El equipo irlandés anotó cuatro ensayos, tres de ellos en la primera mitad, para infligir a Francia su primera derrota tras una serie de catorce victorias
En un choque de titanes entre los dos mejores equipos de la actualidad, Irlanda derrotó a Francia por 32-19 en lo que se consideraba la ‘final’ de la presente edición del Torneo Seis Naciones de Rugby, disputada este sábado en el Aviva Stadium de Dublín.
Los tries de Hugo Keenan (10), James Lowe (21), Finlay Bealham (27) y Garry Ringrose (72) provocaron la primera derrota en año y medio del XV del Gallo, vigente campeón del torneo y que solo pudo responder en la primera parte con un ensayo de Damien Penaud (19).
Con esta victoria ante el otro gran favorito al título, acompañada además por el bonus ofensivo, y con apenas dos jornadas disputadas, Irlanda confirma su papel de gran aspirante a un título que no logra desde 2018, año en el que levantó el trofeo ganando todos sus partidos. Y el triunfo sirve además para que los seguidores irlandeses aviven aún más el sueño de un primer Mundial a escasos meses de la cita planetaria en Francia (del 8 de septiembre al 28 de octubre).
Para Francia, en cambio, supone el fin de una racha de 14 partidos imbatido (desde el 17 de julio de 2021, 33-30 contra Australia) y planear las dudas sobre el sueño mundialista de los ‘Bleus’.
Los dos mejores equipos de la actualidad ofrecieron en el Aviva Stadium de Dublín un choque lleno de intensidad y acciones espectaculares, como la combinación ofensiva que supuso el primer ensayo de los locales, obra de Hugo Keenan (7-3, minuto 10).
Igual de fantástica fue la jugada del ensayo que puso a los franceses por delante en el marcador, conseguido por Damien Penaud en una acción que comenzó con la recuperación del oval por los franceses en su zona de 22 (7-13, m.19).
Pero el XV del Trébol reaccionó pasado el ecuador de la primera parte y llegó al descanso con ventaja (22-16) con dos ensayos, de James Lowe (21) y Finlay Bealham (27), el segundo cuando los ‘Bleus’ jugaban en inferioridad por la exclusión temporal del pilar Uini Atonio, sancionado por un placaje irregular (26).
A la vuelta de los vestuarios, los franceses sometieron a los irlandeses a una gran presión, con continuas jugadas a la mano que recordaban por momentos los mejores años del ‘rugby champagne’. Pero la defensa local logró evitar sobre la línea un ensayo de un imparable Penaud (48) y otra internada en líneas enemigas del capitán Antoine Dupont (50) y Thomas Ramos erró un penal que hubiese apretado el marcador (47).
Los irlandeses tardaron más de un cuarto de hora en sacarse de encima el dominio francés, pero pasado ese tiempo la máquina verde se puso en marcha de nuevo para ponerse a salvo con una patada a palos de Ross Byrne (25-16, m.60), que poco antes había sustituido al capitán Johnny Sexton, con problemas físicos.
Ramos trató de mantener en el partido a los franceses con un drop desde 35 metros (25-19, m.62), pero en otro intensa carga de la delantera irlandesa, los locales sentenciaron con el ensayo de Garry Ringrose y la transformación de Keenan (32-19, m.74). Fue el cuarto ensayo de Irlanda, que de esta manera sumó el punto del bonus ofensivo y se coloca en posición inmejorable para ganar el torneo, en el que ya aparecía como gran favorita al título.