Luis de la Fuente llegó a la sala de prensa de De Kuip sonriente. “No me situaba al principio, pero ya sí, ya sí”, musitaba a un periodista, que le había recordado, antes de empezar a hablar, que aquí, en este estadio, en esta sala de prensa, levantó su primer título (junio de 2023) y empezó un camino que le ha llevado de ser cuestionado a ser un entrenador de primerísimo nivel que levanta más admiración que cualquier otra cosa. Aquella final de la Nations League contra Croacia, resuelta con un penalti a lo Panenka de Carvajal en la tanda, ¿ha cambiado al seleccionador?
“De aquel Luis De la Fuente queda todo. Voy de serie con unos principios y unos valores, pero sí, aquel es el momento en el que empezamos a construir una imagen, una idea, una personalidad. Pero Luis de la Fuente sigue siendo el mismo. He tratado de vestirme por los pies siempre, y lo sigo haciendo gracias a Dios”, respondía ayer en el lugar, dicho queda, donde todo empezó.
Es tal el nivel de aceptación del técnico que ni siquiera una mala gestión como la del ‘caso Iñigo Martínez’ le va a penalizar. El futbolista ya había dado por cerrada su etapa en la selección, y en la Federación lo sabían, pero De la Fuente decidió llamarle. El lunes, una lesión le impedía incorporarse. “Hay un parte médico y el jugador no viene. No ha habido ningún tema más. Hablé con Iñigo cuando tuve que hablar, pero insisto: el parte médico es claro”, zanjó ayer, dejando claro que ya sabe la pareja de centrales que jugará, y que todo apunta a que serán Cubarsí y Le Normand.
También parece claro que Unai Simón recuperará su lugar en la portería en la primera citación a la que puede venir tras la Eurocopa, y que ni siquiera las buenas actuaciones de David Raya en septiembre, octubre y noviembre le van a hacer cambiar de opinión. Se deshizo en elogios hacia Lamine Yamal, cómo no. “Si Dios quiere, veremos en él un futbolista de leyenda, alguien destinado a marcar una época, pero que quede claro que todavía le queda mucho por aprender”, explicó antes del duelo con los Países Bajos, un equipo muy en forma que, de la mano de Koeman, representa una seria amenaza en la primera eliminatoria a dos partidos que debe afrontar De la Fuente.
Todos los actores, principales y secundarios, implicados en la gestación terminan sus explicaciones con una frase similar: "Es la solución menos mala". Aluden así al anuncio, ayer, de la creación, por parte del Gobierno, de una "Comisión de supervisión, normalización y representación" para "corregir la grave situación que atraviesa la RFEF y para que la entidad pueda iniciar una etapa de regeneración bajo un clima de estabilidad e institucionalidad". Es decir, la fabricación, artificial, de un órgano que estará por encima, o al menos en paralelo, a quien vaya a ostentar el poder en la Federación. El anuncio, filtrado en la noche del miércoles, hizo público un pacto entre todos los actores del fútbol español que venía gestándose desde hace semanas.
Fueron conversaciones a muchas bandas entre el Consejo Superior de Deportes (CSD), la Liga, el Comité Olímpico Español, algunos presidentes de Federaciones territoriales... y el propio Rocha. Conviene subrayar que ni UEFA ni FIFA han participado.
La ministra de Deportes, Pilar Alegría, ha estado muy encima del tema, con conversaciones diarias con el secretario de Estado, Rodríguez Uribes. Para el Gobierno, hubo un momento en que lo prioritario era deshacerse de él, de Rocha, pues le consideran un símbolo más del rubialismo. De hecho, los más cercanos al extremeño en Las Rozas deslizaron el mismo día de su declaración ante la jueza de la 'Operación Brody' que todo (el paso de testigo a investigado) obedecía a una maniobra del Ejecutivo para impedirle ser presidente de la Federación. Pero esa mutación no era suficiente, pues sólo una sentencia condenatoria firme inhabilita para el cargo.
De modo que se activaron las denuncias de Miguel Galán ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Una de ellas derivó en un expediente por falta "muy grave", puerta abierta a la suspensión provisional por parte del CSD. Sin embargo, los servicios jurídicos advirtieron de un escollo legal: Rocha, hoy, no ostenta cargo alguno en la Federación, de modo que su suspensión generaba dudas. Eso, unido a que era el único candidato a presidir la Federación (consiguió 107 avales de casi 140 posibles), unido a que FIFA y UEFA tampoco iban a consentir una acción unilateral, unido también a que el sistema de elección es el que es (un sistema puramente clientelar) ofrecían muy poco margen.
