Además de haber corrido el Giro de Italia 2021, se había hecho famoso en las redes como influencer de deportes extremos
Patrick Mentil
La joven promesa del ciclismo Patrick Mentil, de 22 años, ha muerto en un trágico accidente de tráfico en el que otros tres jóvenes, de alrededor de 30 años, han resultado heridos. Dos de ellos se encuentran en estado crítico.
El accidente, un choque frontal, ha tenido lugar a última hora de la tarde de este jueves en Onigo, al noreste de Italia, cercana a la localidad de Castelcucco, donde Mentil residía.
Mentil, era una de las jóvenes promesas italianas del ciclismo. Además de haber corrido el Giro de Italia 2021 como profesional en la modalidad Next Gen -donde compitió con ciclistas como el español Juan Ayuso-, se había hecho famoso en las redes sociales como influencer de deportes extremos.
Un adelantamiento temerario
El accidente se produjo en la carretera regional de Feltrina, poco después del cruce que tiene un desvío que conduce a Onigo. Se vieron implicados dos coches, un Audi A3 blanco y un Land Rover negro.
Alrededor de las 20:00 horas, los dos vehículos chocaron frontalmente. Según las primeras averiguaciones, fue un intento de adelantamiento temerario del Audi lo que provocó la colisión.
El coche que conducía Mentil no se percató de que el todoterreno se encontraba en la calzada contraria. El choque fue terrible: el impacto entre los vehículos, que al parecer se produjo a gran velocidad, fue tan violento que los restos del Audi quedaron esparcidos hasta cien metros de distancia.
Hasta el lugar, junto con el servicio sanitario y el helicóptero del Suem 118, se desplazaron los Carabinieri y un equipo del cuerpo de bomberos de Montebelluna, que aseguraron la zona del accidente y realizaron las pericias legales.
La recuperación del cuerpo del joven de 22 años corrió a cargo de la policía mortuoria de Protección Civil.
Patrick Mentil es la segunda víctima mortal en carretera en la provincia de Treviso en apenas cuatro días desde del comienzo del nuevo año.
Otra historia
JAVIER SÁNCHEZ
@javisanchez
Actualizado Jueves,
26
octubre
2023
-
13:01El ciclista aficionado lleva casi 40 años buscando ascensos que no conozca...
El nuevo gigante pega el estirón y el ciclismo español, necesitado de sensaciones intensas, se congratula. Iván Romeo (Valladolid, 2003) aporta nueva luz a un presente esperanzador. El espigado corredor del Movistar (1,93 metros), campeón del mundo de contrarreloj sub'23, estrena palmarés en categoría profesional y certifica las expectativas levantadas por un chaval que rompe estereotipos: atesora un físico imponente, opuesto al típico escalador, y presume de formación académica.
El vallisoletano, integrante de esa nueva generación comandada por Juan Ayuso, inauguró casillero el pasado viernes con un fenomenal triunfo en la tercera etapa de la Volta a la Comunitat Valenciana, con una escapada a falta de 17 kilómetros para la meta con la que sorprendió a gente tan experimentada como Carlos Rodríguez, Pello Bilbao, Joao Almeida o Thymen Arensman. El chico, que es mucho más que un excelente contrarrelojista, ya avisó de sus intenciones en la jornada anterior, en la que rompió el grupo de las mejores. El sábado, con final en el Portell de Morella, trabajó en beneficio de sus compañeros Pablo Castrillo y Jefferson Cepeda, que buscaron la victoria hasta el último suspiro. El triunfo fue para el colombiano Santiago Buitrago (Bahrain), líder de una ronda que acaba este domingo en Valencia con una etapa de 104 kilómetros que arranca en Alfafar.
Romeo es uno de los pinguinos más talentosos de la escuadra de Eusebio Unzué. Desde pequeño destacó por su habilidad en la escuela de Juan Carlos Domínguez de Arroyo de la Encomienda. Luego se incorporó a la MMR Cycling Academy de Samuel Sánchez y Benjamín Noval y perfeccionó su técnica en la factoría estadounidense Hagens Berman Axeon de Axel Merckx, hijo del corredor más espléndido de la historia. En 2023 se incorporó al Movistar y desde entonces no ha dejado de progresar. «Es muy maduro, con buena base, muy profesional», dicen desde el equipo navarro. Es meticuloso en el estudio de los recorridos. El pasado verano se fue, junto a su padre, a Zúrich días antes del comienzo del Mundial para analizar el trazado del circuito. Su trabajo fue recompensado con una medalla de oro en la crono sub'23. Sembrar para recolectar.
«Me siento en las nubes, muy contento porque al final es algo que venía buscando desde hace mucho tiempo y por lo que trabajamos todos los días. He hecho un invierno muy duro. He dado un salto de calidad muy grande pero de nada sirve si luego no ganas, hay que materializarlo, así que estoy contentísimo por mí y muy contento por el equipo», afirmó el viernes tras subir al podio de Alpuente.
