El Team New Zealand logra su tercera Copa América consecutiva, hecho inédito en 173 años de historia

El Team New Zealand logra su tercera Copa América consecutiva, hecho inédito en 173 años de historia

Actualizado Sábado, 19 octubre 2024 - 16:48

El Team New Zealand no dio lugar a más sorpresas. El equipo neozelandés, con la inercia del golpe dado sobre la mesa este mismo viernes para ponerse a sólo un triunfo de hacerse con el título, hizo gala de solidez para imponerse otra vez al Ineos Britannia y hacerse así con su tercera Copa América consecutiva, algo que ningún equipo había conseguido en los 173 años de historia de esta competición. Es el quinto título para los kiwis.

La falta de viento provocó que el inicio de la séptima regata se retrasara una hora y obligó a reducir sus tramos de ocho a seis. Pero, aun con estas premisas sobre la mesa, el que sería a la postre el duelo final por el título no estuvo exento de emociones fuertes. En absoluto.

El Ineos, de hecho, logró salir en cabeza y jugó durante un rato al gato y al ratón con un Team New Zealand que, poco a poco, fue construyendo una sólida ventaja con respecto a su oponente. Tan sólida que le permitió marcar una máxima distancia de 370 metros en unos dos primeros tramos en los que lograron cruzar las dos primeras puertas con 19 y 22 segundos de ventaja, respectivamente. El equipo liderado por sir Ben Ainslie, a pesar de todo, logró sobreponerse en el tercer tramo, recortando distancias hasta tan sólo ocho metros y pasando por la tercera puerta prácticamente al mismo tiempo que su rival, en un intento por apretar las cosas hasta el final que, a la postre, no obtendría los resultados que con tanto anhelo perseguía.

El Emirates Team New Zealand, tras conquistar la Louis Vuitton America's Cup.

El Emirates Team New Zealand, tras conquistar la Louis Vuitton America's Cup.LLUIS GENEAFP

El Team New Zealand, con una navegación sin errores, aprovechó las mejores prestaciones de su embarcación, el Taihoro, capaz prácticamente de volar a ras de agua en un mar en el que apenas había oleaje, para dar una respuesta tremendamente contundente al Ineos, por mucho que los esfuerzos para evitar darse por vencidos de los británicos fueran también terriblemente titánicos. Así, los neozelandeses fueron capaces de cruzar la cuarta puerta con 12 segundos de ventaja sobre su rival, tras marcar una máxima distancia en el cuarto tramo de 230 metros que los británicos lograrían reducir a 210 metros camino de la quinta puerta. El tiempo, a pesar de todo, seguía jugando a favor de los neozelandeses. No en vano, en el paso por la quinta puerta las diferencias en el crono aumentaron hasta los 15 segundos.

El golpe final de los kiwis, además, sería del todo demoledor. Por mucho que la igualdad del arranque y el espíritu de lucha mostrado por el Ineos Britannia hubiera invitado a esperar un duelo competido hasta el último suspiro, camino de la meta, los kiwis fueron capaces de aumentar la brecha hasta 583 metros. Una distancia que, finalmente, les permitió hacerse con una victoria absolutamente incontestable, con 37 segundos de ventaja sobre un rival que no tuvo problemas a la hora de admitir su superioridad. «Quiero dar una gran enhorabuena al Team New Zealand, el mejor equipo de siempre de la Copa América», sentenciaría sir Ben Ainslie aún desde su puesto de patrón en la embarcación británica. Su intento por llevar al fin la Copa de las 100 Guineas a Casa no tuvo el resultado que esperaba, por mucho que el miércoles lograra cortar la gran racha neozelandesa. Ese sueño tendrá que esperar. Mientras, los neozelandeses siguen en una nube. Ahora mismo, nadie parece capaz de hacerles realmente sombra.

El Ineos Britannia resurge en la Copa América con dos victorias en un día ante el Team New Zealand

El Ineos Britannia resurge en la Copa América con dos victorias en un día ante el Team New Zealand

Actualizado Miércoles, 16 octubre 2024 - 16:48

El Ineos Britannia se impuso al Emirates Team New Zealand en la dos mangas disputadas este miércoles y recorta distancias en la final de la 37ª edición de la Copa del América (4-2), que se disputa en el campo de regatas del Puerto de Barcelona.

El director de regatas, el australiano Iain Murray, diseñó para la primera manga de la jornada de este miércoles, con previsión de viento de componente Sur-Suroeste (Garbí) de 8-10 nudos (14 a 18 km/h), un recorrido de seis tramos de 1,7 millas (3,1 km) cada uno con un total de 18,6 km entre boyas, con oleaje cruzado y complicado de entre unos 90 cm y 1 metros de altura.

La primera manga del día, quinta de la final, se inició con 8 nudos (14 km/h) de viento y con el Team New Zealand entrando por el lado izquierdo de la presalida y el Ineos Britannia por la derecha, y que tuvo un desenlace inesperado.

Cambios de vela mayor y proa

Y es que, a 1:14 minutos para la salida, el Taihoro, al realizar una trasluchada (virar con el viento en contra) por error de maniobra o un bloqueo en su vela mayor, 'planchó' (perdió el 'vuelo') y se quedó clavado. Los kiwis tardaron en recuperar su velocidad (no llegó a los 13 nudos -24 km/h- hasta bien transcurrido el primer tramo) y pasó la primera boya con 2:15 de déficit.

Ya en el segundo tramo recuperó su velocidad de crucero y en el tercero (en ceñida) igualó el ritmo, pero no pudo rebajar los 1.500 metros de desventaja. Así, el Ineos se imponía por 1:18 a un adversario hasta ahora absolutamente intratable tras completar el recorrido de 24:15 y estrenaba su casillero en la final (4-1).