Hace ya algunas semanas, un personaje importante en el deporte español hablaba en privado de crear "una comisión que tenga buena imagen, que tutele las elecciones". Esa idea fue calando en el Gobierno, que finalmente lo hizo tal cual. Y lo hizo remitiendo a la Ley del Deporte. En su artículo 1.2, el texto dice que "corresponde a la Administración General del Estado la representación del deporte español y la supervisión pública del sector en aquellos aspectos que se consideran de interés general para el Estado". En el artículo 11, reconoce el deporte como "un bien de interés público estatal". Así las cosas, a través de una resolución del presidente del CSD, José Manuel Rodríguez Uribes, aludiendo a esos dos artículos, es como cree el Gobierno haber encontrado el amparo jurídico.
Un papel secundario para Rocha
El pacto incluye a Rocha, que acepta el papel secundario que le otorga el Gobierno. Si nada se tuerce, será presidente (de una Junta Directiva o de una Comisión Gestora) hoy o el próximo lunes, pero lo será de puertas para dentro. No aparecerá en ningún lugar público (no lo ha hecho nunca) y la cabeza visible de la Federación será la persona, conocida por el gran público, que acepte la propuesta de formar parte de esa comisión. Vicente del Bosque, el primer nombre filtrado, de momento no dice nada, aunque quienes le conocen lo dan por imposible.
A esa figura pública reconocida le acompañarán "personas independientes de reconocido prestigio", que tutelarán un proceso en el que se les pide a Rocha y a sus apoyos que mantengan un perfil bajo y se dediquen solamente "a la mera administración ordinaria de la entidad, tal y como exige la ley". Con esta frase tratan en el Gobierno precisamente de calmar los nervios de UEFA y FIFA porque, pese a que desde la Federación filtraron a medios afines que ambos organismos estaban al tanto del movimiento, lo cierto es que no era así.
Una importante fuente de FIFA decía a este periódico, por la mañana, que ese organismo no había dado el visto bueno a nada. A media tarde, mediante un comunicado conjunto, esta postura se confirmaba. UEFA y FIFA expresaron que siguen esto con "gran preocupación" y que pedirán "más información" para garantizar la autonomía de la Federación. Si de verdad hubiesen dado el visto bueno, no pedirían "más información".
Fuentes del CSD matizaban que Uribes y el secretario general de FIFA, Mattias Grafsröm, habían conversado acerca del caso de la Federación italiana en 2006, cuando el Gobierno del país intervino la Federación por el Calciopoli (la corrupción sistémica en las designaciones arbitrales). "En aquella ocasión, ese movimiento tuvo el visto bueno de los órganos rectores del fútbol a nivel internacional", decían esas mismas fuentes. A juzgar por el comunicado de FIFA y UEFA, el visto bueno al caso italiano en 2006 todavía no ha llegado para este pacto improvisado en España en 2024.
Dani Carvajal (Leganés, 33 años) se incorpora esta semana al grupo en los entrenamientos. Ya está bien de la lesión en el sóleo de la pierna derecha, y es posible que incluso entre en la convocatoria para el clásico. El capitán del Real Madrid, líder de ese vestuario y líder del vestuario de la selección, atiende a EL MUNDO después de un acto publicitario para presentar el balón con el que se jugará ese partido, el primer balón creado expresamente para un partido por parte de LaLiga y Puma. Está sonriente, está tranquilo. Está contento. Poco a poco se va olvidando de la gravísima avería en la rodilla que sufrió hace poco más de un año y que le ha tenido lejos del campo muchísimos meses. Está de vuelta y para quedarse.
Pregunta. ¿En qué nota que el clásico no es un partido más?
Respuesta. En todo. En el número de entradas que te piden, en que la gente te dice más cosas por la calle...
P. ¿Pesa el ciclo de derrotas contra el Barça del año pasado?
R. No es que pese, pero tenemos ganas de revancha. De todas formas queda mucha Liga. Es un partido, son tres puntos. O sea, no va a pasar nada, ganes o pierdas, pero sí que es verdad que en el ámbito emocional, ganarle supondría algo importante para nosotros y para nuestra afición.
P. Bueno, ¿cómo se encuentra?
R. Bien, muy bien. Esta semana ya estaré con el equipo e imagino que disponible para el domingo.
P. ¿Qué es lo que más le está costando? Rodri contaba que lo que más le costaba era volver a hacer movimientos que antes hacía con naturalidad.
