Yazeed Al Rajhi, el magnate ganador del Rally Dakar: una fortuna de más de 2.000 millones y una amistad con Carlos Sainz

Yazeed Al Rajhi, el magnate ganador del Rally Dakar: una fortuna de más de 2.000 millones y una amistad con Carlos Sainz

Hace dos años, durante la novena etapa del Dakar, Yazeed Al Rajhi no dudó en desmontar uno de sus amortiguadores para instalarlo en el coche de Henk Lategan, víctima de una seria avería tras atravesar una duna. Ese gesto permitió al sudafricano acabar quinto la carrera. Ambos pilotaban para Toyota, pero la generosidad del saudí caló hondo en Lategan, que ayer tributó una sincera felicitación al flamante ganador del Dakar. El rival que le ha arrebatado la victoria por un estrecho margen (3:57), la segunda diferencia más corta de la historia. En su undécima participación, Al Rahji es el primer piloto de un equipo privado que levanta el trofeo Touareg en 25 años.

Nadie, desprovisto de los medios de una gran marca, lograba este hito desde Jean-Louis Schlesser en 2000. Sin restarle mérito alguno, lo cierto es que los recursos nunca han supuesto un problema para Al Rajhi, cuya fortuna se estima en más de 2.000 millones de dólares. Quizá por ello, su prodigalidad es legendaria en el Dakar.

No se trata sólo del ágape con el que agasaja a toda la caravana durante la jornada de descanso. Ni del detalle del pasado año con Carlos Sainz, a quien cedió su fastuoso motorhome justo después de que el saudí se viese abocado al abandono. Cada participación en el rally más duro ronda los 800.000 euros. Lo que para la mayoría se antoja prohibitivo, para él supone una minucia.

Aprender a dosificarse

El propietario del conglomerado Mohammed Al Rajhi & Sons desconoce el número de empresas que gestiona. La más ilustre es Al Rajhi Bank, uno de los mayores bancos del mundo islámico, con 49.000 millones de dólares en activos. Y su división del acero controla el 80% del mercado saudí. Así que, incluso en pleno Dakar, necesita un hueco en la agenda para sus reuniones vía Zoom. También para los mensajes con Sainz, a quien idolatra. "Siempre me apoya y me da buenos consejos", dijo sobre el tetracampeón (2010, 2018, 2020, 2024).

En esta amistad ha jugado un papel importante Timo Gottschalk, su copiloto, que ganó la edición de 2011 con Nasser Al-Attiyah y colaboró con el madrileño durante su etapa en Buggy (2013, 2014). El abandono de Sainz tras la segunda etapa y el adiós de Sebastien Loeb, víctima de un accidente apenas 24 horas después, despejaron el camino a Al Rajhi. Un piloto que ha tenido que aprender a dosificarse. A levantar el pie. A afrontar el Dakar como una carrera de resistencia.

«Ha sido la edición más dura en mis 11 participaciones. Timo me ha ayudado muchísimo, porque tiene mucha experiencia», valoró tras la fiesta improvisada de ayer en la meta de Shubaytah. Tampoco quiso olvidar el récord de Schlesser ni de haberse convertido en el primer piloto local que sube a lo más alto del podio en el Dakar. Hace apenas un año, cuando lideraba la carrera, su Hilux dio varias vueltas de campana durante el inicio de la sexta especial.

Al Rajhi, durante la décima etapa del Dakar.

Al Rajhi, durante la décima etapa del Dakar.AFP

Esta vez, el éxito se ha fraguado en la etapa del jueves, cuando pudo descolgar a Lategan en el mar de dunas del Empty Quarter. El sueco Mattias Ekström (Ford) tampoco logró seguirle el ritmo y acabó tercero, a 20:21, mientras Al-Attiyah hubo de conformarse con igualar un histórico registro de Ari Vatanen y Stéphane Peterhansel: 50 triunfos de etapa. Desde 2009, cuando Giniel de Villiers se impuso a Mark Miller y Robby Gordon, no se registraba un podio sin Sainz, Peterhansel y Al-Attiyah.