En la siguiente manga, el Ineos cambiaba su vela mayor y la de proa, colocando su grupo titular de cyclors, mientras que su rival también hacía un par de cambios en esa parte de la tripulación en busca de piernas frescas. La manga iba a tener ocho tramos de 1,6 millas (3 km), que el dirección de la prueba rebajó a 1,4 (2,6 km) en el quinto tramo al bajar el viento.

La carta de la potencia

Los dos equipos se lo jugaban todo a la carta de la potencia y, en la presalida, los neozelandeses atacaban varias veces -sin éxito- a su rival que salía a 35 nudos de velocidad (68 km/h) frente a los 29 nudos (56 km/h) del defensor del título.

El AC75 del aspirante se mostraba más rápido y manejaba una ventaja de 9 segundos en el primer paso de boya, aunque los neozelandeses recortaban tres segundos en el segundo tramo.

Como había sido la tónica hasta ahora, los ingleses dominaban en el tramo con viento a favor y pasaban la boya con 15 segundos. Se esperaba la reacción neozelandesa en el tramo en ceñida (viento en contra), pero el Ineos mantuvo a raya a su adversario, conservando 13 segundos al entrar en el sexto de los ocho tramos.

Sin sorpresas

Los timoneles Burling y Outteridge aceleraron el ritmo del Taihoro y entraban el AC75 kiwi en el tramo final con sólo 7 segundos de desventaja. Intentaron atacar en ese tramo final, pero el Ineos, más rápido con viento a favor, no permitió sorpresas. El equipo británico se imponía por 7 segundos y cerraba así un día redondo con dos victorias que le devolvían de nuevo la vida en la competición.

Para mañana jueves está previsto un nuevo día de reserva, por lo que la final de la Copa del América se reanudará el próximo viernes (14:10 horas), con la disputa de las mangas séptima y octava

El Team New Zealand sigue intratable ante el Ineos Britania en la Copa América

El Team New Zealand sigue intratable ante el Ineos Britania en la Copa América

Actualizado Domingo, 13 octubre 2024 - 17:07

El Emirates Team New Zealand domina la final de la 37ª Copa del América por 3-0 al final de la segunda jornada al superar al INEOS Britannia, el desafiante en la primera y única manga del día (tercera de la Final) por 52 segundos en los campos de regatas de Barcelona.

La manga se inició con viento componente Noreste-Este (Gregal-Levante) de unos 9 nudos de intensidad y oleaje de unos 70-80 cms. El director de regatas, Iain Murray decidió acortar los ocho tramos previstos a solo seis, alargando de 1,5 millas (2,8 km) a 1,7 millas (3,2 km) cada tramo. Las oscilaciones del viento le obligarían a recortarlos a 1,3 millas (2,4 km) posteriormente.

Todo esto no cambió nada el desenlace de la manga y el dominio absoluto del Emirates Team New Zealand que ya empezó en la presalida tras entrar los británicos primeros por babor (lado izquierdo) y los 'kiwis' 12 segundos después.

Y ahí llego una maniobra magistral neozelandesa sobre el INEOs, dejándose caer desde el lado derecho de la caja de salida sobre el lado de babor británico y forzando una penalización por no dejarle derecho de paso (babor-estribor) que materialmente iba a sentenciar la contienda.

Los neozelandeses salieron en solitario y los británicos habían cedido 100 metros tras cumplir la penalización. El 'Taihoro' neozelandés volvió a ser 2-3 nudos (4-6 km/h) más rápido en ceñida y pasaba la primera boya con 19" de ventaja.

En cada tramo, la diferencia aumentaba (26,32,33 y 43 segundos en las cuatro boyas siguientes), para ceder 52 segundos al final de un recorrido de 27'06". Realmente impresionante y 3-0 en el marcador.

La campana sonó a favor del INEOS Britannía ya que a las 15:15 horas, la prevista para iniciar la segunda manga del día, (cuarta de la Final) el viento sobre el campo de regatas era de apenas 6,5 nudos (12 km/h), el mínimo para dar una salida y las previsiones eran de que no iba a cambiar, decretando a las 15:30 el aplazamiento de la manga.

Ambos equipos repitieron las mismas tripulaciones que en la primera jornada. El Emirates Team New Zealand ha formado con Peter Burling (timonel de estribor) y el australiano Nathan Outteridge (timonel de babor) con Blair Tuke (controlador de vuelo/babor) y Andy Maloney (trimmer de velas/Estribor),

El INEOS Britannia han contado con Sir Ben Ainslie (timonel de estribor) y Dylan Fletcher-Scott (timonel de babor) junto a Bledyn Monn (controlador de vuelo/estribor) y Leigh McMillan (trimmer de vela/babor).

Mañana lunes, día 14, que era día de reserva, se disputará la segunda manga aplazada hoy, a partir de las 14:10 horas.

El Team New Zealand se apunta las dos primeras victorias en la final de la Copa América

El Team New Zealand se apunta las dos primeras victorias en la final de la Copa América

Actualizado Sábado, 12 octubre 2024 - 17:38

El Team New Zealand hizo honor a su condición de favorito en la primera jornada de la final de la Copa América. El equipo neozelandés se hizo con la victoria en las dos primeras regatas imponiéndose en ambas de manera clara, por mucho que el INEOS Britannia tratara de apretar algo más las cosas en la segunda. Los actuales poseedores de la Copa de las 100 Guineas, con una navegación sin errores, dieron un primer golpe contundente sobre la mesa. Si logran imponerse también con esta misma claridad en la segunda jornada de competición, con las dos regatas siguientes previstas para este mismo domingo, su camino hacía el tercer triunfo consecutivo en la competición deportiva más antigua del mundo parecerá estar a todas luces más que allanado.