R. Sí, hay acciones en las que tu cabeza necesita pensar un poco más antes de hacerlas. Antes salían de un modo natural y ahora cuesta más. Es como que tu cabeza te va diciendo "este gesto lo puedo hacer, este gesto a ver...". Es un proceso temporal hasta que todo vuelva a ser automático.
P. ¿Tiene miedo?
R. Yo no, ni lo tengo ni lo he tenido. Hay días que estás más molesto, otros días menos. Pero estoy de acuerdo con De la Fuente cuando dijo que todos los futbolistas tenemos molestias. Molestias sí, pero miedo no.
"Mentalmente he llevado mejor esta lesión que todas las lesiones y recaídas de 2021"
P. ¿Cómo ha llevado este año mentalmente?
R. Si te soy sincero, mejor que aquel 2021 en el que tuve muchas lesiones y muchas recaídas. Esta vez ha sido un proceso más de mentalizarte, de decir "tengo una lesión grave, una lesión a largo plazo" y saber que tienes que ir superando fases, acortando plazos... Y para eso te mentalizas. En 2021 fue mucho peor, porque fue lesionarme, recuperarme, empezar a ver la luz y volver a caer. Fue mucho más frustrante, la verdad.
P. ¿Qué ha aprendido este año que ha pasado?
R. Bueno, a valorar todo mucho más. Disfrutar de cada día de entrenamiento, ir todos los días con la mejor de mis sonrisas, a cada partido. Algo que quizá antes no sabía hacer. Antes no jugaba de titular y llegaba a casa enfadado. Ahora no, ahora bueno, me lo tomo de otra manera. Disfruto más de las cosas pequeñas porque hace unos meses estaba en la mierda, y por eso ahora me alegro simplemente de una convocatoria. Ver el lado positivo de las cosas. Disfrutar de cosas que antes no valoraba.
P. ¿Ha cambiado su forma de ser?
R. Yo creo que ha cambiado en eso que estamos hablando. Mi mujer, mi familia, saben y recuerdan perfectamente que yo antes me enfadaba mucho por cualquier cosa, me exigía a mí mismo muchísimo. Y ahora disfruto de las cosas pequeñas, y eso me hace ser un poco más feliz.
P. ¿Le ha dado tiempo a pensar qué hará cuando se acabe el fútbol?
R. No, porque ahora mismo no veo mi vida sin fútbol. Entonces, hasta que me dé, sobre todo, mi cabeza, voy a estar dando guerra.
Dani Carvajal, con el balón del clásicoÁNGEL NAVARRETE
P. Es una pregunta un poco obvia, pero, ¿en quién se ha apoyado?
R. Sin duda, mi mujer es la que más me ha aguantado este año.
P. ¿Y qué ha sido lo peor?
R. El dolor, o sea, el dolor del post-operatorio, los primeros 10 días, dos semanas, era tremendo. A veces me ponía a desayunar con mi mujer, y recuerdo tener que tomar medicación, cada vez más fuerte, cada dos horas. No podía dormir, no podía comer. Intentaba bajar a comer y aguantaba en la mesa dos minutos y tenía que ir al sofá a tumbarme porque no aguantaba el dolor. Eso fue lo más duro.
P. ¿Veía mucho o poco fútbol?
R. Pues al principio me costó ver fútbol, quería desconectar. Pero luego me picaba el gusanillo.
"Xabi es un entrenador moderno, que se adapta al rival. Me gusta ese concepto"
P. ¿Cómo definiría a Xabi Alonso como entrenador?
R. Es un entrenador joven, y con joven me refiero a que es un entrenador con conceptos jóvenes, con ganas de ir a por los partidos sin esperar. Un entrenador que se adapta también muchas veces al rival, y cambia buscando la fórmula que él cree que le puede hacer más daño. Me gusta.
P. ¿Le pidió ayuda a usted?
R. No es pedir ayuda. Charlamos varias veces, comentamos un poco de todo, qué cosas creía yo que se podrían mejorar de la plantilla, cómo lo veía él...
P. ¿Se va a acabar algún día la polémica alrededor de Vinicius?
R. Pues hombre, no lo sé, pero, ¿dónde está la polémica con Vinicius en Getafe? Un jugador, con el balón en el otro lado del campo, te saca el brazo y te da en el cuello y en la cara. Pues creo que no hay más que discutir.