Una proeza para el Overdrive Racing, sin los medios materiales y humanos del Toyota Gazoo Racing, el equipo con el que Fernando Alonso probó fortuna, junto a Nani Roma, en 2020. Un premio también para Dani Oliveras, copiloto del argentino Juan Cruz Yacopini, que pudo acabar séptimo, igualando lo conseguido en 2023.

Sanders, por delante de Schareina

En motos, el triunfo final se lo llevó Daniel Sanders, con 8:50 de ventaja sobre Tosha Schareina y 14:46 sobre Adrien van Beveren. El piloto de KTM sucede en el palmarés a Ricky Brabec, quinto, y se convierte en el segundo australiano en alzar el Touareg, después de Toby Price (2019). «Cuando salí de las dunas pude ver el vivac y me entraron escalofríos por todo el cuerpo. Estaba muy nervioso. No me lo podía creer. Todas las emociones empezaron a aflorar y pude ver la línea de meta", comentó el vencedor.

"Me siento muy feliz por Daniel, porque ha hecho un gran trabajo durante estas dos semanas. Los 10 minutos más o menos que tomó el primer día le permitieron controlar a partir de entonces", admitió Schareina.

Otra sanción impide la remontada de Al-Attiyah antes de la jornada de descanso

Otra sanción impide la remontada de Al-Attiyah antes de la jornada de descanso

Actualizado Jueves, 9 enero 2025 - 18:52

El piloto argentino Luciano Benavides logró la victoria en motos en la quinta etapa del Rally Dakar, este jueves, tras recorrer 428 kilómetros entre Alula y Hail, en Arabia Saudí, mientras que en coches el catarí Nasser al Attiyah la perdió por un solo segundo después de protagonizar una remontada espectacular y, sin embargo, ser sancionado.

Benavides se vio beneficiado por la penalización de dos minutos al francés Adrien Van Beveren, que había sido el más rápido en la etapa, pero que con la sanción quedó a 47 segundos del argentino, que se acerca al podio de la general (7ª a siete minutos del tercer puesto). "Creo que la estrategia jugará a mi favor en la segunda semana, pero en esta carrera, algunas decisiones se toman en contradicción con los planes estratégicos preparados desde hace días", comentó en la meta un Benavides que en las primeras etapas no fue a fondo para conservar su moto. El podio del día lo completó el chileno José Ignacio Cornejo, que llegó a minuto y medio de Benavides.

La jornada fue muy positiva también para los pilotos españoles. Tosha Schareina, segundo en la general, recortó buena parte de la desventaja con respecto al líder, Daniel Sanders, ya que el australiano recibió ocho minutos de sanción por varios excesos de velocidad. Quedan separados en la clasificación por siete minutos. Y el joven Edgar Canet, 19 años, volvió a ganar la etapa en su categoría (Rally2), que lidera con comodidad, y se mantiene en el Top 10 de la general.

Triunfo de Quintero en coches

Una sanción cambió también el resultado de la jornada en coches. El catarí Al Attiyah, cinco veces ganador de la prueba, fue el más rápido en completar el recorrido, recortando buena parte de la media hora perdida la víspera por un problema mecánico, y la organización le dio como vencedor del día. Pero, por tercera vez en lo que va de prueba, los organizadores anunciaron posteriormente la sanción a Al Attiyah "por llegar sin la rueda de repuesto en su vehículo".

Una sanción de 10 minutos que significó que el estadounidense Seth Quintero, que había acabado a 9:59 del catarí, pasaba a ser el ganador de la etapa, su segundo triunfo parcial en esta edición. El líder de la general, el sudafricano Henk Lategan (Toyota), acabó cuarto por detrás del sueco Mattias Ekstrom (Ford) y mantiene cómodamente la cabeza de la clasificación, con más de 10 minutos de ventaja sobre el saudita Yazeed al Rahji y casi 21 sobre Ekstrom.