La falta de viento en Barcelona

Las condiciones meteorológicas marcaron tanto las dos regatas del día del evento principal de la Copa América como la final femenina, disputada a regata única, en la que el Luna Rossa italiano se impuso al Athena Pathway para hacer historia y sumar así este triunfo al ya conseguido en la categoría juvenil. La falta de viento, con el cielo de Barcelona completamente encapotado, obligó a retrasarlo todo durante algunos minutos. E, incluso, provocó que la primera regata se recortara a seis tramos en lugar de los ocho habituales.

El Team New Zealand firmó una gran salida y estuvo por delante prácticamente durante la totalidad de la regata, a pesar de que no había competido desde el pasado 9 de septiembre. Su victoria, con 41 segundos de ventaja por encima de los británicos, no dejó duda alguna sobre su tremenda competitividad.

El error de Ainslie

La segunda regata, disputada una vez terminada la final femenina, no obstante, tuvo un primer tramo mucho más igualado. El INEOS Britannia rubricó en este caso una mejor salida y las alternativas en el liderato se sucedieron durante varios minutos, con varias protestas de unos y otros desestimadas por la dirección de la prueba. La igualdad, de hecho, se mantuvo incluso, después de que sir Ben Ainslie, la cabeza más visible del equipo británico, cometiera un error de cálculo en la segunda puerta.

El Team New Zealand, con todo, logró abrir brecha a partir del trayecto hacia la quinta puerta y se las arregló para mantener su ventaja hasta un final en el que consiguió imponerse al equipo británico con una diferencia también nada desdeñable de 27 segundos. Si los neozelandeses son capaces de mantener este ritmo, la competición podría llegar a su fin el viernes que viene. Algo que el INEOS, sin duda, tratará de evitar a toda costa. Al menos, para prolongar su sueño de llevar la Copa América a casa.

Así son los impactantes veleros de la final de la Copa América que vuelan sobre el mar

Así son los impactantes veleros de la final de la Copa América que vuelan sobre el mar

Con dos foils por banda, viento en popa a toda vela, no corta el mar, sino vuela un velero de la Copa América, como diría José de Espronceda si estuviera hoy en el Puerto Olímpico de Barcelona, asombrándose con el espectáculo que ofrecen los barcos que compiten en la 37 edición de la Copa América de vela.

Hoy comienza la final que enfrentará al actual poseedor de la Copa, el defensor neozelandés Emirates Team New Zealand, contra el INEOS Britannia de Reino Unido, ganador de las regatas preliminares Louis Vuitton donde se enfrentaron cinco equipos aspirantes. Los veleros más modernos y rápidos jamás vistos en un campo de regatas se disputan la competición más antigua del mundo, navegando prácticamente la totalidad de la prueba por encima de la superficie del mar, casi sin tocarlo.

Estas invenciones voladoras son el resultado de la evolución tecnológica más puntera en el mundo de la vela de competición, similar al desarrollo continuo de la Fórmula 1. Los veleros reciben el nombre de AC75 por America's Cup 75, debido a los 75 pies de largo o eslora, y 4,8 metros de ancho o manga.

La Copa América de vela ha sido el escenario, a lo largo de sus 173 años, donde se han llevado al límite los avances de esta industria. En el año 1851, en su primera edición, disputada en la Isla de Wright, Reino Unido, la goleta norteamericana 'America' sorprendió por su tecnología a los demás regatistas. La novedad estaba en el diseño de sus velas, más planas, que facilitaban su navegación. Los norteamericanos ganaron la regata llevándose la Jarra de las Cien Guineas como trofeo y conservándola hasta 1980.

Hoy en Barcelona el AC75 representa claramente ese espíritu. Cada detalle de la estructura de su casco, de las velas o de su tripulación es el resultado de muchos años de investigación y desarrollo en ingeniería naval.

Los ocho tripulantes del AC75 se reparten simétricamente en cada banda, cuatro a babor y cuatro a estribor, y permanecen parcialmente ocultos en sus cabinas para reducir su huella aerodinámica. Todo a bordo del AC75 está cuidadosamente diseñado para volar sobre el agua y deben ser minimizados los elementos que ofrecen resistencia al viento. Cada barco cuenta con dos timoneles o pilotos que gobiernan el velero, con dos trimmers que se encargan de ajustar las velas y las hidroalas o foils y con cuatro cyclors, que se encargan de hacer funcionar las velas. Los timoneles o pilotos y los trimmers son expertos regatistas, reconocidos mundialmente y con experiencia en anteriores ediciones de Copa América, olimpiadas y mundiales de vela. Los cyclors, en cambio, tienen poca o nula experiencia en la competición de vela. El término cyclor ha sido acuñado tras unir las palabras inglesas cyclist y sailor, o sea, ciclista y marinero. Aparecieron por primera vez en la edición de 2017 en Islas Bermudas, pedaleando para mover las velas a bordo del catamarán neozelandés 'Aotearoa'. Ganaron y se llevaron la preciada Copa a las Antípodas, entonces en manos de los norteamericanos, defensores del trofeo en las dos ediciones anteriores. Los kiwis, apodo con el que se conoce a los habitantes de Nueva Zelanda, sorprendieron a sus oponentes, quienes hasta la fecha realizaban la extenuante labor de mover las velas con sus brazos mediante unos molinillos. Estos navegantes, conocidos como grinders, lo hacían así desde la primera regata en 1851. ¿Por qué ahora se pedalea y no se usa la fuerza de los brazos?