P. ¿Cómo intentan ayudarle?
R. Intentamos que se centre en el fútbol, porque cuando él está centrado es el mejor, uno de los mejores.
P. ¿Qué es lo mejor de lo que no vemos de Mbappé?
R. Pues que es un tío fantástico. Llega al vestuario con una sonrisa, se integró desde el minuto uno. Es un tío normal, no mira a nadie por encima del hombro, y creo que eso es importante sabiendo quién es Mbappé.
Mikel Merino (Pamplona, 28 años), con permiso del gol de su amigo Oyarzabal en la final, fue el hombre que puso patas arriba a España un viernes por la tarde, en pleno julio. Estuvo «una hora» en el aire esperando aquel balón, ante Alemania, en el último minuto de la prórroga. Ya feliz en Londres, con muebles y todo, habla alto y claro sobre la huelga, o no, de futbolistas.
PREGUNTA.Antes de nada, ¿me confirma que sigue casado?
RESPUESTA. Sí sí, seguimos juntos a pesar de todo el estrés de las mudanzas, del cambio de país...
P.No, yo se lo decía porque no cualquiera aguanta casarse y que su recién estrenado marido se vaya a trabajar al día siguiente [Mikel Merino se casó el 1 de junio y el 2 se fue a la concentración para la Eurocopa].
R. Sí, la verdad que fue duro, pero por suerte tengo una mujer maravillosa que entiende perfectamente a lo que me dedico. Eso sí, ¡se la guardó! Y ese viaje lo tenemos pendiente.
P. ¿Pero entonces todavía no se han ido de luna de miel?
R. No. Nos fuimos de vacaciones, estuvimos en Ibiza, cerquita de casa para no perder días en viajar, ya que no teníamos muchos. Así que la luna de miel sigue pendiente.
P. Bien bien... Desde que es campeón de Europa, ¿ha cambiado algo? ¿se siente más alto? ¿más guapo?
R. Más alto y más guapo no, pero sí que, aunque las cosas no cambien, porque la mentalidad y la ambición de seguir ganando cosas están ahí, el respeto que notas alrededor tuya te viene muy bien para seguir creyendo en lo que haces.
P. ¿En qué nota ese respeto?
R. En las cosas que te preguntan. Te preguntan cómo es la experiencia, cómo fue tal o cual partido... Hablamos de compañeros, gente del staff. Notas que les interesa saber cómo es ganar. Todos te ven con otros ojos.
Mikel Merino, jugador de la selección y del Arsenal.JOSE AYMAMUNDO
P. Eso los compañeros. ¿Y la gente de la calle?
R. Te paran más porque una Eurocopa tiene una repercusión enorme a nivel mundial. En redes sociales el aumento de seguidores que se tiene es bestial. Cuando te ven en el escenario más grande, y además yo que tuve la suerte de marcar aquel gol a Alemania, se fijan. Yo por ejemplo gané 400.000 seguidores en Instagram.
P. Pregunta retórica. ¿Qué recuerda de la Eurocopa? ¿Qué imagen?
R. Fue como una película hecha a medida para nosotros y salió todo perfecto. No fue de casualidad, nosotros pusimos todo, pero si te pones a analizar el proceso, estaba hecho todo a medida.
P. Pensé que hablaría del gol contra Alemania. ¿Qué recuerda de eso?
R. Recuerdo mucho y poco a la vez. No tengo un recuerdo nítido, tengo como flashes, instantes. Son como fotos. Por ejemplo, me viene mucho a la cabeza el momento de ver venir el balón muy lento, recuerdo estar en el aire y sentir como que no llegaba. Yo le decía al balón: ¡'ven, ven', que estoy casi cayendo y no remato! E igual fue un segundo, pero a mí me pareció una hora. Y luego ver el balón caer lento, no sabes si toca la red, escuchar el silencio, como decía Iniesta... Yo también escuché el silencio.
P. ¿Cuántas veces lo ha visto?
R. Muchas, no sé si llegará a centenas, pero por decenas podemos contarlo. Y muchas veces me han pedido que lo recuerde, pero no hay problema. Recordar ese gol nunca será un problema.
P. ¿Qué día piensa usted: 'podemos ganar la Eurocopa'?
R. Hay distintas fases. El primer partido, ganar 3-0, aunque el resultado fuera engañoso... Luego ganas a Italia y dices: 'ostras, dos selecciones top y hemos ganado'. Pero luego ya el día D fue el día de Alemania. Cuando pasas ese día, dices: 'puedo ganar'.
