Los Pacers acaban con los Cavaliers, revelación de la temporada, y se meten en la final del Este de la NBA

Los Pacers acaban con los Cavaliers, revelación de la temporada, y se meten en la final del Este de la NBA

Cuando dan comienzo los playoffs se hace borrón y cuenta nueva. Da igual que hayas sido el mejor, el peor o la revelación de la temporada regular, las fuerzas se igualan y todo puede pasar. Esa premisa la ha vivido en sus carnes Cleveland, que ha visto como, pese a su campaña histórica, ha sido eliminado con un contundente 4-1 por Indiana, informa Efe.

Por lo tanto, los Pacers jugarán por segundo año seguido la final de la Conferencia Este de la NBA tras derrotar este martes por 105-114 a los Cavaliers.

Cuartos del Este en la temporada regular, los Pacers de Tyrese Haliburton sentenciaron a unos Cavaliers que habían firmado una campaña histórica (64-18) hasta acabar primeros de conferencia pero que se vieron arrollados por un conjunto de Indiana que les venció en los tres partidos disputados en Cleveland.

Para el recuerdo quedaron el triple ganador de Haliburton con 1.1 segundos en el segundo partido o la paliza del cuarto encuentro, en el que iban ganando de 41 puntos al descanso.

Se esperaba mucho más en el playoff de los Cavaliers, pero los dirigidos por Kenny Atkinson, técnico con doble nacionalidad estadounidense y española, fueron claramente superados por los Pacers y también les afectaron mucho los problemas físicos durante la serie de Donovan Mitchell, Darius Garland, Evan Mobley, etc.

El rival de Indiana será el ganador de la semifinal entre los Celtics y los Knicks, que dominan los neoyorquinos por 3-1.

Todo el quinteto titular de los Pacers acabó en dobles dígitos de anotación. Haliburton estuvo brillante (31 puntos con 10 de 15 en tiros incluyendo 6 de 10 en triples), 6 rebotes y 8 asistencias y tuvo un respaldo inmejorable por parte de Pascal Siakam (21 puntos y 8 rebotes).

Pero también fueron fundamentales Andrew Nembhard (18 puntos y 6 asistencias), Myles Turner (10 puntos, 7 rebotes y 4 tapones) y Aaron Nesmith (13 puntos y 13 rebotes).

Los Pacers solo metieron 1 de 8 en triples en el primer cuarto pero en los tres siguientes lo corrigieron con un 14 de 27 (15 de 35 en total). Por el contrario, los Cavaliers sufrieron con un 9 de 35 desde el perímetro.

En Cleveland, Mitchell era una incógnita para este partido por problemas en el tobillo y, con más orgullo que acierto, acabó con 35 puntos (8 de 25 en tiros de campo con 4 de 13 en triples además de 15 de 21 desde la línea de personal) y 9 rebotes.

Más mermado físicamente estaba un Garland con solo 11 puntos (4 de 16 con 0 de 6 en triples) mientras que Mobley aportó 24 puntos y 11 rebotes.

Quitando algunos nervios y despistes del arranque, el primer cuarto fue prometedor para los Cavaliers con 13 puntos de Mitchell y 10 de Mobley.

En cambio, los Pacers se mostraron torpes y sin chispa en ataque, se atascaron con un 31,8% en tiros de campo y cerraron el primer periodo con malas sensaciones (31-19).

La ventaja local llegó hasta el +19 (44-25 con 8.10 para el descanso) pero la reacción de los Pacers fue impresionante.

Con un 12-28 de ahí al intermedio, Indiana castigó una y otra vez a Cleveland gracias principalmente a un Haliburton que solo había metido 2 puntos en el primer cuarto pero que en el segundo voló con una serie fantástica de 5 de 5 en triples.

El 56-52 al descanso dejó todo abierto. Haliburton fue el mejor de Indiana con 17 puntos (5 de 6 en triples) mientras que Mitchell encabezó a Cleveland con 16 puntos pero con el punto de mira desviado (3 de 11 en tiros de campo disimulado con un 10 de 12 en tiros libres).

Garland estaba aún peor (4 puntos con 2 de 9), pero el desacierto de los exteriores contrastaba con la inspiración de los interiores de Cleveland con Mobley (14 puntos con 4 de 6) y Jarrett Allen (9 puntos con 4 de 5).

Siakam también había sido una pieza importante del despertar de los Pacers en el segundo cuarto y el alero fue el encargado de firmar el triple con el que los Pacers completaron la remontada (64-65 con 7.04 en el tercer periodo).

Los de Rick Carlisle apabullaron a unos Cavaliers desnortados sobre la pista, con la grada entre murmullos y que se pasaron más de siete minutos sin anotar ni un solo tiro de campo.

La diferencia de energía entre los dos equipos era abismal y el parcial fue un gigantesco 5-21. Siakam (8 puntos) y Haliburton (7) seguían marcando el ritmo, pero Indiana presumió de profundidad de plantilla por ejemplo con los 9 puntos de un sorprendente Thomas Bryant.

Con 76-85 para empezar el último cuarto, los Cavaliers hicieron un último intento a la desesperada pese a que tenían las fuerzas justísimas. No se quedaron lejos de la remontada y llegaron a estar a un solo punto con Ty Jerome y De'Andre Hunter apuntalando a un Mitchell entre lo heroico y lo suicida.

Pero los Pacers tenían respuestas para todo y en esta ocasión fue Nembhard, crucial con 9 puntos en el cuarto periodo y con un dos más uno en los últimos compases para enterrar a Cleveland y hacer soñar a Indiana.

Oklahoma sufre a un Jokic magistral pero deja a Denver sin margen de error

En el otro choque de la noche, Nikola Jokic regaló su enésima obra maestra pero los Oklahoma City Thunder sobrevivieron al genio serbio, remontaron por 112-105 a los Denver Nuggets y se sitúan a un solo triunfo de la final del Oeste (3-2).

Tras este fabuloso y apasionante partido en Oklahoma con dos equipos dándolo todo de principio a fin, la serie regresa ahora a Denver para el sexto encuentro, que se jugará este jueves.

