no pintaba nada ni tomaba ninguna decisión importante».

Por su parte, el propio Negreira admitió su capacidad de intervenir en estos asuntos en la declaración que prestó ante la Agencia Tributaria en octubre de 2019, mucho antes de que estallara el escándalo.

Entonces, el histórico dirigente arbitral dijo que se dedicaba a «revisar los informes que hacen los árbitros después de cada partido y puntuarlos». A la vista de lo cual, añadió, «el árbitro podía ascender de categoría». Aclaró que no cobraba nada por su trabajo en el CTA y que, además, no quería percibir ninguna remuneración porque «ya tenía su empresa y cobraba del FC Barcelona». De hecho, indicó que su principal objetivo pasaba por lograr que los arbitrajes del Barça fueran «neutrales».

La Guardia Civil llamó la atención en su último informe sobre esta cuestión añadiendo un elemento hasta ahora inédito. Descubrió que Negreira obligaba a su hijo a desviarle parte del dinero que cobraba en paralelo del FC_Barcelona por asesorías arbitrales. Y destacó que los conceptos por los cuales se justificaba este trasiego de dinero del Barça entre hijo y padre tenían que ver precisamente con la puntación de los colegiados tras las jornadas de Liga. Por lo que el Instituto Armado señala que se daba la circunstancia de que el FC Barcelona acabó pagando a Negreira por funciones que le correspondían en el CTA.

Su comparecencia ante el Fisco fue la última vez que Negreira dio su versión sobre sus cobros millonarios del club catalán. Recientemente ha esgrimido que padece un considerable deterioro cognitivo que le impide prestar declaración y el juez ha ordenado que un forense le examine para comprobar si es cierto.

Cuando en 2018 fue relevado de su puesto en el CTA_y el club azulgrana dejó de pagarle, Negreira amenazó al Barça a través de dos burofaxes revelados por este periódico en los que recordó que había estado cobrando a cambio de «favores y confidencias» y que si cesaban los pagos, desataría un gran «escándalo».

kpd