Con las piernas se consigue un 20% más de potencia. Más fuerza y menos marineros. Con el propósito de sumar a estas tripulaciones hombres que generen la potencia necesaria para mover las enormes velas del AC75, los equipos han reclutado a ciclistas y remeros de élite. Estos destacan sobre los demás miembros de la tripulación por su corpulencia, ya que son atletas de entre 90 y 100 kilos de peso. Los cyclors pedalean durante toda la regata llegando a generar en picos de esfuerzo 500 vatios de potencia. Pedalean entre 20 y 30 minutos para mantener la presión hidráulica en un circuito de aceite y bombas que, colocados bajo el casco, mueven las velas y giran el mástil. Sin esa presión el barco no navega. De la cubierta de la nave hacia arriba, es decir, las velas y el mástil, todo funciona mecánicamente gracias a ellos a través de la fuerza humana.

La excepción está bajo la cubierta: un sistema electrohidráulico mueve los brazos con los foils o hidro-alas gracias a una batería. Este sistema de hidroalas permite al barco volar y alcanzar velocidades de vértigo en condiciones de poco viento, al eliminar casi por completo el rozamiento con el agua y las olas. En las regatas previas las naves han alcanzado 50 nudos de velocidad, unos 90 km/h, con vientos de tan solo 17 nudos, unos 30 km/h. La velocidad que estas naves alcanzan ciñendo, navegando hacia la dirección de donde viene el viento en el menor ángulo posible, es uno de los mayores logros conseguidos con esta tecnología.

La organización tiene unas reglas y restricciones muy estrictas. A cada equipo le dan una serie de velas mayores, velas foques y el mástil, además del sistema electrohidráulico antes mencionado. Los equipos se encargan de desarrollar, siempre dentro de las medidas y restricciones de la organización, el resto del barco. De esta forma, aunque el casco de cada competidor tenga unas dimensiones comunes, la parte sumergida, denominada carena, tiene un diseño diferente en cada velero. Lo mismo ocurre con las hidroalas colocadas en el extremo de los brazos laterales del barco o con la posición que ocupan sus tripulantes. Cada equipo ha optado por variaciones sutiles en busca de arañar unos nudos de velocidad a sus contrincantes.

En cuanto a las velas, llama la atención la ausencia de la botavara, la barra que sujeta firmemente el perfil inferior (pujamen) de la vela mayor. Se ha sustituido por un carro donde se ajusta el puño de escota y que oculto bajo la cubierta del casco se desplaza de un lado a otro para dar forma a la vela. De esta manera la vela llega a tocar la cubierta eliminando por completo ese espacio bajo la botavara por el que se desaprovechaba el viento. Así, los trimmers dan mayor amplitud, redondez o aplanamiento a las velas, y se benefician de la más mínima brisa disponible en el campo de regatas.

Se ha conseguido una mayor eficiencia aerodinámica colocando dos velas mayores idénticas en paralelo e insertándolas en la parte posterior del mástil. Si cortásemos una sección de estos elementos, la forma que obtendríamos el perfil de un ala. Los trimmers pueden controlar la tensión y forma de cada una de las dos caras de la vela, además de la orientación del mástil, que se puede girar un máximo de 45 grados. Con una cara más plana y otra más curva, como las alas de los aviones, se produce una diferencia de presión en la vela mayor y con ello un empuje adicional, que incluso en condiciones de poco viento hace volar a estos navíos.

FUENTES: The Institute of Marine Engineering, Science and Technology, University of the West of England, Bristol, 37th Americas Cup, Yachting World Sailing World.

Silvia Mas, patrona del equipo español femenino de la Copa América: "Queremos mostrar que no hay techo"

Silvia Mas, patrona del equipo español femenino de la Copa América: “Queremos mostrar que no hay techo”

Actualizado Martes, 24 septiembre 2024 - 23:12

Silvia Mas (Barcelona, 1996) prepara esta primera Copa América femenina de la historia (5-13 octubre) con una mezcla de ilusión y responsabilidad. Patrona en el Sail Team BCN, campeona absoluta de España, campeona Mundial en 470 en el año 2021 y doble campeona del Mundo en categoría júnior, asegura que está haciendo realidad algo que nunca habría imaginado de niña. La guinda del pastel sería formar parte de una tripulación en el evento principal, con un equipo español. Algo que, quizás, está cada vez más cerca de convertirse en realidad.