Para los estándares de alguien que ya se codea con los mejores jugadores de la historia de la NBA, Jokic no estuvo especialmente efectivo en los últimos tres partidos. Pero esta noche fue muy diferente.

El tres veces ganador del MVP dio un recital con 44 puntos luciendo un impresionante acierto: 17 de 25 en tiros con 5 de 7 en triples además de 5 de 5 desde la línea de personal. Aportó asimismo 15 rebotes y 5 asistencias y jugó 44 minutos incluyendo la segunda parte al completo.

Jamal Murray también destacó con 28 puntos (10 de 27) pero los Nuggets desperdiciaron un +9 a falta de 10 minutos en un terrible último cuarto en el que se les acabó la gasolina con un inapelable 34-19 en contra.

Los de David Adelman firmaron un espantoso 5 de 21 en tiros (1 de 12 en triples) en los últimos doce minutos.

Por su parte, Shai-Gilgeous Alexander, el favorito para ser el heredero de Jokic como MVP, encabezó a los Thunder con 31 puntos (12 de 23), 6 rebotes y 7 asistencias. El base metió 10 puntos fundamentales en el último cuarto.

Otros cinco jugadores locales sumaron 10 o más puntos: Jalen Williams (18 puntos y 9 rebotes), Isaiah Hartenstein (15 puntos y 7 rebotes), Chet Holmgren (14 puntos y 8 rebotes), Lu Dort (12 puntos con 4 triples, 3 de ellos imprescindibles en el cuarto periodo) y Alex Caruso (13 puntos).

Los Thunder perdieron la batalla por el rebote (49 para los Nuggets con 16 ofensivos frente a 43) pero marcaron diferencias desde el triple (12 de 29 frente al 13 de 46 de Denver).

El primer cuarto fue el ejemplo perfecto de lo imprevisible que está siendo esta eliminatoria: los Thunder empezaron pisando fuerte con un 12-2 en los cuatro primeros minutos pero los Nuggets respondieron con un parcial de 2-16 hasta cerrar el periodo por delante por 27-28.

A Shai le costó mucho entrar en calor con solo 11 puntos (4 de 11 en tiros) en una primera mitad en la que Oklahoma no lo pasó nada bien ante la defensa en zona de Denver.

En cambio, Jokic selló una de esas partes fantásticas para muchos pero 'normales' para él y pocos más con 19 puntos (8 de 13 en tiros con 2 de 3 en triples) y 9 rebotes.

Los visitantes llegaron a tener un +11 en el segundo cuarto y parecían controlar el ritmo del encuentro, pero un parcial de 9-0 de los Thunder dejó el duelo prácticamente en tablas al descanso (54-56). Denver dominó el rebote (27 por 17) pero perdió 10 balones en la primera mitad.

Ya habían tenido que lidiar con un Jokic que amenazaba con adueñarse del partido, pero en la reanudación los Thunder se toparon además con un Murray espectacular. 13 puntos en cuatro minutos consiguió el canadiense, bailando una y otra vez a un Dort sobrepasado, para impulsar a los visitantes (68-80 con 5.07 en el reloj).

Otra vez con muchos problemas ante la defensa en zona, los Thunder tampoco pudieron frenar a Jokic (12 puntos) y con esa pareja que conquistó el título hace dos años los Nuggets encararon el último periodo por delante (78-86).

Dort había protagonizado una actuación muy pobre en defensa, pero en el momento clave encendió la mecha de la remontada con tres triples que le dieron la vida a Oklahoma (90-92 con 6.19 para el final).

Shai tomó entonces las riendas por completo. Una canasta suya le dio la primera ventaja a Oklahoma desde el primer cuarto, luego ideó un 'alley-oop' para Hartenstein y después logró un dos más uno.

Los Nuggets, totalmente negados, estuvieron siete minutos sin conseguir un tiro de campo, pero Jokic aún les regaló una bala extra con un triplazo absolutamente circense y alucinante cuando se quedaba sin tiempo (103-103 con 1.40 para el final).

Hasta ahí llegó la odisea del balcánico, que vio a Williams y Shai sumar dos triples seguidos para certificar el triunfo de los Thunder. EFE

Los Nuggets sobreviven al 0/10 en triples de Jokic y tumban a Oklahoma en la prórroga

Los Nuggets sobreviven al 0/10 en triples de Jokic y tumban a Oklahoma en la prórroga

Actualizado Sábado, 10 mayo 2025 - 09:16

Los Nuggets sabían que recuperarse de su derrota por 43 puntos significaría mantenerse al nivel de Oklahoma City, el equipo con mejor registro en la liga regular, para aprovechar su experiencia, el ambiente del Ball Arena y su habilidad para definir a la hora de la verdad. Y eso es exactamente lo que hicieron para sumar una crucial victoria en la prórroga del tercer partido (113-104), que les permite retomar la iniciativa en la semifinal de la Conferencia Oeste (2-1).

El equipo dirigido por David Adelson se llevó el triunfo gracias a Jamal Murray (27 puntos), Aaron Gordon (22) y Michael Porter Jr (21)., quien jugó prácticamente con un solo brazo y brindó su mejor partido desde que se torció el hombro izquierdo en el primer encuentro de los playoffs. Al igual que en el segundo capítulo de la serie, decidido por un triple de Gordon, los Nuggets estuvieron en desventaja la mayor parte del partido antes de cerrar un parcial de 11-2 en la prórroga.

Los Thunder, un equipo de alto vuelo, solo anotó en una de sus nueve posesiones durante esos cinco minutos extras. "Creo que al final de los partidos puedes confiar en lo que has visto, sentido y hecho", admitió Adelson sobre sus hombres, que alzaron el título hace dos temporadas.

