Las futbolistas han afirmado a través de un comunicado que no están de acuerdo con las acusaciones sobre el técnico Juan Antonio García
Juan Antonio García ‘Randri’, entrenador del Alhama de Murcia durante un partidoAlhama CF ElPozo
Las jugadoras del Alhama Club de Fútbol ElPozo de Murcia han desmentido este martes haber denunciado un supuesto comportamiento inapropiado por parte de su entrenador, Juan Antonio García ‘Randri’, y han asegurado que en ningún momento se han sentido acosadas. Esta negativa se ha conocido tras la publicación de una información que ha señalado al técnico como autor de insultos y vejaciones.
En un comunicado difundido a través de la Asociación de Futbolistas Españolas, las jugadoras han afirmado que no están de acuerdo “en acusar al entrenador como un acosador sexual, algo que es de una enorme gravedad. Además, queremos subrayar que en ningún momento nos hemos sentido acosadas con gestos o hechos que pudieran vulnerar nuestra dignidad e intimidad personal y profesional”.
Las 17 futbolistas que han firmado el escrito sostienen que si estos hechos de los que se acusa al técnico se hubieran producido los “habrían denunciado de inmediato en todas aquellas instancias que fueran necesarias”.
El club murciano, por su parte, también ha negado los hechos y ha asegurado que “no consta ninguna queja por insultos, vejaciones o cualquier comportamiento similar”. Además, la entidad ha pedido el “máximo respeto” tanto para el equipo como para quienes conforman su plantilla.
Eurocopa 2024
Testigo directo
EDUARDO J. CASTELAO
@EJCASTELAO
Granada
Actualizado Lunes,
11
septiembre
2023
-
21:05Ver 1 comentarioEn Granada, donde los taxistas no ubican bien...
Hace dos años, durante la novena etapa del Dakar, Yazeed Al Rajhi no dudó en desmontar uno de sus amortiguadores para instalarlo en el coche de Henk Lategan, víctima de una seria avería tras atravesar una duna. Ese gesto permitió al sudafricano acabar quinto la carrera. Ambos pilotaban para Toyota, pero la generosidad del saudí caló hondo en Lategan, que ayer tributó una sincera felicitación al flamante ganador del Dakar. El rival que le ha arrebatado la victoria por un estrecho margen (3:57), la segunda diferencia más corta de la historia. En su undécima participación, Al Rahji es el primer piloto de un equipo privado que levanta el trofeo Touareg en 25 años.
Nadie, desprovisto de los medios de una gran marca, lograba este hito desde Jean-Louis Schlesser en 2000. Sin restarle mérito alguno, lo cierto es que los recursos nunca han supuesto un problema para Al Rajhi, cuya fortuna se estima en más de 2.000 millones de dólares. Quizá por ello, su prodigalidad es legendaria en el Dakar.
No se trata sólo del ágape con el que agasaja a toda la caravana durante la jornada de descanso. Ni del detalle del pasado año con Carlos Sainz, a quien cedió su fastuoso motorhome justo después de que el saudí se viese abocado al abandono. Cada participación en el rally más duro ronda los 800.000 euros. Lo que para la mayoría se antoja prohibitivo, para él supone una minucia.
Aprender a dosificarse
El propietario del conglomerado Mohammed Al Rajhi & Sons desconoce el número de empresas que gestiona. La más ilustre es Al Rajhi Bank, uno de los mayores bancos del mundo islámico, con 49.000 millones de dólares en activos. Y su división del acero controla el 80% del mercado saudí. Así que, incluso en pleno Dakar, necesita un hueco en la agenda para sus reuniones vía Zoom. También para los mensajes con Sainz, a quien idolatra. "Siempre me apoya y me da buenos consejos", dijo sobre el tetracampeón (2010, 2018, 2020, 2024).
En esta amistad ha jugado un papel importante Timo Gottschalk, su copiloto, que ganó la edición de 2011 con Nasser Al-Attiyah y colaboró con el madrileño durante su etapa en Buggy (2013, 2014). El abandono de Sainz tras la segunda etapa y el adiós de Sebastien Loeb, víctima de un accidente apenas 24 horas después, despejaron el camino a Al Rajhi. Un piloto que ha tenido que aprender a dosificarse. A levantar el pie. A afrontar el Dakar como una carrera de resistencia.
«Ha sido la edición más dura en mis 11 participaciones. Timo me ha ayudado muchísimo, porque tiene mucha experiencia», valoró tras la fiesta improvisada de ayer en la meta de Shubaytah. Tampoco quiso olvidar el récord de Schlesser ni de haberse convertido en el primer piloto local que sube a lo más alto del podio en el Dakar. Hace apenas un año, cuando lideraba la carrera, su Hilux dio varias vueltas de campana durante el inicio de la sexta especial.
Al Rajhi, durante la décima etapa del Dakar.AFP
Esta vez, el éxito se ha fraguado en la etapa del jueves, cuando pudo descolgar a Lategan en el mar de dunas del Empty Quarter. El sueco Mattias Ekström (Ford) tampoco logró seguirle el ritmo y acabó tercero, a 20:21, mientras Al-Attiyah hubo de conformarse con igualar un histórico registro de Ari Vatanen y Stéphane Peterhansel: 50 triunfos de etapa. Desde 2009, cuando Giniel de Villiers se impuso a Mark Miller y Robby Gordon, no se registraba un podio sin Sainz, Peterhansel y Al-Attiyah.
Una proeza para el Overdrive Racing, sin los medios materiales y humanos del Toyota Gazoo Racing, el equipo con el que Fernando Alonso probó fortuna, junto a Nani Roma, en 2020. Un premio también para Dani Oliveras, copiloto del argentino Juan Cruz Yacopini, que pudo acabar séptimo, igualando lo conseguido en 2023.
Sanders, por delante de Schareina
En motos, el triunfo final se lo llevó Daniel Sanders, con 8:50 de ventaja sobre Tosha Schareina y 14:46 sobre Adrien van Beveren. El piloto de KTM sucede en el palmarés a Ricky Brabec, quinto, y se convierte en el segundo australiano en alzar el Touareg, después de Toby Price (2019). «Cuando salí de las dunas pude ver el vivac y me entraron escalofríos por todo el cuerpo. Estaba muy nervioso. No me lo podía creer. Todas las emociones empezaron a aflorar y pude ver la línea de meta", comentó el vencedor.
"Me siento muy feliz por Daniel, porque ha hecho un gran trabajo durante estas dos semanas. Los 10 minutos más o menos que tomó el primer día le permitieron controlar a partir de entonces", admitió Schareina.
El entrenamiento de este martes en el Sena preparatorio para las pruebas de natación en aguas abiertas ha sido cancelado al estar el agua en unas condiciones no aptas para el baño, anunciaron los organizadores.
Se trata de la quinta sesión de entrenamiento cancelada desde el inicio de los Juegos Olímpicos de París tras la suspensión de las sesión previas al triatlón, cuya prueba masculina tuvo que ser aplazada un día.
Varios triatletas expresaron su frustración por esas repetidas cancelaciones, pero también por la incertidumbre sobre la disputa de las pruebas en las fechas previstas.
Para dar luz verde al nado de los deportistas, las autoridades vigilan de cerca las tasas de dos bacterias fecales: la de E. Coli y Enterococcus.
Pese a los controles del agua, la triatleta belgaClaire Michel, que disputó la prueba femenina el 31 de julio, enfermó tras ser infectada con la bacteria e.coli tras nadar en el río Sena.