Alcaraz vence en menos de una hora y se cita con Khachanov en cuartos de Pekín

Alcaraz vence en menos de una hora y se cita con Khachanov en cuartos de Pekín

Actualizado Domingo, 29 septiembre 2024 - 14:42

El tenista español Carlos Alcaraz (n.3) superó este domingo al neerlandés Tallon Griekspoor (n.39) por 6-1 y 6-2 en 56 minutos para avanzar hasta los cuartos de final del Abierto de China disputado en la capital del gigante asiático.

El encuentro fue de los pocos que se salvó de cancelación en la lluviosa jornada pekinesa, al disputarse en la pista central Diamond, que cuenta con una cubierta retráctil que protegió a los protagonistas.

Ambos tenistas se habían enfrentado tres veces previamente, con un balance de victorias a favor de Alcaraz en cada choque.

En este partido, el murciano no dio opciones a Griekspoor, demostrando gran solidez en su servicio al no conceder ninguna bola de 'break' y consiguiendo la totalidad de puntos ganados con su primer saque en el set inicial.

Desde el inicio del partido, Alcaraz mostró un dominio total, buscando las líneas con golpes precisos y manteniendo la intensidad alcanzando todas las bolas, pasasen o no la red.

El primer parcial fue un monólogo del español, quien rompió en dos ocasiones el saque del neerlandés para llevarse el set por 6-1 en tan solo 24 minutos.

En el segundo set, Griekspoor intentó resistir, pero Alcaraz mantuvo su ritmo y precisión.

A pesar de que el neerlandés consiguió aumentar ligeramente su porcentaje de puntos ganados con el servicio, el español se mostró implacable al resto, logrando otras dos roturas para sellar el encuentro con un 6-2.

El tenista español se enfrentará en los cuartos de final al ruso Karen Khachanov (n.27), que se impuso este domingo al argentino Francisco Cerúndolo (n.31) en un igualado encuentro por 7-6(4) y 7-6(9).

Alcaraz se une así en la siguiente ronda al actual campeón y número uno del ranking ATP, el italiano Jannik Sinner, y al ruso Daniil Medvedev.

El compatriota de este último, Andrey Rublev, buscará alcanzar este lunes los cuartos de final frente al español Alejandro Davidovich Fokina (n.64), en un partido que se canceló por la lluvia con 2-1 a favor del moscovita en el primer set por la lluvia.

Nick Pachelli, el fotógrafo que viaja por el mundo en busca de pistas de tenis imposibles: "He hecho más de 5.000 llamadas para encontrar las más raras"

Nick Pachelli, el fotógrafo que viaja por el mundo en busca de pistas de tenis imposibles: “He hecho más de 5.000 llamadas para encontrar las más raras”

El invierno de 1974 fue un desastre para el hostelero italiano Carlo Cinque: el posible final de un sueño. Enamorado de la costa al sur de Nápoles, unos años atrás había comprado un terreno cerca de una acantilado y había abierto allí un hotel, Il San Pietro di Positano, pero aquel invierno un desprendimiento de piedras amenazó su suerte. ¿Y su establecimiento se iba directo al mar? Podía abandonar el proyecto ante la inseguridad, pero hizo lo contrario: lo amplió de 33 a 55 habitaciones, lo convirtió en un resort de cinco estrellas y en el espacio que había generado el desprendimiento construyó una de las pistas de tenis más bonitas del mundo.

«Hay que bajar unos 70 metros del hotel a la pista a través de unas escaleras, pero no hay duda que es una pista preciosa», asume el periodista y fotógrafo estadounidense Nick Pachelli, que acaba de publicar un libro, The Tennis Court, en el que narra más de 200 historias como esa de pistas de tenis por todo el mundo que él mismo visitó entre la verano de 2022 y la pasada primavera. Dos años de viajes en busca del lugar más recóndito, más bonito, más singular, donde jugar al tenis.

El Tennis Park Lommerrik de Rotterdam, en Países Bajos.

El Tennis Park Lommerrik de Rotterdam, en Países Bajos.NICK PACHELLI

Por ejemplo, en el libro -de momento sólo editado en inglés- aparece una pista construida por un matrimonio en Bunabhainneadar, un pueblo remoto en la remota isla escocesa de Harris. Por ejemplo, la sede abandonada de la Federación de Ucrania en Ispín, a las afueras de Kiev. Por ejemplo, una pista para refugiados entre un maizal en Kyegegwa, una zona rural de Uganda. Por ejemplo, las cuatro pistas del club de la isla Waiheke, en Nueva Zelanda, y sus muchos loros. O por ejemplo, la pista que cada julio se dibuja sobre la arena de la playa de la Ribera, en Luanco, en Asturias, cuando baja la marea.

«La de Luanco es una de mis pistas favoritas del libro, es muy original y es precioso ver la pasión con la que se vive el torneo que se juega allí cada verano», describe Pachelli en conversación telefónica con EL MUNDO después de muchas visitas a España. Como fotógrafo profesional siguiendo el circuito ATP, estuvo en el Mutua Madrid Open y el Trofeo Conde de Godó, pero en su obra también apareció otros lugares de España: el Club del Sol en Mijas, el Real Club de Tenis de San Sebastián, el Real Club de Tenis Betis de Sevilla y su amarillo, la Rafa Nadal Academy o el Mallorca Country Club de Mallorca, el Reial Societat de Tennis Pompeia de Barcelona o el Club de Tenis Puente Romano de Marbella.

Más de 5.000 llamadas

«Hace dos años un amigo mío me preguntó por qué no publicaba un libro exclusivamente de tenis y se me ocurrió la idea de las pistas. En el tenis es difícil ahora sacar un libro distinto y pensé que éste lo era. Cuando llegué a un acuerdo con una editorial [Hachette], contraté ayudantes para llamar a gente relacionada con el tenis por todo el mundo y encontrar las pistas más raras, las más importantes a nivel tenístico o las que tuvieran las mejores historias detrás. Hicimos más de 5.000 llamadas, investigamos, miramos mucho Google Maps y al final llegamos a la selección definitiva», recuerda Pachelli que confiesa un secreto: en la mitad de las más de 200 pistas fotografiadas se ha dado el gustazo de jugar. Junior brillante, con beca como tenista para una universidad estadounidense, una lesión le obligó a escoger un oficio y tiró por el fotoperiodismo. «Ahora sólo soy un amateur más, aunque me encanta participar en competiciones como los torneos de UTR [una app como Playtomic]», comenta y se atreve con su selección personal.

La pista del Sportchalet Murren, en Suiza.

La pista del Sportchalet Murren, en Suiza.NICK PACHELLI

Si tuviera que escoger pista, jugaría en Luanco, en el Club de Tennis Dansk de Copenhague, en la sueca Bastad, donde se disputa un ATP 250, o en el Sportchalet de Murren, un pueblo de los Alpes suizos. «El libro desafía la percepción del tenista como un deporte elitista. Hay lugares exclusivos, como el All England Club, pero también pistas públicas, accesibles, abiertas a quien quiera jugar», finaliza el estadounidense.