"Estoy seguro de que está frustrado"

Quien no tuvo su noche fue Nikola Jokic, quien incurrió en ocho pérdidas y falló 17 de 25 tiros, incluidos sus 10 intentos de triples. Terminó con 20 puntos, 16 rebotes y seis asistencias. "20, 16 y seis, qué noche tan terrible en la NBA", ironizó su entrenador. "Estoy seguro de que está frustrado", agregó Adelson. "Cuando tal vez eres uno de los jugadores más eficientes que jamás haya habido en cualquier deporte, lo entiendo. Pero va a tocar el balón un millón de veces en el cuarto partido y espero que lance todo el tiempo", presagió sobre el duelo del domingo en el Ball Arena.

Jokic puso en marcha el ataque decisivo en el tiempo extra con una bandeja y los Nuggets no volvieron a estar en desventaja. "Obviamente es malo perder" , admitió Mark Daigneault, entrenador de los Thunder. "Pienso que hicimos muchas cosas buenas sobre Jokic".

El otro favorito a MVP de la temporada, Shai Gilgeous-Alexander, también tuvo una noche difícil, al fallar 15 de 22 tiros, acertando uno de seis desde lejos y terminando con 18 tantos. Jalen Williams lideró a Oklahoma City con 32 puntos y Chet Holmgren aportó 18.

Gilgeous-Alexander, con el balón, durante el tercer partido en Denver.

Gilgeous-Alexander, con el balón, durante el tercer partido en Denver.AP

Tanto Gilgeous-Alexander como Jokic fallaron sendos tiros que podían haber decantado al ganador al término de los 48 minutos. La estrella de Oklahoma erró un lanzamiento a falta de tres segundos, mientras el serbio tampoco acertó desde la larga distancia mientras sonaba la bocina.

"Las derrotas siempre duelen, especialmente en los playoffs", concedió Daigneault. "Pero estamos en el proceso de convertirnos en un gran equipo, y hemos marcado muchas casillas en ese proceso . En los playoffs te llevan al límite, así que tienes que hacer frente a los desafíos que te presentan".

Vendaval anotador en la NBA: Jokic firma el tercer triple doble de 60 puntos de la historia y Curry masacra a los Grizzlies con 12 triples y 52 puntos

Vendaval anotador en la NBA: Jokic firma el tercer triple doble de 60 puntos de la historia y Curry masacra a los Grizzlies con 12 triples y 52 puntos

Actualizado Miércoles, 2 abril 2025 - 08:48

Espectacular jornada la de este miércoles en la NBA. Dos viejos rockeros, Nikola Jokic y Stephen Curry, siguen dejando actuaciones memorables. El serbio, en uno de los mejores partidos de la temporada, ha firmado un monumental triple doble de 61 puntos, 11 rebotes y diez asistencias. Sin palabras. Mientras tanto el base, como si fuera un día más en la oficina, ha acribillado a Memphis con 12 triples para firmar 52 puntos.

Jokic disputó 52.38 minutos contra los Wolves, sin descansar tras la primera mitad, y firmó 61 puntos (su récord personal), once rebotes y diez asistencias. La anterior mejor marca de Jokic era de 56 puntos, endosados el pasado diciembre a los Washington Wizards.

Jokic se convirtió en el tercer jugador en la historia de la NBA capaz de sellar un triple doble de 60 puntos, tras Luka Doncic (60 puntos, 21 rebote y 10 asistencias) y James Harden (60, 10 y 11).

Lleva 31 triples dobles en esta campaña, pero sus Nuggets, sin Jamal Murray, cayeron tras dos prórrogas contra los Wolves tras una ingenuidad de Russell Westbrook.

Pudo sentenciar el partido con una cómoda bandeja con nueve segundos por jugar, pero la perdonó y, en el otro lado de la pista, cometió la falta con 0.1 segundos en el cronómetro que envió a Nickeil Alexander-Walker a la línea de libres para que este ganara el partido.

Alexander-Walker acabó con 26 puntos, en una noche en la que Anthony Edwards selló 34 puntos, diez rebotes y ocho asistencias. El francés Rudy Gobert aportó un doble doble de 19 puntos y doce rebotes (6 ofensivos).

En el otro partidazo de la noche, Curry superó los 50 puntos por decimoquinta vez en su carrera y se quedó a diez de su récord anotador, 62, conseguido en un partido contra los Portland Trail Blazers de 2021. El cuádruple campeón NBA, de 37 años, firmó 52 puntos, diez rebotes, ocho asistencias y cinco robos en 36 minutos en pista en el campo de los Grizzlies.

Conectó 16 de sus 31 tiros de campo, con doce de veinte desde el arco y un perfecto ocho de ocho desde la línea de libres.

Con estos 52 puntos, Curry superó a Jerry West y ya es el vigésimo quinto máximo anotador en la historia de la NBA.

En los Grizzlies, el español Santi Aldama firmó 18 puntos y seis rebotes saliendo del banquillo, mientras que Ja Morant consiguió 36 puntos sin premio.

Jokic, el antisistema rechoncho

Jokic, el antisistema rechoncho

Actualizado Domingo, 16 marzo 2025 - 18:15

Tu algoritmo decide tu tiempo. Estás recocido leyendo la enésima reacción intrascendente del penalti de los dos toques. Mientras, un jugador serbio, que no parece estar en forma física, domina el baloncesto mundial. Ya son cinco años de lo mismo. Nikola Jokic destroza el algoritmo con unos hombros imponentes e inteligentes. Asistencias maravillosas de un solo toque de dedos.

Lleva una vida modesta de cara al escenario público. Sólo quiere ser el mejor jugador posible. Lo es. No se habla mucho de él. Pero factos son factos. Jokic, en cuanto a su rendimiento individual, ya está al nivel de Wilt Chamberlain y nada lejos de Kareem o Bill Russell. De hecho, si esta temporada gana el MVP de nuevo (sería el cuarto en cinco años) se sentaría en la mesa con estos tres y con Michael Jordan y LeBron James. Palabras mayores. Tiene 30 años, entre tres y cinco temporadas más a plena capacidad.

