En el orgullo de la sub-17 aún está clavada la tanda de penaltis que le privó del Europeo el pasado mes de mayo. El equipo de Kenio Gonzalo le devolvió la crueldad a Alemania ganando la semifinal del Mundial con un gol de Lucía Corrales en el minuto 90, pero este domingo (15:30 horas) quiere la guinda. España defiende ante Colombia la corona de 2018 para redondear un año brillante de las categorías inferiores del fútbol femenino. Porque a esa plata en el Europeo sub-17, le siguieron los títulos en el Europeo sub-19 y el Mundial sub-20. Hay presente y sobra futuro.
Dijo Carla Camacho después de la dramática victoria contra Alemania que esta selección lleva en la sangre luchar hasta el final. Y vale de muestra su camino por este Mundial, que empezó precisamente contra el rival que hoy termina: en el primer partido de la fase de grupos, España derrotó a Colombia por la mínima con un gol de Jone Amezaga en el 85. En ese mismo minuto llegó la derrota ante México. Y en cuartos ganaron a Japón con un doblete de Vicky López en los últimos cinco minutos. Sufrimiento no ha faltado.
Mientras la absoluta sigue dividida en la guerra entre la Federación y buena parte de sus jugadoras, mientras el brillo aún se resiste en el escenario grande, los éxitos se agolpan en categorías inferiores. López (Barcelona) y Camacho (Real Madrid) son las dos estrellas de una generación que suma otra palada de talento al fútbol femenino español, pero a ellas también cabe sumar el olfato de Amezaga, su compañera arriba, el toque de Olaya Rodríguez, la ascendiente de Yoli Sierra, y tantas otras.
Pendientes de Caicedo
España, que hace cuatro años ya fue campeona con las Claudia Pina, Salma Paralluelo y compañía, llega como favorita para reeditar el título, pero ese duelo en la fase de grupos le dejó claro el peligro de esta Colombia que ha clasificado a su país para la primera final de un Mundial de fútbol de cualquier categoría.
El fútbol femenino está empezando a cuajar en el país cafetero al calor de Linda Caicedo, una de las mayores promesas del mundo. Sólo en este 2022, ha disputado tres torneos en tres categorías distintas y en todos ha sido estrella. Fue subcampeona de la Copa América con la absoluta (y mejor jugadora del torneo a sus 17 años); llevó a la sub 20 a cuartos de final del otro Mundial; y en este llega en la final como máxima goleadora (4).
En ella se centrarán los esfuerzos de una selección que busca cerrar por todo lo alto otro año reluciente en las categorías inferiores del fútbol femenino español.
Entrevista
FEDERICO MARÍN BELLÓN
@FedericoMarin
Actualizado Miércoles,
17
mayo
2023
-
02:53La jugadora de 26 años, número 14 del mundo, ha elegido España...
Los Boston Celtics conquistaron este lunes el título de la NBA tras derrotar a los Dallas Mavericks por 106-88 (4-1 en la serie) y sellar su anillo número 18.
Los Celtics son ahora el equipo con más títulos de la historia de la NBA ya que este nuevo éxito les permitió desempatar con sus eternos rivales: Los Angeles Lakers (17).
Los de verde no ganaban un anillo desde 2008 cuando Paul Pierce, Kevin Garnett y Ray Allen alcanzaron el número 17 venciendo precisamente a los Lakers.
Dieciséis años después, la legendaria franquicia de Bill Russell, Larry Bird, Red Auerbach y muchos otros mitos del baloncesto ya tiene a nuevos dioses para su panteón con un conjunto liderado por Jayson Tatum y Jaylen Brown (MVP de estas Finales) que, del principio al final de la temporada, ha sido el imparable dominador de la liga.
Primeros del Este con el mejor balance de la NBA (64-18), los de Joe Mazzulla aplastaron a todos sus rivales de conferencia y tampoco dieron opción en las Finales a los muy meritorios Mavericks de un Luka Doncic con un físico tremendamente castigado.
El anillo supone además la ansiada redención de los "Jays", que habían llegado cinco veces a la final del Este y una a las Finales -sin contar esta- quedándose siempre al borde de la gloria, sobre todo en aquellas perdidas ante los Golden State Warriors en 2022.
Nunca más tendrán que escuchar las críticas que aseguraban que no estaban preparados para brillar en los momentos más importantes.