¿Cómo ha ido la formación del equipo?
Algunas hemos navegando juntas, otras no, pero, al final nos conocíamos de básicamente por haber competido y ha ido todo muy bien. Tenemos formas de trabajar que son parecidas, caracteres muy parecidos, y eso hace que haya una buena cohesión dentro del equipo.
¿Qué perspectivas tienen en esta competición?
No hemos tenido muchas horas de agua en un barco real y somos uno de los equipos invitados, pero aspiramos a estar entre los tres mejores de nuestro grupo. No será fácil, pero lo más importante es sentar las bases para que haya un equipo español bien preparado para la próxima Copa América.
¿Contaban con experiencia en un barco como el AC40?
Nadie tenía experiencia con un barco como el AC-40, aunque sí es cierto que hay tres personas del equipo que han estado navegando en SailGP y otras que han navegado con barcos voladores pequeños, pero que no tienen nada que ver con este.
¿Es mucho más complicado que otros barcos?
Sí, sí, muchísimo más complicado. Al final, van cuatro personas en el barco, de las cuales dos son patronas y tenemos que comportarnos como si fuéramos una sola. Tiene que haber una comunicación muy buena, porque son barcos que van muy rápido y tienes que estar todo el día anticipándote. Por otro lado, está la parte tecnológica, con los foils, con muchos botones que dominar, y se trata de ser lo más eficientes que sea posible.
Aunque sea el hermano pequeño del AC75, ¿las regatas pueden ser igual de espectaculares?
Yo creo que van a gustar muchísimo. Es verdad que no alcanzan tanta velocidad, pero, de todas maneras, la suya también es increíble. Además, navegamos en flota, vamos a estar seis barcos compitiendo, y pienso que eso va a dar mucho juego. Serán muy divertidas de seguir.
¿Usar simuladores es una ventaja?
El uso del simulador es muy bueno en el sentido de que te permite ganar memoria muscular, te da la posibilidad de entrenar las comunicaciones y nos permite competir on line con otros equipos. Es cierto que no es lo mismo que estar en el agua, pero, si no sabes ir en el simulador, en el agua, mucho menos.
Silvia Mas, patrona del equipo español de vela.

Silvia Mas, patrona del equipo español de vela.Sail Team

¿Tener de fondo el skyline barcelonés es una motivación añadida?
Imagínate. Estoy muy orgullosa y muy feliz de que se esté compitiendo aquí, en Barcelona. Me siento en casa y, además, puedo tener a toda mi familia y todos mis amigos a mi lado. Si para mí la Copa América ya era algo muy importante, ahora lo es aún más.
Grant Dalton, CEO de la Copa América, asegura que la competición femenina es una vía para que las mujeres puedan construir su propio camino hacia el evento principal. ¿Llega un poco tarde o ahora es el momento más oportuno?
En algún momento tenía que llegar. Este tipo de barcos, más tecnológicos y menos físicos, favorecen que la figura de la mujer vaya a poder estar en las próximas ediciones. A partir de ahí, ya veremos qué es lo que pasa. Es la primera vez que hay mujeres, es cierto que las cosas van cambiando, pero también hay que ver cuál va a ser el ritmo a partir de ahora.
¿La Copa América femenina está aquí para quedarse?
Con estos barcos tenemos una oportunidad muy buena para demostrar que podemos estar en la línea de salida y competir juntas. Espero que se quede, que continúe. Si no, creo que sería un atraso.
¿Tienen una responsabilidad añadida por el hecho de ser pioneras?
Obviamente, es una responsabilidad, pero creo que todas lo vemos como algo muy positivo. Con esta Copa América les demostramos a las niñas que no hay techos. Cuando navegaba de pequeña y seguía esta competición, en la vida me habría imaginado que las mujeres podríamos estar ahí. Es una responsabilidad, pero todo el mundo la ha acogido muy bien y estamos muy contentas de poder hacerlo.
Las baterías humanas de la Copa América

Las baterías humanas de la Copa América

Actualizado Miércoles, 4 septiembre 2024 - 22:07

En la Copa América conviven dos tipos de energía para que los AC75 prácticamente vuelen sobre el agua. Por un lado, la del viento. Y, por el otro, la que les proporcionan los cyclors, auténticas baterías humanas, los deportistas encargados de generar, con sus músculos, la potencia necesaria para que funcionen los dispositivos hidráulicos de los que depende el control de sus naves. Una labor que llevan a cabo pedaleando, en una posición que es de todo menos cómoda, en una suerte de bicicletas estáticas insertadas en los navíos.

En 2017 fueron el arma secreta con la que el Emirates Team New Zealand logró alzarse con una incontestable victoria por 7-1. Su introducción llegó gracias a la intervención del abogado español Luis Sáenz Mariscal, quien buscó que el reglamento cambiara una sola palabra, pero tremendamente crucial: "manual" por "humano".

Hasta ese entonces, los encargados de proporcionar la energía eran los llamados grinders, quienes lo hacían moviendo unas manivelas con sus brazos. No obstante, el hecho de que algunos controles se actuaran con los pies fue la brecha que abrió paso a la modificación impulsada por este abogado, el mayor experto mundial en Copa América y contratado por el equipo neozelandés como asesor jurídico y de reglamento.

"Quise hacer una definición específica de manual y propuse que significara humano; que los controles tenían que estar gestionados por un humano. Me contestaron que no, que bastaba con decir que eran acciones realizadas por la tripulación y que no estaban limitadas exclusivamente para las manos", señaló Sáenz Mariscal en declaraciones recogidas por la agencia EFE.

Esta innovación fue prohibida en la edición de 2021, pero ha vuelto para la de Barcelona. En gran parte, como consecuencia de la reducción en el número de tripulantes, de 11 a ocho. Cuatro de ellos, cyclors. Con sus piernas, pueden generar hasta un 40% más de energía y, entre los elegidos, podemos encontrar 22 deportistas provenientes del remo, con campeones olímpicos y mundiales entre sus filas, 16 que vienen de la vela, algunos de ellos ex grinders, siete que lo hacen del ciclismo y tres, finalmente, cuyo background se sitúa en el atletismo.

"Es básicamente como estar en una bicicleta estática, sin flujo de viento y con alguien cambiando la resistencia constantemente por ti, avanzando sabiendo que no importa cuánto des, porque el barco siempre querrá más", ha explicado Marius van der Pol, cyclor del Team New Zealand, en declaraciones a los medios oficiales de la Copa América. "La pre salida es donde más se nos exige, para darles a los compañeros que navegan la posibilidad de asegurar una posición sólida para empezar la regata. Durante el resto, se trata de aguantar y dar todo lo que te quede", reitera este ex soldado y ex miembro de las fuerzas especiales neozelandesas.