Colectivamente juega en unos pequeños Nuggets que ganaron hace dos temporadas el anillo. Teniendo al mejor, deberían llegar más lejos en playoffs, pero nunca han contado con una gran plantilla. El convenio actual concede que los mejores ganen unos salarios súpermáximos. Jokic, tras conseguir el título, firmó el mejor contrato de la historia. Pero eso obliga a los ejecutivos a acertar mucho con poco dinero para rodear bien a la gran estrella. No es el caso. No son favoritos. En la tierra de súpercompetitividad económica, la NBA tiene reglas extremadamente igualadoras de la competición. Igual con Serbia. Con un poquito de mejor equipo, se hubiera cargado a Curry, Durant y compañía en los Juegos de París.

Hablando de General Managers, si a Vlado Divac, de Sacramento, le despidieron por dejar pasar la elección de Doncic, con Jokic deberían haber despedido a más de la mitad de los fichadores de USA: no fue seleccionado hasta el puesto 41 en 2014. Nunca una posición tan baja del draft fue MVP. Ojos clínicos.

Jokic domina el arte de la asistencia, es el mejor pívot pasador de toda la historia del baloncesto. Claro que Sabonis padre fue una maravilla, pero además de la simpatía de los héroes de nuestros años mozos, cuenta más la perseverancia y control absoluto del sistema. A Sabonis había que hacerle llegar la bola para que creara, Jokic es un sistema en sí mismo. Hasta hace 10 años, los bases y escoltas alimentaban a los grandes. Ahora no hay ese espacio, los grandes inteligentes encuentran a los demás en habilitadas posiciones.

Este aficionado a las carreras de caballos está promediando casi 30 puntos por partido, domina la cancha con un trote pesado, absorbe mucha bola pero también sabe jugar sin ella. Tiene buenos números en robos, no es fácil sobrepasarle. Hace unos días se convirtió en el primer jugador en alcanzar un 30-20-20, un triple doble atómico. Jokic vende poco, no pierde el tiempo fuera de la cancha con redes sociales, zapatillas o publicidades. Jokic domina todo menos el algoritmo. Por eso no aparece en tu lupa. Ídolo.

Un Jokic colosal hace historia en la NBA con 31 puntos, 21 rebotes y 22 asistencias ante los Suns

Un Jokic colosal hace historia en la NBA con 31 puntos, 21 rebotes y 22 asistencias ante los Suns

Actualizado Sábado, 8 marzo 2025 - 07:39

Nikola Jokic no tiene techo. Cuando parece que el serbio no puede hacerlo mejor, el jugador de los Nuggets sube el nivel y desafía a la historia. Este viernes, Denver ha sometido en la prórroga a los Phoenix Suns gracias a una barbaridad del 'Joker', que ha logrado un triple-doble histórico e inédito en la NBA de 31 puntos, 21 rebotes y 22 asistencias, informa Efe.

Los Suns (29-34) venían de remontar 23 puntos a los Clippers y este viernes por la noche acariciaron otra hazaña similar al ponerse por delante en el marcador a falta de 1.35 después de haber ido perdiendo de 21 ante los Nuggets (41-22).

Cristian Braun clavó un triplazo a falta de 1.4 segundos que dejaba a Denver con +3, pero una perfecta jugada de pizarra de Phoenix acabó en un triple magnífico desde la esquina de Kevin Durant para llevar el encuentro hasta el tiempo extra.

En la prórroga se acabó la gasolina de unos Suns que bajaron la cabeza ante el monumental triple-doble de Jokic, el primero en la historia de la NBA con 30 puntos o más, 20 rebotes o más y 20 asistencias o más. El tres veces ganador del MVP acabó con un 13 de 22 en tiros de campo (3 de 7 en triples) y consiguió además 3 robos.

También resultó fundamental Aaron Gordon con 27 puntos y un brillante 7 de 10 en triples. Denver, con siete de sus ocho jugadores en dobles dígitos de anotación, afronta ahora un reto formidable: dos duelos consecutivos ante los Thunder y en Oklahoma.

Por los meritorios y peleones Suns, los mejores fueron Devin Booker (34 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias) y Durant (29 puntos y 9 rebotes).

HORNETS 117 - CAVALIERS 118

El equipo con el mejor balance de la NBA (53-10) estuvo a punto de darse un batacazo ante el penúltimo del Este (14-48), pero Cleveland ya sabe ganar jugando bien o jugando mal y su decimotercera victoria consecutiva llegó con 24 puntos de Donovan Mitchell, 20 puntos de Darius Garland y 19 puntos y 10 rebotes de Evan Mobley. Los Cavaliers consiguieron 43 de sus puntos en 51 tiros libres.

De muy poco sirvió el recital de Miles Bridges con 46 puntos y 8 rebotes. Él fue quien tuvo pero no pudo meter un triple sobre la bocina y desde el centro de la pista para que los Hornets dieran la campanada.

MAVERICKS 111 - GRIZZLIES 122

Ja Morant logró 31 puntos, 24 de los cuales llegaron en una gran segunda mitad del base que además repartió 8 asistencias. Desmond Bane fue el otro puntal de los Grizzlies con 27 puntos, 16 rebotes y 6 asistencias.

El español Santi Aldama consiguió en su regreso 6 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias en 21 minutos como titular para unos Grizzlies sin Jaren Jackson Jr. y que habían cuatro partidos seguidos y siete de sus últimos nueve. Ahora son cuartos del Oeste con un balance de 39-24.

En cambio, esta fue la cuarta derrota consecutiva y la sexta en sus últimos siete encuentros de unos Mavericks que son décimos del Oeste (32-32) pero que están heridos de muerte por su interminable parte de lesiones (Kyrie Irving, Anthony Davis, Daniel Gafford, Dereck Lively, P.J. Washington, Olivier-Maxence Prosper, Jaden Hardy...).

Naji Marshall (26 puntos y 13 rebotes) y Brandon Williams (26 puntos y 6 asistencias) fueron los mejores de unos Mavericks que se vinieron abajo en los últimos minutos.