Romero es el cuarto español que gana etapa en este 2025. Los anteriores fueron su compañero Javier Romo, en Tour Down Under; Mario Aparicio (Burgos), en Sharjah Tour de Emiratos, y Urko Berrade (Kerm Pharma) en Clássica Camp de Morvedre.
«Yo también correré y ganaré en el Giro». A los 15 años, Tadej Pogacar quedó prendado por la Corsa Rosa tras contemplar la victoria de su compatriota Luka Mezgec en la clausura de la edición de 2014. Desde entonces, aquel adolescente se empeñó, sin éxito, en debutar en la ronda italiana, un anhelo que cumplirá este sábado, en la salida en Venaria Reale, en la zona del Piamonte. Será una jornada inolvidable para el esloveno, que se ha marcado el reto de conquistar en el mismo año Giro y Tour, hazaña inédita desde hace 26 años, cuando Marco Pantani selló el doblete. En aquel 1998 nació Pogacar. Un guiño cómplice del destino. Los anteriores que cumplieron este desafío fueron Fausto Coppi (ediciones de 1949 y 1952), Jacques Anquetil (1964), Eddy Merckx (1970, 1972 y 1974), Bernard Hinault (1982 y 1985), Stephen Roche (1987) y Miguel Indurain (1992 y 1993).
«Siempre quise disputar el Giro, porque se corre cerca de Eslovenia. Cuando era un niño iba a ver las etapas que pasaban cerca de mi casa. Recuerdo la victoria de Luka Mezgec, aquello fue algo inolvidable para mí», ha dicho el incomparable Pogacar.
Mezgec, un veterano sprinter de 35 años, es la inspiración rosa de Pogy. Diez años separan a ambos eslovenos, pero sus vidas comparten paralelismos y escenarios. Mezgec nació en Kranj; Pogacar, en Klanec. Ambas ciudades están separadas por sólo 16 kilómetros. La primera carrera disputada por Pogacar, con 10 años, fue en Trstenik, muy cerca de Kranj. El bicampeón del Tour de Francia estudió en la Facultad de Gestión Deportiva de Kranj.
1 de junio de 2014
Aquel día inolvidable para Pogacar fue el 1 de junio de 2014, en la última etapa de un Giro ganado por Nairo Quintana. En la clausura, Mezgec impuso su punta de velocidad en la meta de Trieste, superando a Giacomo Nizzolo y a Tyler Farrar. Entonces, Pogacar saltaba de alegría con la victoria de su compatriota, un velocista notable, que esa misma temporada sumó tres triunfos en la Volta a Catalunya. Un año antes consiguió tres terceras posiciones en el Giro. En 2020 logró dos segundos puestos en el Tour. Es uno de los mejores lanzadores de Caleb Ewan en el equipo Jayco y este sábado también tomará la salida del Giro'2024.
Desde crío, Pogi se entusiasmó por el ciclismo, con nueve años ingresó en el club Rog Ljubljana, donde corría su hermano Tilen. Nunca se despejada de la televisión para ver el Tour y el Giro. Disfrutaba con Nibali, Contador, Scarponi o Froome. A veces se trasladaba con su padre al norte de Italia para ver en directo el paso del Giro. Desde su casa hastra Trieste (ciudad que tanto le influyó) sólo hay 111 kilómetros. «Siempre quise ir al Giro y ahora es el momento», dijo el esloveno en la presentación del recorrido de la Corsa Rosa de 2024. Desde que fichó por el UAE, en 2019, pidió a Joxean Fernández Matxin participar en el Giro, pero el director español le recomendó que se volcara en el Tour y en la Vuelta, pero al finales del pasado año aceptó la propuesta del esloveno. «El recorrido se ajusta bastante bien a sus necesidades. Creo que Tadej es tan polivalente que puede ganar en cualquiera carrera », aclaró el técnico vasco.
Pogacar, que ha convertido exhibiciones mayúsculas en acto rutinarios, necesitaba nuevos retos. «Quiero probar algo diferente, no repetir siempre el mismo calendario. Siento que si sigo haciendo lo mismo, al final eso no será bueno para mi cuerpo y por eso propuse al equipo hacer algo nuevo», ha señalado el extraordinario escalador, que en este curso ha arrasado en la Lieja-Bastoña- Lieja, Volta a Catalunya y Strade Bianche.
Pogacar parte como indiscutible favorito para una ronda que arranca este sábado (Venaria Reale-Turín, 140 kilómetros) y que finalizará el 21 de mayo en Roma, con una etapa llana de 125 kilómetros. Las citas claves son las contrarrelojes de las jornadas 7ª y 14ª y los ejercicios montañosos de la 15ª, 16ª (Monte Pana), 17ª, 19ª y 20ª (Monte Grappa). Con la ausencia de Remco Evenepoel, los principales rivales de Pogacar serán el galés Geraint Thomas y los colombianos Daniel Felipe Martínez y Nairo Quintana. Las apuestas españolas se centran en Juanpe López (Lidl-Tek) y Pelayo Sánchez (Movistar).