Entrenamiento

"En lo que al entrenamiento se refiere, es muy similar al que seguíamos anteriormente, únicamente se trata de entrenar tu cuerpo para usar otro grupo de músculos, así que tus niveles de forma y resistencia todavía están allí", ha señalado por su parte Matt Grotel, del INEOS Britannia.

"El calor es una gran preocupación para nosotros, porque sabemos que puede tener un gran impacto en nuestro rendimiento, así que usamos un montón de chalecos de hielo, tratando de mantener el cuerpo lo más frío posible antes y después de meternos en el barco. Una vez allí, no hay mucho que puedas hacer: estás en una pequeña caja de fibra de carbono y el ambiente se caldea bastante", ha añadido este deportista, medalla de oro en remo en los Juegos Olímpicos de Río en 2016 y doble campeón del mundo en esta disciplina.

"He llegado a perder dos kilos en un único día de navegación. Ya sea con calefactores en el gimnasio o con entrenamientos en una sauna, lo hemos dado todo para adaptarnos al desafío que supone el calor", ha apostillado Colton Hall, del NYCC American Magic. "Competir como cyclor en el AC75 es increíble, porque durante la carrera eres capaz de producir suficiente adrenalina como para no notar demasiado la fatiga y, además, el esfuerzo requerido nunca es constante", ha desvelado Emanuele Liuzzi, del Luna Rossa italiano.

"¡Claro que hay una estrategia a la hora de generar la energía! Es como gestionar el depósito de tu coche. Puedes ir rápido un par de vueltas, pero, si exiges mucho demasiado pronto, puedes quedarte sin gasolina antes de tiempo", ha apuntado por su parte el suizo Théry Schir, del Alinghi Red Bull Racing y quien logró una medalla de bronce en el Mundial de Ciclismo en pista de 2014. "A bordo del AC75, debes ser a la vez duro y explosivo. Por eso, seguimos un programa de entrenamiento ad hoc, con el que trabajamos el corazón, los pulmones y, por supuesto, las piernas. Hemos estado más de un año preparándonos", ha deslizado el francés Maxime Guyon, del Orient Express, ex militar, ex gendarme y Campeón del Mundo de CrossFit en 2021.

Grant Dalton, CEO de la Copa América: "Los hijos de aquellos que trajeron los Juegos a Barcelona son los que han traído la Copa América"

Grant Dalton, CEO de la Copa América: “Los hijos de aquellos que trajeron los Juegos a Barcelona son los que han traído la Copa América”

Actualizado Miércoles, 28 agosto 2024 - 22:59

Grant Dalton (Auckland, Nueva Zelanda, 1957) es el CEO del Emirates Team New Zealand, el actual poseedor de la Copa de las 100 Guineas y, por tanto, CEO de la competición deportiva más antigua del mundo. Una Copa América que, en su 37 edición, suma por primera vez a su nombre el de la marca Louis Vuitton, que da, también, nombre a la competición encargada de decidir quién peleará con ellos por el título. Una Copa Louis Vuitton que empieza este mismo jueves y que, en opinión de esta auténtica leyenda del mar, cuenta ya con un favorito muy claro: el Luna Rossa italiano.