THUNDER 107 - BLAZERS 89

Sin sus principales estrellas (Shai Gilgeous-Alexander, Chet Holmgren, Jalen Williams, Isaiah Hartenstein...), los Thunder (52-11) firmaron su sexto triunfo seguido gracias a 30 puntos de Aaron Wiggins y un triple-doble de Jaylin Williams (10 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias).

Scoot Henderson (22 puntos) fue el máximo anotador de unos Blazers (28-36) con un ridículo 8 de 43 en triples (18,6 %).

KINGS 127 - SPURS 109

De'Aaron Fox regresó por primera vez a Sacramento tras irse a San Antonio pero no lo pudo celebrar ya que los Kings (33-29) se quedaron con la victoria con 36 puntos y 7 de 11 en triples de Zach LaVine. Stephon Castle (25 puntos) fue el más productivo de los Spurs (26-35).

En el resto de encuentros de la jornada, los New York Knicks echaron de menos al lesionado Jalen Brunson ante Los Angeles Clippers (105-95), los Toronto Raptors derrotaron a los Utah Jazz (118-109) pese a una imponente estadística en la zona de Walker Kessler (18 puntos, 25 rebotes y 8 tapones) y los Minnesota Timberwolves superaron a los Miami Heat (104-106).

El fenómeno Doncic: así se ha disparado la audiencia en España de la NBA

El fenómeno Doncic: así se ha disparado la audiencia en España de la NBA

Tras un verano de no demasiados vuelcos en el mercado y con uno de los drafts menos entusiastas de los últimos tiempos, la temporada NBA pone sus focos y sus incógnitas en los rescoldos del curso anterior, en si lo de los Celtics campeones es una era que arranca, en si los Nuggets de Jokic serán capaces de resurgir, si Wembanyama está ya listo para llevar a un nivel superior a los Spurs o, evidentemente, si será la última temporada de LeBron James y en qué dará de sí el experimento de jugar junto a su hijo Bronny (y con su colega JJ Redick en el banquillo de los Lakers).

Para saber más

Aunque el más poderoso de los desafíos sin duda es el que atañe a Luka Doncic y no sólo por su inaplazable candidatura al anillo tras el fogonazo de los Mavericks en el tramo final del pasado curso que les llevó hasta las mismísimas Finales. La continuación de aquella química y la ilusionante adquisición de Klay Thompson, el inseparable compinche de Steph Curry en los históricos Warriors, elevan la presión y las expectativas en el colectivo de Jason Kidd a una NBA que ha visto cómo se disparaba su interés global gracias a su estrella.

Ayer mismo se hicieron públicos unos datos demoledores. Impulsada por los partidos de Dallas, la audiencia promedio de televisión de los partidos de los Playoffs 2024 emitidos en horario estelar en España aumentó un 44% el año pasado. El debut de Luka en las Finales tuvo un aumento del 61% en comparación con el año anterior. Y el ex del Real Madrid fue el cuarto jugador de la NBA más visto globalmente en redes sociales durante la temporada regular, con más de 1.200 millones de visualizaciones (solo por detrás de LeBron, Curry y Wembanyama). Además, los Mavericks fueron el equipo más visto en las redes sociales de la NBA durante los Playoffs y el segundo equipo en la plataforma League Pass la temporada pasada, con un aumento del 22% en su audiencia.

A Doncic, camino de los 26 años y en la que será su séptima temporada en la NBA, le persiguen las sospechas de su permanente enfrentamiento con los árbitros y de su aparente sobrepeso. De lo que no hay ninguna duda es en su rendimiento deportivo, hasta el punto de que ya a nadie le extrañaría que acabara el curso promediando un triple-doble (firmó 33,9 puntos, 9,8 asistencias y 9,2 rebotes), algo que sólo han conseguido Russell Westbrook y Oscar Robertson. Eso, sin duda, elevaría su candidatura al MVP, otro reto pendiente. Tampoco nadie recela ya de su capacidad de liderazgo, de involucrar a sus compañeros.

Doncic, durante las pasadas Finales de la NBA contra los Celtics.

Doncic, durante las pasadas Finales de la NBA contra los Celtics.Julio Cortez

Lo logró con Kyrie Irving y parece que no le va a ser difícil conseguirlo con Klay, el cuarto jugador que más triples ha encestado en la historia de la NBA (2.982). Con esos dos veteranos talentos a su vera, se amplían las amenazas ofensivas de los Mavericks. Un equipo que ya demostró su salto defensivo tras los traspasos de mitad de temporada. Con la llegada de Daniel Gafford y PJ Washington, no sólo ganó 16 de los últimos 20 partidos de la temporada regular (además de las tres primeras eliminatorias de playoffs, pasando por encima de Clippers, Thunder y Wolves), también pasó a ser una de las mejores zagas de la competición.

"Una de las principales razones por las que vine aquí es la oportunidad de jugar junto a Doncic. Hay 82 partidos de temporada regular para que desarrollemos química. Pero para ser honesto, creo que es un jugador tan bueno que no necesitará mucho tiempo para eso", admite Klay, en busca de nuevos desafíos y de una versión similar a la anterior a sus graves lesiones: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y del tendón de Aquiles de la pierna derecha de forma consecutiva.

Doncic, que es duda para el inicio del curso por una contusión en el muslo izquierdo, ha tenido un verano como casi siempre movido. Pero tras no lograr el billete para París en el Preolímpico disputado en Atenas, ha podido descansar casi tres meses. "Todos hablarán de lo que hicimos el año pasado, pero esa temporada ya terminó. Este es un nuevo capítulo en el viaje de este grupo y tenemos que generar química. Internamente, la paciencia siempre ha estado ahí. Eso es lo único en lo que podemos apoyarnos. No tenemos prisa. Entendemos que va a llevar tiempo. Llegará un momento en que, si perdemos un partido, seguiremos trabajando por nuestro objetivo, que es ganar un campeonato", ha admitido un Kidd que aún no ha podido probar a su Big Three en pretemporada.

