Adrián Mateos, el rey del póker que ya ha ganado casi 40 millones de euros: “El riesgo de ruina que tengo es cero”

Adrián Mateos, el rey del póker que ya ha ganado casi 40 millones de euros: "El riesgo de ruina que tengo es cero"

Entrevista

Actualizado

El madrileño, que acumula 36 millones de euros en torneos en vivo, entra en el top 15 mundial de ganancias: “Las partidas de póker más caras son insostenibles si no ganas”.

Adrián Mateos, en las Tritón Series, en Montecarlo.

Mientras escribo estas líneas, Adrián Mateos gana 300.000 euros en un torneo de póker por internet. No es ni la centésima parte de lo que lleva acumulado en vivo en poco más de 10 años de carrera. Nacido en San Martín de la Vega en 1994, La Máquina ya está entre los quince mayores ganadores de la historia. Sus premios en los tapetes que se pueden acariciar suman 38,6 millones de dólares (36,1 millones de euros). Quizá cambiaría alguno por ver al Atleti ganar una Champions.

Entre sus galardones, destacan los cuatro brazaletes de las Series Mundiales de Las Vegas (WSOP), aunque apenas hay premio que se le resista. Ha sido número uno del mundo y es el más joven de la lista de millonarios. «Hay varios jugadores por delante que juegan bastante menos que yo. Debería ser cuestión de tiempo pasarlos. Mi objetivo es entrar en el top 10 en dos años, como tarde», cuenta por teléfono desde Londres, días después de marcar su última gran muesca en la culata, más de tres millones en las Tritón Series de Montecarlo.

El líder de la clasificación está aún lejos. Es el estadounidense Bryn Kenney (no faltan letras, su nombre se escribe así), con 65 millones. El décimo puesto está a tiro, a menos de cinco kilos, un pequeño paso para Mateos aunque suponga un abismo insalvable para la mayoría de los profesionales.

La gente puede pensar que es dinero fácil.
Es la época de mi carrera en la que más motivado estoy y en la que más tiempo le estoy dedicando a jugar, pero también a estudiar. Lo bueno es que ahora mismo se juegan niveles muy altos y es buen momento para trabajar más que los rivales y destacar.
¿Ves a otros españoles subiendo puestos en los próximos años?
Sí. Ahora mismo el que más juega conmigo en niveles altos es Juan Pardo. Seguro que va a subir posiciones, aunque él viaja menos y ese es otro requisito para jugar en vivo. Yo puedo hacerlo como miembro del equipo profesional de Winamax.
La lista de The Hendon Mob solo contabiliza torneos en vivo. ¿Por internet ganas aún más dinero?
Todo son números brutos y las estadísticas online no son públicas, pero creo que son algo menores, aunque también me ha ido bien.
Es como el chiste del tipo de Bilbao al que preguntan cuánto ha ganado en la lotería y responde: “Lo que jugaba, 300 millones”. Tú participas en los torneos más caros. Quizá la lista es engañosa.
Efectivamente, lo es. Gasto millones al año en inscripciones y, aunque he tenido un beneficio importante y me ha ido bien, está lejos de los 38 millones de dólares que aparecen. Cuando juegas niveles altos contra los mejores del mundo los márgenes son relativamente pequeños. No gano el 100% de mi inversión, ni mucho menos. Si un año gasto cinco millones y gano seis, es un buen año. La gente nunca va a conocer el beneficio real de los jugadores, porque son cuentas privadas.
Quizá la clasificación de ganancias no es la más fiable.
Es difícil. En el póker no hay ninguna clasificación que sea fiable del todo. Para mí, el criterio para juzgar a un jugador es la cantidad de años que lleva compitiendo en ‘high stakes’ (las partidas más caras). Si no ganas dinero, son insostenibles. Son demasiado caros y nadie confiaría en ti si no eres ganador. Acabarías perdiendo mucho. Los que llevan años compitiendo en este tipo de torneos es porque ganan.
¿Llevas una contabilidad detallada del dinero que ganas o pierdes cada mes?
En el juego online lo tengo todo más controlado, porque hay programas que ayudan, pero en vivo llevo las cuentas a ojímetro. Tampoco es muy necesario, porque confió mucho en mí y soy claramente ganador en mi nivel. No me importa mucho si he ganado un poco más o un poco menos.

