Xabi Alonso aprende a ser Klopp resucitando al Leverkusen

Xabi Alonso aprende a ser Klopp resucitando al Leverkusen

Bundesliga

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El equipo lleva sin perder desde el 29 de octubre y recupera a su alter ego en el campo, el internacional alemán Florian Wirtz, que dormía con pósters del Barça de Messi y Dembélé

Xabi Alonso en una sesión de entrenamiento con el Bayer Leverkusen.@bayer04fussball

Contaba Xavi Hernández que cuando se le presenta un problema en el Barça, los entrenadores que había tenido a lo largo de su carrera le susurraban soluciones al oído. El Xabi con ‘b’, Alonso, el entrenador de moda de la Bundesliga, cuenta con la mejor plantilla de susurradores del mundo, cultivados por los centros del campo de la Liga, la Premier y la Bundesliga: Ancelotti, Guardiola, Mourinho, Pellegrini, Benítez, Toshack o Javier Clemente. Sin embargo, el de Tolosa, cogió penúltimo al Bayer Leverkusen en octubre, y lo ha puesto a cinco puntos de Europa intentando parecerse a un entrenador que nunca tuvo, Jürgen Klopp: «Tiene carisma, lo ves al final de los partidos en la relación que tiene con sus jugadores (…) Tener eso es oro para un entrenador».

Alonso cuenta que tuvo «la carrera soñada», porque jugó en el equipo de su ciudad natal (Real Sociedad), «en el mejor equipo de Inglaterra (Liverpool), en el mejor equipo de España (Real Madrid) y en el mejor equipo de Alemania (Bayern Munich)», por no hablar de la Copa del Mundo. Ahora, a los 41, pone los cimientos para tener la misma trayectoria como entrenador.

Hace cuatro años que Xabi empezó a calentar banquillos. Primero con el Infantil A del Real Madrid, luego con el filial de la Real Sociedad, hasta que el éxito de lmanol Alguacil con el primer equipo le reveló que no iba a llegar a la élite por la misma carretera por la que llegó como jugador. Por eso se presentó el pasado octubre en Leverkusen, para hacerse cargo de una plantilla que en ocho partidos solo había ganado uno. «El hecho de haber conocido diferentes campeonatos me permitió adaptarme rápido», explica Alonso.

La cosa, sin embargo, no empezó muy bien. Aunque goleó 4-0 al Shalke en su debut, lo siguiente fueron derrotas ante el Eintracht (5-1), Leipzig (2-0) y un empate contra el Wolfsburg (2-2). En la Champions no le fue mucho mejor, empates contra el Atlético (2-2) y Brujas (0-0). Lo justito para asegurar el pase a la Europa League. Eso no hizo que la fe que tenía el director deportivo del club, Simon Rolfes, se resintiera. «Créanme, Xabi tiene una fuerza enorme, eso se nota en su forma de dirigir desde la banda, pero sobre todo en cada sesión de entrenamiento, es el hombre que nos devolverá el fuego», dijo al Bild.

Alonso tampoco se veía tan mal, según reconoció a posteriori en la web de la Bundesliga: «No diría que la situación era dramática cuando llegué, pero fue difícil, dramático habría sido estar así en abril (…) La energía y la confianza del equipo era baja. Traté de que los jugadores volvieran a creer en sí mismos. Invité a los que no había jugado antes a que demostraran su valía». De hecho aprovechó la manita que le metió el Eintracht para convertirlo en una especie de motivación: «Le dije al equipo que este era el ejemplo perfecto de lo mal que pueden salir las cosas, y que a partir de ahí sólo podíamos mejorar».

Xabi Alonso dirigiendo a su equipo, al que ha sacado del descenso.@bayer04fussball

Ahora ya no sabe lo que es perder desde el 29 de octubre. Cinco victorias seguidas con 14 goles a favor tres en contra. En el último partido, la semana pasada ante el Bochum, el equipo logró un hat trick de récords: acabó con 409 días sin marcar un penalti, corrió más kilómetros que el resto de la temporada, con 125,8; y evitó, por culpa del pobre bagaje acumulado en el inicio del campeonato, completar la peor primera vuelta de los últimos 17 años.

En la prensa alemana explicaba su secreto, lo que elogiaba de Klopp justo antes de convertirse en entrenador, pero sin nombrar a Klopp: «Los jugadores necesitan seguirte, creer en lo que haces, que mejoran con tu ayuda». Ellos mismos se lo reconocían, como el centrocampista alemán Nadiem Amiri: «Hay una energía diferente desde que Xabi está con nosotros», al que pedía, según explicaba él mismo, que pusiera «energía en el campo, porque si un jugador lo hace, un segundo y un tercero también lo harán».

El Bayern Leverkusen es uno de esos ejemplos de equipos a los que le ha venido de perlas el parón mundialista, especialmente si necesitaban darle tiempo a un nuevo entrenador, o hacer fichajes. Alonso se fijó en el lateral izquierdo del Rayo, Fran García, e incluso llegó a hablar con él, pero el Real Madrid, visto el interés de su ex centrocampista, decidió ejercer su opción de compra.

Sin embargo ha podido recuperar a su gran estrella, el internacional alemán Florian Wirtz, tras romperse el cruzado. El medio centro de tan solo 19 años es la prolongación de Alonso en el campo. Un culé que tenía en la habitación posters de Messi, Dembélé y Aubameyang con la camiseta del Barça, bajo las órdenes de un entrenador que ha pasado a la historia del Real Madrid. Wirtz es con quien más habla en los entrenamientos, con el que cree que el equipo puede dar un paso más, y con el que se siente más identificado como ex futbolista: «Para jugadores como Florian tienes que crear oportunidades para que puedan marcar la diferencia. Si Florian no toca el balón en la posición correcta, será difícil. Lo que importa es lo que pasa antes de que reciba el balón».

kpd