Serbia obliga a trabajar a Estados Unidos, que gana tras remontar una desventaja de 17 puntos

Actualizado Jueves, 8 agosto 2024 - 23:16

Al acabar, JoelEmbiid bailaba solo en mitad de la pista el Freed from Desire para provocar el abucheo del público de la Arena de Bercy, miles de aficionados franceses que le detestan porque abandonó a su selección para irse a jugar con Estados Unidos. El Dream Team hacía como si no hubiera pasado nada, gestos triunfantes, golpes en el pecho, gritos, muchos gritos, pero en realidad había vivido su peor trance en unos Juegos Olímpicos desde las finales que le enfrentaron a España. En las semifinales de París 2024, Serbia empujó al conjunto yankee ante el precipicio a base de triples y para salir de allí éste tuvo que trabajar, que sudar, que ponerse a currar (95-91).

LeBron James, que vivió el gran desastre en aquellas semifinales de Atenas 2004 ante Argentina, estuvo cerca de pasar por lo mismo: un fracaso en su debut y otro en su despedida. Pero esta vez está mucho mejor acompañado. Pese a que su desventaja llegó a ser de 17 puntos, pese a que entró en el último cuarto 13 puntos por debajo, Estados Unidos defendió con uñas y dientes en el tramo final y sacó adelante la situación. Quedarán en el recuerdo los 35 puntos de Stephen Curry, tirador superlativo -nueve de 14 en triples-, pero fue incluso más importante como leyendas como él mismo, James o Kevin Durant encogieron a un rival crecidísimo.

Los triples de Serbia

No era el plan porque nunca es el plan. Las estrellas yankees no vienen a los Juegos Olímpicos a esforzarse como si estuvieran disputando unas finales de la NBA y sólo lo hacen si están obligados. Como siempre, Estados Unidos salió a jugar un All-Star: sin defensa, sin una idea de juego, espectáculo, puro espectáculo. Lo ofreció Curry, con 17 puntos en los primeros ocho minutos y algún baile de los suyos. Al quinto triple, de hecho, se giró antes que entrara para chocar la mano a sus compañeros del banquillo. "¡Oooooooh!", se asombraba la afición parisina, que iba contra el USA Team, pero que no podía dejar de maravillarse con alguno de sus movimientos. El problema para el firmamento NBA era que delante tenía un equipo de verdad.

PAUL ELLISAFP

Desde la seriedad atrás, Serbia fue construyendo una ventaja que llegó a los 17 puntos (25-42, min.14) a base de mucho acierto exterior. Era una idea brillante, otra más de su entrenador Svetislav Pesic: sólo Nikola Jokic podía chocar por dentro que Embiid o Anthony Davis así que todo iba por fuera. Triples, triples y más triples, de Bogdan Bogdanovic, Aleksa Avramovic, de cualquiera. Al descanso, Serbia se fue con un 10 de 19 desde la línea de 6,75 metros y en consecuencia con una ventaja considerable (43-54). Desde la primera línea de sillas, Pau Gasol miraba el partido con su mujer, Catherine McDonnell, y su hija, Elisabet Gianna, y posiblemente pensaba: "Esto ya lo he vivido yo".

El despertar yankee

Estar por delante de Estados Unidos en cualquier momento no garantiza el éxito, pero el conjunto balcánico sostenía y sostenía la distancia (63-76 al final del tercer cuarto). Con su carácter, tan propio -Bogdanovic pasó todo el partido encarándose con LeBron James-, mantenía su plan hasta el final. Si Curry volvía a entrar en trance, ningún problema. Si Embiid empezaba a hacerse fuerte en la zona, ningún problema. Serbia incluso resistía al mareo de su líder, Jokic, que apenas encontraba el camino al aro. Para seguir con la racha en los triples, siempre alrededor del 50% de acierto, aparecían Vasilije Micic, Marko Guduric o Ognjen Dobric y así se llegaba al último cuarto.

Después todo cambió. En los últimos 10 minutos, los mitos se hicieron terrenales y empezaron a aislar, a empujar, a frenar a los tiradores balcánicos. Con los veteranos en la cancha, James, Durant y Curry, Estados Unidos, ¡Qué defensa! Serbia, que hasta el momento había sido letal, dejó de meter los triples y estuvo tres minutos sin anotar (del 77-84 al 84-84). Ahí ya lo tenía muy difícil. Ahí ya lo tenía imposible. Sus dos referentes, Jokic y Bogdanovic, lo intentaron, pero con 93-91, Curry sentenció con dos tiros libres. Después todos los jugadores estadounidenses vacilaban y Embiid lo llevaba más allá, bailando en mitad de la pista, pero el susto había sido serio.

Los Wolves dejan a Jokic sin la opción de repetir anillo y retan a los Mavericks de Doncic en la final del Oeste

Los Wolves dejan a Jokic sin la opción de repetir anillo y retan a los Mavericks de Doncic en la final del Oeste

Los Minnesota Timberwolves remontaron una desventaja de 20 puntos este domingo, ganaron en Denver por 98-90 a los Nuggets, campeones de la NBA, y avanzaron a las finales de la Conferencia Oeste. Los Wolves alcanzaron sus primeras finales de conferencia en 20 años y las segundas en su historia.

En 2004 era el equipo de Kevin Garnett. Ahora es el de Anthony Edwards y del dominicano Karl Anthony Towns, que se enfrentará a partir de este miércoles a los Dallas Mavericks del esloveno Luka Doncic, que eliminaron a los Oklahoma City Thunder, primeros cabezas de serie.

Los Nuggets, que el año pasado conquistaron el primer anillo de su historia, se despiden de los 'playoffs' tras desperdiciar una ventaja de 58-38 al comienzo del tercer cuarto, pese a 34 puntos, 19 rebotes y siete asistencias del serbio Nikola Jokic.

Abajo 15 puntos al descanso, los Wolves obraron la mejor remontada de siempre en un séptimo partido de una serie de 'playoffs'. Mejoraron la marca lograda por última vez por los Golden State Warriors, cuando se repusieron tras un -11 al descanso.

El dominicano Karl Anthony Towns marcó la diferencia en Denver con un doble doble de veintitrés puntos y doce rebotes, a los que añadió dos asistencias, dos robos y un tapón.

