Lo más difícil actualmente en estos tiempos de la selección es adivinar por cuantos goles de diferencia va a machacar, a ridiculizar a sus enemigos. Es como una máquina de hacer ocasiones y goles. Siempre que están cerca del área tienen una capacidad de definir de una calidad gigantesca.
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Y eso que como ya estamos en noviembre , con todos los partidos que llevan jugados en la todas las competiciones, pues baja un poco la acción de fabricar juego con mayor velocidad y que el balón discurra a alto nivel de rapidez.
Así que el acertijo de este partido era saber si la sesión que la selección pudiera superar los siete goles de hace justo dos años. No, se quedó çon cuatro e incluso Georgia hasta pudo marcar. Demasiados partidos, compromisos y la ruindad de UEFA y FIFA.
Como juega en casa y tiene que dar más la determinación de al menos llegar al área española, pues al primer tiempo ya lleva tres goles, uno más que los de la selección hace unas semanas.
Qué caramelo es fusilar un penalti ante enemigos semejantes . Apareció el ex especialista Fabian Ruiz por el punto de penalti, por si acaso le iba a dejar Oyárzabal. Pero con lo que ocurrió hace semana con Fabián , ya no hay más esperanzas de desperdiciar un penalti.
Cada día que juega un partido nuevo Zubimendi se erige como el líder de la selección. Nadie se puede acordar de Rodri. Es imposible y encima el jugador vasco tiene una facilidad pasmosa de acabar jugadas en el área del rival. Su gol fue de una teoría excelsa.
Como era de esperar, la selección dejó de pisar el acelerador. Porque el resultado ya era un bastante escandaloso. Además, con un gran gol de cabeza de Oyarzábal que ahora se convertido en un intocable. Es el máximo goleador.
No me gustaron ni Fabián ni Ferran, que hizo lo que pudo, pero no esta en su mejor momento. La gran estrella es Zubimendi, vaya éxito del Arsenal , que siempre creyó como él en el nuevo Rodri español.
La selección fue una mediocridad en los últimos 30 minutos, hasta parecía que Georgia era una apisonadora. Brilló como ningún otro jugador de los georgianos Kvaratskhelia y hasta pudo marcar. Ni Turquía ni Bulería pusieron en tantos aprietos a Una Simon. Fue la defensa y la falta de físico de Fabián Ruiz , de Merino , en el centro del campo . que hicieron pensar que era una en una selección que la podían abordar. Pero al final, cero goles georgianos. Imbatido.






