Figura mítica por ejemplarizar el sacrificio por su equipo al jugar lesionado, y con dolor, para llevarlo a las Finales de la NBA en 1970
Willis Reed, quien dramáticamente salió del vestuario minutos antes del séptimo juego de las Finales de la NBA en 1970 para liderar a los Knicks de Nueva York a su primer campeonato y poner uno de los ejemplos de sacrificio por su equipo a pesar del dolor, falleció el martes. Tenía 80 años.
La Asociación de Jugadores Retirados de la NBA anunció su fallecimiento y que confirmó a través de su familia. No dio las causas de su muerte, pero la salud de Reed se había deteriorado recientemente y no pudo viajar a Nueva York para el 50mo aniversario del equipo de los Knicks que se consagró campeón en 1973 durante el duelo ante Nueva Orleáns el 25 de febrero.
Los Knicks tuitearon un foto en la que Reed ingresa a la cancha mientras sus compañeros calentaba para el partido decisivo de 1970, uno de los momentos más memorables en la historia de la NBA y el Madison Square Garden.
“En estar de duelo, siempre nos esforzaremos por mantener los estándares que nos dejó – el liderazgo, sacrificio y ética de trabajo inigualables que lo personificaron como un campeón entre campeones”, dijo el equipo. “El suyo es un legado que vivirá para siempre”.
Conocido como “El Capitán”, Reed fue un pívot pequeño y un emotivo líder en los dos equipos campeones de los Knicks. Tenía un delicado tiro exterior y dureza al pelear por el balón en una época de jugadores altos en la pintura.
Fue elegido a siete Juegos de Estrellas y laureado como el Jugador Más Valioso en dos Finales de la NBA, logros que por si solos lo hubieran llevado a su exaltación al Salón de la Fama. En la campaña 1969-70 se convirtió en el primer jugador que barrió la votación al MVP de la temporada regular, el Juego de Estrellas y las Finales de la NBA.
Pero su lugar en la historia quedó asegurado al aparecer en la cancha en aquel partido final de la temporada.
Reed se lesionó el muslo en el quinto encuentro de la serie ante los Lakers, retorciéndose por el dolor. Nadie, ni sus compañeros, sabían cuál era el estatus de Reed, que seguía recibiendo tratamiento antes del séptimo juego. Ambos equipos calentaban cuando Reed emergió el túnel y los aficionados se levantaron y lo ovacionaron.
“Aquí viene Willis y la afición se vuelve loca”, dijo el presentador de radio Marv Albert.
Los Lakers se detuvieron para ver a Reed, quien tuvo dos tiros a distancia en los primeros minutos y avanzó por la cancha cojeando. No volvió a anotar, pero los Knicks no lo necesitaron. Gracias al retorno de su capitán y los 36 puntos y 19 asistencias de Walt Frazier, se impusieron 113-99 para conquistar su primer título de la NBA.
Reed ya no pudo recuperarse tan fácilmente de las lesiones en los siguientes años y disputó sólo 11 duelos en la campaña 1971-72. Regresó al año siguiente y llevó al equipo a su segundo título. Tras disputar apenas 19 partidos en 1973-74, se retiró por una lesión de rodilla con apenas 10 temporadas como profesional.
Eso fue suficiente para terminar con 12.000 puntos. y 8.400 rebotes, que se mantienen entre las tres mejores marcas de los Knicks.
Nacido el 25 de junio de 1942 en Hico, Luisiana, jugó a nivel universitario en su estado y llevó a Grambling State al título de la NAIA en 1961. La escuela retiró su número y nombró la cancha en su honor en el 2022.
Su número 19 fue el primero que retiraron los Knicks e ingresó al Salón de la Fama en 1982.