Quinteto
Al lado de Tatum y Brown, los Celtics han disfrutado del quinteto más completo y apabullante de la temporada.
Kristaps Porzingis -quien regresó este lunes tras perderse dos partidos por lesión- y Jrue Holiday fueron dos fichajes de lujo y un Derrick White multiusos redondeó ese heroico quinteto ya inolvidable.
Desde el banquillo, el primero en salir siempre fue otro de los grandes protagonistas de esta velada apoteósica: el dominicano Al Horford, que a sus 38 años y tras 17 temporadas por fin tocó el cielo de la NBA.
Porzingis celebra con champán el 18º anillo de los Celtics.AP
Ese espléndido juego colectivo apareció en su plenitud en el definitivo encuentro : Tatum rozó el triple-doble en su mejor partido de las Finales (31 puntos, 8 rebotes y 11 asistencias); Brown consiguió 21 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias; Holiday aportó 15 puntos y 11 rebotes; White sumó 14 puntos y 8 rebotes; Horford logró 9 puntos y 9 rebotes. Y también el rebote de equipo (51 por 35) y la defensa estuvieron a la altura (29,7 % en triples de Dallas).
Los Mavericks, que extendieron a 0-157 el balance histórico en la NBA de equipos con 3-0 en contra (nadie jamás lo ha remontado), acabaron con sabor amargo una campaña por otro lado fantástica en la que Doncic e Irving volaron de la mano, Dereck Lively destacó como novato y los fichajes de Daniel Gafford y P.J. Washington les permitieron reinar en el Oeste.
Rotundamente inferiores a estos majestuosos Celtics a lo largo de la serie, los Mavericks contaron en su despedida con 28 puntos, 12 rebotes y 5 asistencias de Doncic mientras que Irving volvió a apagarse en Boston con solo 15 puntos y 9 asistencias.
Gloria de verde
Como niños temblorosos el primer día de escuela entraron al partido los dos conjuntos. Los nervios, las imprecisiones y los errores se acumularon sin pausa en un primer cuarto más emocionante que brillante.
El TD Garden, con un ambiente extraordinario, era un volcán verde desde mucho antes del salto inicial. Pero su erupción llegó al máximo con la entrada de Porzingis, recibido ya como un auténtico héroe de Boston pese a estar claramente mermado.
Sin apenas rastro de Doncic (5 puntos) y con Irving perdido en combate (0), Josh Green dio oxígeno a los Mavericks con dos triples.
Pero en medio de la incertidumbre y las manos vacilantes emergieron Brown y Holiday, con 6 puntos cada uno y un rabioso compromiso defensivo. Precisamente esa dureza atrás y varios contraataques seguidos propulsaron a los locales con un sensacional parcial de 9-0 para cerrar el primer cuarto con la moral en alto (28-18).
El segundo periodo fue el de ajustar cuentas pendientes: si Boston no había brillado en los triples hasta ahora y a Tatum le faltaba explotar en anotación ambas cosas se dieron la mano en ese cuarto.
Tatum se lució con 12 puntos y un tramo pletórico y los Celtics maravillaron desde el perímetro con un gran 7 de 11 en triples hasta anotar 39 puntos solo en ese segundo capítulo.
Los Mavericks empezaron a derretirse sin que sus estrellas pudieran remediarlo y la puntilla la puso Payton Pritchard en uno de esos momentos mágicos de la NBA: el pequeño base deslumbró con un triple sobre la bocina y desde el centro del campo, exactamente idéntico al alucinante tiro que ya había clavado en el segundo partido en esas condiciones imposibles.
Con 67-46 y todo a favor se fueron los Celtics al vestuario. Tatum (16 puntos y 9 asistencias), Brown (15 puntos) y Holiday (11) marcaron el paso mientras Derrick Jones Jr. (10 puntos) era el sorprendente máximo anotador de unos Mavericks huérfanos de Doncic (9 puntos) e Irving (5).
No había indicios de que los Mavericks pudieran orquestar una remontada ni que pudieran acercarse a su magnífico nivel del cuarto partido.
Ni siquiera un mal tercer cuarto de los Celtics (29,2 % en tiros) les permitió estrechar una diferencia que ya no bajó de los 17 puntos por mucho que Doncic lo intentara con 9 puntos en ese periodo.
El último cuarto arrancó con un incontestable 86-67 y los fans de Boston ya solo tuvieron que descontar los segundos para lograr el anillo 18 en una memorable noche de gloria verde.