¿Cómo nació esta Copa Louis Vuitton?
Coincidió con la rotura de la racha más larga del deporte. En 1983, hubo equipos de muchos países que quisieron competir entre ellos para convertirse en el retador del Liberty, representante del club de yates norteamericano que había logrado defenderlo durante 172 años, lo convirtieron en una Copa y Louis Vuitton se encargó de patrocinarla. Así, de repente, dieron reconocimiento y prestigio a estos equipos, entre los que estaba el del vencedor final, Australia, y, desde entonces, está estrechamente unida a la Copa América. No puedes tener una Copa América sin una Copa Louis Vuitton.
¿El Luna Rossa es ahora mismo el rival más fuerte?
Sí, es lo que pienso. Las condiciones meteorológicas en los próximos cuatro días serán ligeras, incluido el viento, y eso puede que haga que todo esté un poco más entremezclado, pero, tomando en consideración el próximo par de meses, creo que el Luna Rosa es el rival más rápido.
¿Cree que todos los equipos han mostrado ya sus mejores bazas o tal vez alguno se está guardando todavía algún as en la manga?
No creo que los rivales se hayan guardado algo, pero una de las ventajas de ser el defensor es que nada de lo que hagamos cuenta hasta octubre. En San Francisco, perdimos 8-9 en la final porque uno de los errores que cometimos fue ser demasiado buenos desde el principio. En las Bermudas, en 2017, en cambio, no montamos el equipo rápido hasta 24 horas antes de la Copa América. Fue arriesgado, pero funcionó. Estamos aún muy al principio del ciclo de desarrollo, toda nuestra equipación de carreras se está construyendo, ni siquiera existe aún. Los demás, en cambio, tienen que darlo todo. Por ejemplo, las regatas entre el Alinghi y el Orient Express decidirán quién es el primero que se va a casa. Las técnicas mejorarán, pero no pueden introducir sorpresas, no tienen tiempo. Nosotros aún podemos innovar, y lo haremos.
¿Qué legado aspira a dejar en la Copa América?
Ganemos o perdamos, en Barcelona quedará un legado. Los Juegos dejaron ya uno perdurable, que aún existe hoy en día a través de los voluntarios. Es curioso, pero creo que se puede decir que los hijos e hijas de aquellos que trajeron los Juegos Olímpicos a Barcelona son los que han traído la Copa América. Además, hemos creado una fundación para promover la vela juvenil, la femenina y la vela inclusiva. Por otro lado, están los barcos. Les encantan a todo el mundo, son espectaculares, muy avanzados tecnológicamente y tremendamente rápidos. No creo tampoco que nadie se atreva a quitar del programa la Copa América femenina. Desde el punto de vista de la sostenibilidad, todo el trabajo que hemos llevado a cabo apostando por el hidrógeno como combustible. Y, también, la incursión en los e Sports, con el juego oficial. Espero que, cuando nos vayamos, hayamos marcado una diferencia.
¿Veremos mujeres en las tripulaciones del evento principal en un futuro cercano?
Nuestra competición es tan top que ni siquiera lograr un oro olímpico te garantiza un puesto. Esta cuestión podría haberse abordado, por ejemplo, haciendo obligatorio incluir la presencia femenina en las tripulaciones, pero no sería ningún logro y podría provocar que las mujeres se sintieran degradadas. No soy partidario de imposiciones. Por eso, preferimos introducir un camino más real, para que puedan ser realmente escogidas por sus logros. El problema con la vela femenina es que, más allá de los Juegos, no hay una continuidad. Será una competición muy interesante. Estamos creando un camino. Sus capacidades a nivel de comunicación, además, son muy superiores, y eso es algo importantísimo en estos barcos.
Prevén audiencias millonarias a nivel audiovisual. ¿Contar con un skyline como el de Barcelona como telón de fondo puede también contribuir a ello?
Poder tener la Sagrada Familia, por ejemplo, como telón de fondo es absolutamente icónico. Para contar con estos tiros de cámara desde los helicópteros, tuvimos que pedir un permiso especial, porque justo por encima del campo de regatas está también el corredor aéreo del aeropuerto, y nos llevó año y medio conseguirlo.
¿Cree que Barcelona está bien posicionada para ser la sede de futuras ediciones?
Curiosamente, uno de los problemas que puede llegar a tener Barcelona es que su éxito despierte a otros gigantes, pero están en buena posición para repetir. Si le preguntas a cualquier miembro de cualquier equipo, creo que estarían todos de acuerdo. Es genial que no quieran mudarse, pero, antes que nada, tenemos que ganar, y eso es algo que no tenemos asegurado. También habría que ver cómo estará el mercado, pero nos encanta cómo están marchando las cosas.
Arranca la Fórmula 1 del mar: "Esta Copa América está destinada a ser una de las mejores de la historia"

Arranca la Fórmula 1 del mar: “Esta Copa América está destinada a ser una de las mejores de la historia”

Actualizado Miércoles, 21 agosto 2024 - 22:27

La 37 edición de la Copa América, la competición deportiva más antigua del mundo, con 173 años de historia y que en este 2024 se celebrará por primera vez en Barcelona, da hoy su pistoletazo de salida. Y lo hace con una regata preliminar (a modo de exhibición), la tercera después de las celebradas en Vilanova i la Geltrú y en Jeddah, en la que el defensor del trofeo, el Emirates Team New Zealand, y los cinco aspirantes que competirán por medirse a él en la regata final, el Ineos Britannia, el Alinghi Red Bull Racing, el Luna Rossa Prada Pirelli Team, el NYYC American Magic y el Orient Express Racing Team. Todos ellos medirán sus fuerzas con los espectaculares AC75.

En las anteriores ocasiones, los contendientes pusieron en los desafíos en el agua sus AC40, embarcaciones similares, aunque a escala reducida, que son las que usarán los equipos que competirán tanto en la categoría juvenil como en la femenina, la gran novedad de esta edición. Dos competiciones en las que se unirán a los contendientes principales un total de seis equipos invitados, entre los que se encuentra el español Sail Team Barcelona.

Muchos definen los AC75 como auténticos Fórmula 1 del agua. La velocidad que pueden alcanzar estas embarcaciones y los desafíos tecnológicos que se han afrontado para desarrollarlos les dan sin duda la razón. Pueden volar por encima del agua a una altura de 30 centímetros y maniobran con una increíble soltura.

Las tripulaciones se han visto reducidas, pasando de 11 a ocho miembros. Cuatro de ellos se encargan de manejar tanto el timón como los sistemas de control del barco. Los otros cuatro deben proporcionar la fuerza necesaria para alimentar los sistemas hidráulicos. Algo que en los AC40, con sólo cuatro tripulantes, se hace por medio de baterías. Para generar la potencia necesaria, se recurre a los cyclors, quienes usan las piernas en una suerte de bicicletas estáticas y que proporcionan así hasta un 40% más de potencia que los tradicionales grinders, quienes usaban sus brazos.

Una novedad que fue determinante para que Team New Zealand se hiciera con el trofeo en 2017 y que logró introducirse gracias a la actuación del abogado español Luis Sáenz Mariscal, quien se apoyó en un tecnicismo para que el término «manual» fuera sustituido por «humano» a la hora de definir en el reglamento el método aplicado para generar dicha fuerza. Los cyclors fueron prohibidos para la edición de 2021, pero, en esta ocasión, sí podrán estar presentes en Barcelona.

«Los barcos tienen un aspecto fantástico, el rendimiento, particularmente con viento fuerte, es espectacular tanto a favor como contra el viento y creo que los espectadores se sorprenderán mucho. Es todo un privilegio navegar en ellos, con esta preciosa ciudad de fondo. Creo que esta edición está destinada a ser una de las mejores de la historia», aseguró sir Ben Ainslie, CEO del Ineos Britannia.