Mirar demasiado tus resultados también puede ser una muestra peligrosa de ego.
Sí, es peligroso si te lo tomas como una cuestión de ego. Por eso no me gusta estar tan pendiente de los números. Son importantes para saber si eres ganador o no, y de eso estoy totalmente seguro. Sé que he tenido bastante beneficio en los 10 años de mi carrera.
¿Estás en racha o es el ritmo de siempre?
Todos los años me ha ido bien, pero este año es el que más dinero he ganado en vivo, nueve millones y pico. Hay varios factores. Uno de los principales es estar en un buen momento. Otro, que cada año se juega más caro. Y el principal es que he tenido grandes resultados justo en los torneos más caros, con inscripciones de 100.000 o así. En esos torneos puedes ganar millones y obviamente subes posiciones.
Muchos de esos torneos tan caros los juegas bancado, con participaciones de otros jugadores.
Las ganancias brutas parecen más impresionantes, pero no juego el 100% de mi acción. Hacemos una gestión de banca entre varios para no depender de los resultados de unos pocos torneos. Las acciones se venden a gente con ciertas comisiones o hacemos intercambio de porcentaje entre jugadores con una habilidad similar.
En el futuro, aparte de una posible retirada total, ¿te planteas bajar un escalón y jugar más tranquilo?
Es algo que siempre te planteas, porque la vida que llevo actualmente es un poco insostenible a largo plazo si quiero formar una familia y tomármelo un poco más tranquilo. Hoy, tengo 29 años, soy joven y lo que más me apetece es seguir compitiendo al más alto nivel, viajar y ser uno de los mejores del mundo. De momento, seguiré unos años. Cuando pierda esa motivación o tenga otras que no se alineen con ser de los mejores, obviamente no podré competir al mismo nivel.
En las horas de estudio, ¿es necesario tener entrenadores o que te ayuden otras personas, como en ajedrez?
Sí y no. Por ti mismo puedes hacer casi todo, porque hay programas muy potentes y su opinión normalmente es más fiable que la de cualquier otro jugador. Los ‘solvers’ te dicen los movimientos adecuados, etcétera. Con su ayuda puedes estudiar solo, pero los programas no pueden darte una solución tan correcta a factores más humanos. La gente a la que también le ha ido muy bien también te abre la mente a nuevos pensamientos. Todos aprendemos de todos. Yo hablo de manos con dos o tres amigos casi todos los días y entre todos intentamos mejorar.
En ajedrez hay cierta paranoia con la inteligencia artificial y se han vivido episodios surrealistas. En el póker cada vez preocupa más, también.
Por internet siempre ha sido un peligro, pero en teoría el principal trabajo de las salas más grandes es evitar las trampas. Yo creo que la gran mayoría no hace nada ilegal y que también se puede ganar bastante online. En vivo no se pueden utilizar los programas y tampoco son como en ajedrez, porque no son tan exactos. Hay más variables, como la posición en la mesa. En el tablero de ajedrez siempre hay un movimiento más rentable. En póker debes adaptarte a los tipos de jugadores. Ese peligro está lejos. Siempre podré dedicarme al póker de manera rentable, porque muchos aficionados quieren competir en los niveles altos.
En tus 11 años de carrera, solo has tenido un año malo. ¿Te relajaste o fue mala suerte?
En 2017 fui número uno mundial en el ranking GPI. Para eso tuve que ir a todos los torneos. Fue muchísimo trabajo y demasiados viajes. Me centré en eso y dejé un poco de estudiar. Después de 10 o 12 horas diarias en las mesas, no te apetece. Confié en mi ego y en mi habilidad y vino 2018, que fue de los peores años de mi carrera. No perdí mucho, pero sentí que no tenía la misma ventaja competitiva. Pasé de ser de los mejores a ser uno bueno, sumado a que me fue mal en otras cosas. En la pandemia me encerré en Londres, me puse a jugar y a estudiar y salí más fuerte. Notaba que los otros no conseguían aguantar mi ritmo y llegaron grandes resultados. Tengo ese susto en el cuerpo: si no estás a tope, te van a pasar. No quiero volver a sentir esa sensación. Es el único secreto para mantenerte líder en cualquier sector.
Si volviera una racha mala, aunque fuera por mala suerte, ¿podrías perderlo todo en un año?
Sinceramente, el riesgo de ruina que tengo es cero o prácticamente cero. Si me fuese mal y perdiera todo sería por errores, no solo jugando, sino en la gestión de mi dinero. Si te va mal, debes bajar de nivel y con mucho trabajo y estudio al final siempre vas a ganar a gente que dedica menos horas.
Tú eres futbolero. ¿Te sientes identificado con la filosofía de algún entrenador?
Cualquier deporte de élite tiene bastantes similitudes con el póker de alto nivel. El lema de Simeone, que el esfuerzo no se negocia, lo intento aplicar a mi vida profesional y personal.deportd Hago lo que tengo que hacer y luego los resultados no dependen de mí, pero sé que me va a ir bien. Es una buena filosofía de vida y te permite dormir muy bien.

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