Le apoyaron Jaden McDaniels con veintitrés puntos en una noche en la que Anthony Edwards sufrió para encontrar ritmo, pero acabó al alza con 16 puntos, ocho rebotes y siete asistencias.

"No encontraba mi ritmo, tuve que confiar en mis compañeros y ellos convirtieron. Hay que felicitarlos", dijo Edwards al acabar el partido de Denver.

El francés Rudy Gobert aportó tres puntos y nueve rebotes con siete de nueve desde la línea de libre. Su efectividad fue importante para los Wolves para frenar el intento de reacciónn de los Nuggets.

Demostraron carácter los Wolves, que sufrieron mucho ante un Jokic que ya lucía un doble doble al descanso con los Nuggets arriba quince puntos. Jamal Murray metió 24 en dos cuartos y parecía dejar encarrilado el triunfo de los campeones.

La ventaja alcanzó el 58-38 al principio del tercer período, pero los Wolves reaccionaron con una demoledora segunda mitad de 60-37 que les entregó el billete para las finales del Oeste.

Los Wolves sellaron un parcial de 19-3 ante unos Nuggets que metieron un solo tiro de campo en trece intentos. Ese parcial se incrementó a un 28-9 con un triple de Edwards que redujo el margen a un punto en el 76-66 para entrar en el último cuarto.

No dejaron de acelerar los Wolves ante unos Nuggets en los que Jokic jugó todos los minutos de la segunda mitad. El serbio, muy cansado, conectó su primer triple tras siete intentos fallidos.

Y los Wolves, con un Towns decisivo en los dos lados de la pista, con una gran defensa ante Jokic, pudieron blindar su pase a las segundas finales de conferencia de su historia.

Los Pacers acaban con el sueño de los Knicks

Con una incuestionable prueba de fuerza en el Madison Square Garden, los Indiana Pacers fundieron este domingo el motor de unos New York Knicks, lastrados por los problemas físicos, y los arrollaron 109-130 en el séptimo partido de las semifinales de conferencia para citarse con los Boston Celtics en las finales del Este de la NBA.

Se repitió la historia en Nueva York. Veintinueve años después, Knicks y Pacers volvieron a jugarse la vida en el cara o cruz de un séptimo partido de 'playoffs' en el Madison Square Garden y de nuevo Indiana avanzó.

El equipo local siempre había defendido su campo en esta serie. Hasta este domingo, cuando Tyrese Haliburton dirigió con 26 puntos y seis triples la gran actuación grupal de los Pacers.

Todo el quinteto titular de Rick Carlisle acabó con dobles dígitos. Pascal Siakam y Andrew Nembhard metieron 20 puntos cada uno, Aaron Nesmith firmó 19 y el pívot Myles Turner, 17. TJ McConnell aportó doce y siete asistencias saliendo del banquillo para unos Pacers que tuvieron un brillante 67% de acierto en tiros de campo y un 54% en triples.

Los Knicks acabaron fundidos tras una temporada de enorme intensidad física y mental, en la que saborearon la idea de regresar a las finales del Este por primera vez desde 2000. Su líder, Jalen Brunson, el hombre que los llevó de la mano hasta este domingo, terminó retirándose por una fractura en una mano en el tercer cuarto.

Acabó su encuentro con 17 puntos y nueve asistencias, números por debajo del nivel estelar exhibido esta temporada. Josh Hart, recuperado a última hora tras un problema abdominal, lo dejó todo en el campo con diez puntos, ocho rebotes y cinco asistencias. OG Anunoby, que también jugó este partido arrastrando problemas físicos, solo pudo estar cuatro minutos en pista y metió cinco puntos.

En el banquillo, viendo a sus compañeros, estuvo Julius Randle, otro líder de los Knicks que acabó su temporada por un problema de hombro, al igual que Mitchell Robinson.

El líder anotador de los Knicks fue Donte DiVincenzo, con 39 puntos y nueve triples. Fue el último en rendirse y el Madison Square Garden le dedicó una sentida ovación. Alec Burks aportó 26 saliendo del banquillo.

Los Pacers sacudieron a los Knicks desde el primer momento con porcentajes estelares en tiros de campo que pusieron tierra de por medio de forma inmediata. Arrancaron con un 76.2% de acierto y siete triples de nueve intentos que les abrieron el camino hacia una ventaja de quince puntos en el primer período, luego recortada a doce por los neoyorquinos.

Tyrese Haliburton, protagonista de ese empuje con catorce puntos y cuatro triples, no dejó de pisar el acelerador y los de Indiana no solo mantuvieron ese ritmo anotador, sino lo incrementaron en el segundo cuarto. Alcanzaron un extraordinario 80% de acierto en tiros de campo y su margen alcanzó los 22 puntos en el 54-32.

Con Pascal Siakam inscrito en el festival, con quince puntos, los Pacers conectaron ocho de sus doce tiros de tres puntos. El Madison Square Garden buscaba razones de optimismo y Donte DiVincenzo llevó de la mano a unos Knicks aferrados al partido, que regresaron a los vestuarios reduciendo la desventaja a quince unidades.

El Madison Square Garden se reactivó en el tercer cuarto, cuando los Knicks sellaron un parcial de 12-0 que les permitió colocarse a tan solo siete puntos de los Pacers.

Los Knicks creyeron por momentos poder firmar una hazaña épica, pero tras un descomunal esfuerzo para remontar, llegó el cortocircuito.

Unos errores de concentración, como el saque de Hartenstein para Brunson que llevó al robo y al dos más uno de los Pacers, acabaron pasando factura a los Knicks.

Los Pacers sellaron un 8-0 que volvió a disparar su ventaja hasta los 18 puntos, un golpe del que los Knicks no pudieron levantarse.

Por si fuera poco, con 3.02 minutos por jugar en el tercer cuarto, Brunson se retiró con molestias en una mano y los exámenes a los que se sometió en los vestuarios detectaron una fractura.