P. ¿Sienten de algún modo que la efervescencia ya ha pasado y que ya hemos vuelto a la normalidad, que la selección ya no interesa tanto?
R. Yo creo que lo que ha cambiado es la confianza. Antes, nosotros podíamos decir que estábamos preparados para ganar algo grande y que podíamos conseguirlo. Ahora la afición ya sabe que no es que lo digamos, es que es posible. Porque lo hemos hecho. Luego ganarás o no, porque son detalles, pero estás en disposición de ganar. La gente ya sabe que este equipo está preparado para que, si esos detalles caen de nuestro lado, ganar.
P. ¿Este grupo mira hacia atrás o hacia delante, hacia la Eurocopa ganada o hacia el Mundial por ganar?
R. No podemos olvidar de dónde venimos, pero no podemos quedarnos allí. Del pasado no se vive, porque si no el presente te atropella. Y del futuro tampoco se vive, porque si hoy no estás en ganar a Dinamarca, el futuro se empieza a torcer y el camino no es recto. Tenemos que tener la mirada en las nubes y los pies en el suelo.
P. ¿Por qué tomó la decisión de marcharse al Arsenal?
R. Después de seis años muy buenos en San Sebastián, mi cuerpo y mi mente me pedían probar algo nuevo, intentar competir al máximo nivel y pelear por ganar títulos como la Champions o la Premier. Hubiera seguido encantado en la Real, es mi casa, pero necesitaba de alguna manera ese nuevo desafío. Lo que hablé con el Arsenal, con el míster [Arteta] me empujó definitivamente.
Merino.JOSE AYMAMUNDO
P. Estamos a vueltas con el calendario. ¿Me permite una crítica? Se quejan mucho, pero no hacen nada...
R. Para dar un paso adelante se tiene que hacer desde un consenso que hoy no tenemos. No vale con que uno diga una cosa y otro otra. Hoy día es difícil llegar a un consenso, porque seguramente haya distintas maneras de ver esto, diferentes opiniones. Yo creo que no es cuestión de quejarse de que hay muchos partidos. Es algo palpable...
P. Por eso digo, que es algo obvio la exageración del calendario. ¿Por qué no hay una unión?
R. Hay que darle una vuelta. Las huelgas, en nuestro sector, son algo socialmente controvertido. Y mucha gente puede decir: ¡cómo puedes amenazar con ir a una huelga si eres futbolista!
P. Sí, y hay quien dirá que son ustedes millonarios, que cómo se atreven... Pero eso es populismo.
R. Pues posiblemente, pero eso lo dificulta. Sí es verdad que hay que estudiarlo. Igual tampoco se trata de poner una huelga encima de la mesa. Quizá estaría mejor empezar por reunirse y hablar con los estamentos del fútbol para ver cómo se puede seguir avanzando. Ahora mismo el problema se está poniendo encima de la mesa, y ahora veremos si es posible resolverlo. Pero lo que es seguro es que tiene que haber un consenso entre FIFA, UEFA y jugadores.
P. ¿Estaría dispuesto a cobrar menos por jugar menos partidos y de ese modo preservar la salud?
R. Yo creo que la salud es lo primero, y todos queremos llegar a los 55-60 años pudiendo salir a correr con nuestros hijos, poder jugar y agacharnos a jugar con ellos... Mi padre, por ejemplo, que fue futbolista, cuando yo era niño y quería jugar con él a cualquier cosa, él no podía porque tenía la rodilla hecha polvo. Yo no querría que me pasase eso. Y en cuanto al dinero, pues no vamos a quejarnos por cobrar un poco menos o cobrar un poco más, siendo como es la salud lo primero.
P. ¿Juegan con más miedo ahora que ven tantas lesiones?
R. No. Cuanto más pienses en las lesiones, más opciones tienes de lesionarte. Hay que cuidarse, alimentarse, etc... Pero luego hay un factor suerte.
P. Volviendo a la selección, ¿han madurado los adolescentes?
R. Siguen igual, con las mismas bromas. Pero está bien, esa mezcla de frescura y veteranía viene bien. Yo no me expresaría así como ellos, pero bueno, me río.
P. ¿Luis de la Fuente es el ejemplo de que se puede ser normal y triunfar?
R. Sí. Pero por suerte creo que en esta selección tenemos más ejemplos. Gente que no va de estrella, gente que sabe que lo primero son los valores humanos, el respeto, la puntualidad, el compañerismo, y después, jugar bien o jugar mal, pues...