El Team New Zealand es el actual poseedor de un trofeo que, pese a su origen británico, nunca ha sido conquistado por un equipo de dicha nacionalidad. El Club de Yates de Nueva York, con la goleta America, fue su primer vencedor, en 1851, pero no volvió a poner en juego la conocida como Copa de las Cien Guineas hasta 1870. Desde entonces y hasta 1983 fue siempre capaz de defender con éxito su posesión.

Ese año, el Australia II rompió brevemente el dominio norteamericano, recuperado a continuación durante tres ediciones seguidas por el Club de Yates de San Diego. En 1995 y 2000, el Real Escuadrón de Yates de Nueza Zelanda, vencedor también de las dos últimas ediciones, las de 2017 y 2021, se alzó con un trofeo que fue a parar a manos del Alinghi suizo en 2003, que al no tener salida al mar, eligió Valencia como sede. En 2007, el trofeo fue recuperado también brevemente por los norteamericanos, a través del Club de Yates Golden Gate de San Francisco, en 2010 y 2013.

La regata que se celebra desde este jueves hasta el próximo domingo es preliminar, compiten todos los contendientes del evento principal con sus mejores galas. A partir del día 29 de agosto, arranca la Copa Louis Vuitton, un formato de liga a dos vueltas en la que también compiten todos, pero no se tienen en cuenta los resultados del Team New Zealand.

En esta liga, un barco será eliminado y los otros cuatro se medirán en semifinales, al mejor de nueve regatas, y en una final, al mejor de 13, que definirá el desafiador final del actual poseedor del trofeo. La final, también al mejor de 13, se disputará, en principio, desde el 12 hasta el 27 de octubre. Entre el 17 y el 26 de septiembre, tendrá lugar la competición juvenil y, del 5 al 13 de octubre, la novedosa apuesta femenina.

La Copa América de vela, un maná para Barcelona: un impacto económico de 1.000 millones de euros

La Copa América de vela, un maná para Barcelona: un impacto económico de 1.000 millones de euros

Actualizado Martes, 20 agosto 2024 - 22:22

La 37 edición de la Copa América, que tendrá por primera vez en su historia como sede la ciudad de Barcelona, apura la cuenta atrás. A partir del próximo jueves arranca un evento en el que la emoción sobre el agua se mezcla también con una serie de eventos dinamizadores en tierra que, de acuerdo con un estudio encargado por la Fundació Barcelona Capital Nàutica a la Universidad Pompeu Fabra hecho público el año pasado, el único que existe hasta el momento, puede llegar a tener un impacto económico superior a los 1.200 millones de euros. No en vano, se considera que esta prueba, la competición náutica más importante del mundo, es el tercer evento deportivo con mayor impacto para su anfitrión, por detrás de los Juegos Olímpicos y los Mundiales de fútbol.

Los gastos de organización, por supuesto, también son enormes. En total, se calcula que la inversión es de unos 1.115 millones de euros, de los cuales 195 corresponderían a gastos de organización y 231 serían los que invertirían todos los equipos participantes, contando tanto los seis del evento principal como los seis más que se les unen tanto en las categoría juvenil como en la femenina, novedad en esta edición. Los 689 restantes corresponderían a los gastos derivados de las visitas previstas para el evento. Unas cifras que, a pesar de que se toman con mucha cautela, podrían rondar los 2,5 millones de visitantes a lo largo de los dos meses en los que se prolongará el evento. A nivel de empleo, además, las previsiones también son muy positivas, dado que se contempla la creación de unos 19.000 puestos de trabajo.

La proximidad geográfica de cuatro de los países que cuentan con representación en el evento principal, Francia, Italia, Suiza, Reino Unido, el auge del turismo procedente de Estados Unidos en las últimas fechas, la nutrida representación de ciudadanos neozelandeses en Europa y el valor intrínseco de Barcelona como destino turístico hacen que, ahora mismo, sea muy difícil precisar cifras exactas de visitantes. No obstante, la organización ha trabajado mucho para que todos aquellos que quieran vivir las emociones de la Copa América lo más cerca posible del mar, pero sin dejar de pisar la tierra, lo tengan realmente muy fácil. Este mismo jueves ya se pondrán en marcha los espacios específicos para acoger a todos los visitantes que lleguen a lo largo de todos estos días a la ciudad atraídos por la náutica.

Desde el día 22 al 25 de agosto, mientras dure la regata preliminar, y a partir del 29 de agosto y hasta el final de la competición, con el arranque de la Copa Louis Vuitton, que decidirá el rival del Team New Zealand en la lucha final por el trofeo, estarán abiertos el Village, situado en el emblemático Moll de la Fusta y que dispone de un aforo máximo de 8.500 visitantes, y las dos fan zones, de tamaño más reducido y ubicadas en la plaza del Mar y las inmediaciones del Bogatell. Todos estos espacios contarán con pantallas gigantes para seguir las regatas, servicios para los visitantes, barras de bar y diferentes propuestas gastronómicas, hasta un total de 40 diferentes, que irán rotando a lo largo de las semanas que dure la competición y que se centrarán al máximo en ofrecer productos de proximidad.

En el Village, donde se llevarán a cabo eventos como las entregas de premios, además, se habilitará un espacio para que se elaboren a la brasa tanto pescados comprados diariamente a la cofradía de pescadores como carnes y verduras adquiridas en el cercano mercado de La Barceloneta.

Todo, además, aderezado con diferentes eventos culturales, diseñados para captar y mantener la atención de un número de visitantes diarios que, de acuerdo con las previsiones, crecerá desde los 10.000 en el arranque hasta los 100.000 en cuanto la competición de la Copa América afronte su momento más decisivo, a mediados o finales del próximo mes de octubre.