Con el líder de su temporada KO, los Knicks vieron desvanecer el sueño de clasificarse a las finales del Este, que comenzarán este martes en el TD Garden de Boston entre Celtics y Pacers.

Los Timberwolves humillan a los Nuggets de Jokic y fuerzan el séptimo partido

Los Timberwolves humillan a los Nuggets de Jokic y fuerzan el séptimo partido

Actualizado Viernes, 17 mayo 2024 - 08:20

Los Minnesota Timberwolves infligieron este jueves una humillante derrota por 115-70 a los Denver Nuggets, vigentes campeones de la NBA, para igualar 3-3 las semifinales de la Conferencia Oeste y forzar el séptimo y decisivo partido, que se disputará este domingo en Denver.

Los Wolves llegaron a tener una ventaja de 50 puntos en un cuarto período en el que, con los titulares de ambos equipos ya en el banquillo, sellaron un contundente parcial de 24-0.

Liderados por 27 puntos de Anthony Edwards, los Wolves volvieron a ganar en esta serie tras las dos victorias iniciales cosechadas en Denver. Desde entonces, habían perdido dos veces en casa y fueron arrollados por Jokic en el quinto partido. Este jueves en el Target Center, solo hubo sonrisas para unos Wolves que se jugarán la vida el domingo en Colorado.

Edwards acabó con 27 puntos, cuatro rebotes y cuatro asistencias; Jaden McDaniels metió 21 con ocho de diez en tiros de campo, el dominicano Karl Anthony Towns aportó un doble doble de diez puntos y trece rebotes y el francés Rudy Gobert contribuyó con ocho puntos y catorce rebotes.

Los Nuggets fueron superados por completo. La cara del serbio Nikola Jokic, sentado en el banquillo ya al principio del cuarto período, lo decía todo.

El triple MVP, que había firmado 40 puntos en el quinto partido, con cero pérdidas, este jueves no pasó de los 22 puntos y nueve rebotes, con tres balones perdidos.

Jamal Murray nunca entró en el partido y terminó con diez puntos y cinco asistencias, con cuatro de 18 en tiros de campo. El banquillo de los Nuggets tan solo aportó nueve puntos, y ninguno hasta el final del tercer período. El de los Wolves aportó 36.

Excepto por el 9-2 inicial de los Nuggets, el partido del Target Center de Minneápolis fue un monólogo de los Wolves, más agresivos, determinados y hambrientos de prolongar la serie tras llegar a esta cita con la espalda contra la pared.

Y el parcial de 27-2 con el que los Wolves respondieron a ese 9-2 inicial fue el mejor ejemplo. Anthony Edwards llevaba ya 19 puntos al descanso ante unos Nuggets en el que Jokic fue el único en tener ritmo anotador. El serbio anotó 16 puntos, pero su compañero Jamal Murray apenas metió dos, con un uno de diez en tiros de campo.

Edwards brilló también desde el arco y no dejó de animar a sus compañeros en todo momento, pidiéndoles no levantar el pie del acelerador en un tiempo muerto.

Y su equipo no lo hizo. Impidió todo tipo de reacción de los Nuggets, también gracias al buen trabajo de Karl Anthony Towns ante Jokic, un ajuste respecto a los anteriores partidos de la serie, en los que fue Gobert en intentar contener al triple MVP.

La victoria se convirtió en una auténtica humillación en el cuarto período, cuando los Wolves firmaron un parcial de 24-0 que disparó su ventaja hasta el 112-163.

El margen máximo llegó a 50 en el 114-64 y el Target Center lo celebró por todo lo alto con cánticos de 'Wolves in 7', hambrientos de victoria en el séptimo y decisivo partido de la serie.

Jokic gana su tercer MVP de la NBA tras imponerse a Doncic y Gilgeous Alexander

Jokic gana su tercer MVP de la NBA tras imponerse a Doncic y Gilgeous Alexander

Actualizado Jueves, 9 mayo 2024 - 08:05

El serbio Nikola Jokic, pívot de los Denver Nuggets, ganó este miércoles el tercer MVP (Jugador Más Valioso de la temporada regular) de la NBA, al preceder en las votaciones al canadiense Shai Gilgeous Alexander, de los Oklahoma City Thunder, y al esloveno Luka Doncic, de los Dallas Mavericks.

Jokic ya había ganado el MVP en la temporada 2020-2021 y 2021-2022 y remplazó este año a Joel Embiid, pívot de los Philadelphia 76ers, quien quedó fuera de la pugna por este premio al no haber cumplido con el mínimo de partidos necesarios (65) previstos por las reglas de la NBA.

El líder de los Nuggets recibió un total de 79 votos; Gilgeous Alexander fue segundo con 15, mientras que Doncic recibió 4. El griego Giannis Antetokounmpo, de los Milwaukee Bucks, recibió un voto.

Jokic promedió 26.4 puntos, 12.4 rebotes y 9 asistencias por partido en esta temporada con los Nuggets, que accedieron a los 'playoffs' como segundos clasificados en la Conferencia Oeste detrás de los Oklahoma City Thunder.

El pívot serbio logró 25 triples dobles en la temporada regular y lleva dos en la postemporada, en la que los Nuggets eliminaron a Los Ángeles Lakers en la primera ronda (4-1).

En la segunda, los campeones de la NBA están perdiendo 0-2 en la serie contra los Minnesota Timberwolves, terceros cabezas de serie.

Doncic promedió 33.9 puntos, 9.2 rebotes y 9.8 asistencias este curso con los Dallas Mavericks.

Gilgeous Alexander promedió 30.1 puntos, 5.5 rebotes y 6.2 asistencias por encuentro con los Thunder, rivales de los Mavericks en la segunda ronda de los 'playoffs' del Oeste.

Jokic luce ahora tres MVP en sus vitrinas y se sumó a un grupo de otros ocho jugadores: Kareem Abdul Jabbar (6), Michael Jordan (5), Bill Russell (5), Wilt Chamberlain (4), LeBron James (4), Magic Johnson (3), Moses Malone (3) y Larry Bird (3).