España vive en la gloria: golea a Alemania y suma su segunda Nations League

España vive en la gloria: golea a Alemania y suma su segunda Nations League

España hace tres años que tocó la gloria, cuando nadie creía, y pese a los mil empujones que pudieron tumbarla, allí se instaló. Una generación extraordinaria, ahora comandada por Sonia Bermúdez, suma su segunda Nations League goleando a Alemania y curándose la herida de la Eurocopa. Los goles de Clàudia Pina y Vicky López, el futuro, permitieron hasta que Jenni Hermoso llorara de felicidad en el césped del Metropolitano por primera vez en tres años.

Se desentumeció España, sin olvidar cómo tuvo que apretar los dientes para sobrevivir en Kaiserslautern. Es más, con la lección aprendida. Buscó la manera de derruir a un rival forjado en la mejor siderurgia, tratando de recuperar la sutileza de su fútbol, pero sin perder de vista que tenían enfrente a un equipo casi imposible de domesticar, porque nunca se da por vencido. Sin embargo, la selección encontró la manera de meterles el miedo en el cuerpo.

Comenzó con Vicky López, la apuesta de Sonia Bermúdez para cubrir el hueco de Aitana, con un centro de Alexia, a la que se le escapó en el control en el punto de penalti. Siguió Esther, cruzando en exceso un zurdazo que lamió el poste. Y continuó Alexia obligando a Berger a aparecer para salvar un testarazo que la grada del Metropolitano trató de empujar. En apenas siete minutos, esta España era de nuevo el equipo descarado que ha dejado impronta.

Sin embargo, las alemanas jamás se amedrentan. Están programadas para soportarlo todo. Se estiraron y Gwinn dio el primer susto con un remate que se le fue alto. Eran capaces de hacer daño por la fortaleza con la que exigían Senb y Nüskens a Laia Aleixandri y el atosigamiento de Brand a Alexia. De ahí nacía el peligro que llevaba rápido a las orillas, especialmente buscando a Bühl en su duelo perpetuo con Ona Batlle.

La selección, esta vez sí, tenía claro que la espalda de su rival también era vulnerable. Eso le hizo sentir Vicky comandando una contra con Esther tras un pase filtrado de Clàudia Pina, que fue creciendo conforme pasaban los minutos.

Alemania llegó a Madrid dispuesta a morder y esperó con paciencia su momento para hacerlo cuando Kett armó un tiro que salvó Cata Coll. El duelo, igualado, ya iba casi de área a área, con las dos selecciones buscándose las cosquillas. España se mostraba tan afilada como fallona, aunque algún remate fuera tan imposible como la chilena que intentó Esther y atrapó Berger. La asistencia fue de Mariona, multiplicada y echando una mano en la construcción a Alexia, un tanto ensombrecida.

España fue probando, protegiéndose de pérdidas para que Alemania no pudiera correr. No siempre salió, porque cuando el balón llegaba a los pies de Bühl nacía el peligro. Suya fue la asistencia a Brand para que armara su disparo que tocó Irene Paredes para que llegara manso a Cata Coll. Otra vez respondió la selección, con Pina haciendo volar a Vicky en la banda para que buscara a Alexia en el área.

A la media hora de partido, las españolas le habían cogido la medida y encadenaron ocasiones. Un robo con cabalgada al área de Laia Aleixandri, que no tuvo fe en su chut desde la frontal y perdió la ventaja en el ataque. Después fue Mariona la que desperdició la más clara del encuentro cuando, con Berger vencida, echó fuera un balón que Pina le había telegrafiado al segundo palo. Fue la extremo de Barça quien no pudo rematar de cabeza una pelota llovida de Vicky.

Duelo eléctrico

El Metropolitano se llevó las manos a la cabeza dos veces antes del descanso. La primera cuando Mariona disparó a quemarropa al cuerpo de Berger; la segunda, cuando Anyomi cazó un balón a la espalda de la defensa que cruzó en exceso.

En la segunda parte, España saltó a resolver la final. Empujó a Alemania en su área y arreó una y otra vez hasta que Clàudia Pina, en su idilio con esta Nations, burló a Kett en la orilla, pisó área, tiró una pared con Mariona y fusiló a la portera alemana. Ya habían descorchado el partido y, aunque Alemania trató de estirarse, la maquinaria parecía imparable.

La tarea, difícil, la retorció Vicky López con un eslalon en la banda derecha y un zurdazo, de esos a los que le puso el sello su amigo Lamine, para marcar el segundo gol. Las germanas, ya descompuestas, vieron crecer el castigo cuando Pina les robó en tres cuartos de campo y, desde la media luna, metió el título en el bolsillo de España.

kpd