El mundo del deporte despide a Giovanni Benvenuti, icono del boxeo italiano, que ha fallecido en Roma a los 87 años. Popularmente conocido como Nino, había nacido en 1938 en Isola d’Istria, actualmente parte de Eslovenia.
La carrera de NinoBenvenuti estuvo repleta de éxitos profesionales memorables. Se alzó como campeón olímpico de los pesos wélter en 1960, consolidándose como una promesa del boxeo desde su juventud. Posteriormente, su dominio se extendió en otras categorías, conquistando el título de campeón mundial de los pesos superwélter entre 1965 y 1966, junto al reconocimiento como campeón europeo de los pesos medios entre 1965 y 1067. En 1968, recibió el prestigioso galardón de ‘Fight of the year’, un reconocimiento que ningún deportista italiano ha conseguido hasta el momento.
Junto a los títulos y condecoraciones, Nino Benvenuti ha protagonizado combates históricos. En su primera pelea en la trilogía contra Emile Griffith fue condecorado como ‘Fight of the year’, volviendo a recibir el reconocimiento tres años después en su enfrentamiento contra Carlos Monzón. La potencia de sus golpes quedó patente en 1969, cuando la undécima ronda de su victoria por nocaut ante Luis Manuel Rodríguez fue premiada como ‘Round of the year’. El boxeador fue el único italiano en conseguir el título mundial por unanimidad, siendo reconocido en dos categorías de peso (medios y superwélter). Esta hazaña que solamente han logrado nueve boxeadores en los pesos superwélter.
Su legado trascendió fronteras, llegando a ser el primer italiano incluido en el International Boxing Hall of Fame en 1992, y también en el National Italian-American Sport Hall of Fame, junto a figuras como Rocky Marciano y Joe Di Maggio, por sus gestas en Estados Unidos.
El cine de Nino
Fuera del ámbito deportivo, Nino Benvenuti exploró otras facetas. En 1969, debutó como actor en el spaghetti-western“Vivi o preferibilmente morti”, compartiendo pantalla con Giuliano Gemma. En 1975, volvió al cine como protagonista en la película policíaca “Mark il poliziotto spara per primo”. Su interés por la comunicación lo llevó a inscribirse en el registro de periodistas publicistas del Lacio el 9 de marzo de 1979.
Sin embargo, la vida de Benvenuti no estuvo exenta de desafíos personales. En 2020, un grave drama familiar lo golpeó duramente con el suicidio de su primogénito a los 58 años. Stefano, quien cumplía una pena de cuatro años por robo de joyas y se encontraba en arresto domiciliario a causa de la pandemia de COVID-19, fue encontrado sin vida en un bosque en la meseta del Carso.
La relación de Nino con Stefano y sus otros hijos de su primer matrimonio —Macrì, Giuliano, Francesco y Soraya— fue, según sus propias palabras en una entrevista con el Corriere della Sera dos años antes de la tragedia, “difícil”. Reconoció no tener contacto con ellos y lamentó no conocer a sus nietos, reflexionando: “Aunque no he sido un buen padre, aún podría ser un buen abuelo”. En contraste, su relación con Nadia Bertorello, a quien describió como el “gran amor de su vida”, le trajo la alegría de su hija Nathalie.
Dos niñas de cuatro y cinco años se lanzan por los toboganes del Parque Baladre de Gandía. Corre el aire y hace frío en esta ciudad vacía en diciembre. Las calles están desiertas y apenas circulan coches. Debajo del parque, literalmente, hay un espacio municipal en el que resuenan voces y gritos en ucraniano. Fuera hay aparcados varios vehículos y una furgoneta que pone "Undisputed" (indiscutido). Dentro, hay varias personas preparando un entrenamiento físico mientras otras cuatro juegan un partido de pickleball con una pelota de gomaespuma. "Davai" (Vamos), se escucha entre risas.
El que grita es Oleksandr Usyk (Simferopol, 1987), el primer campeón de los pesos pesados en la historia que ostenta los cinturones de los cuatro organismos reguladores principales (CMB, AMB, OMB y FIB) y el primero unificado desde Lennox Lewis, que le visitó en su refugio valenciano hace tan solo unas semanas. "Elegimos Gandía porque nos pareció bonita", ríe Usyk hasta que detalla, ya más serio: "Me recuerda donde nací, en Simferopol, las montañas, sol, playa... y la gente, muy buena".
El MUNDO asiste en exclusiva al último día del training camp del ucraniano en Gandía. Tres meses de duros entrenamientos para ponerse en forma para la revancha contra Tyson Fury, el próximo 21 de diciembre. Será, de nuevo, el Kindom Arena de Riad, donde el campeón voló el pasado jueves, el que acoja el enfrentamiento de los dos máximos exponentes mundiales de los pesos pesados. Ha dicho Fury que la única manera que tiene de vencer a Usyk es "noqueándolo". "Tendrá que intentarlo", bromea el ucraniano.
El boxeador, al fondo del gimnasio.David GonzálezAraba
Han sido 100 días con tres entrenamientos diarios, a las 6 de la mañana, a las 12 del mediodía y a las 6 de la tarde, hasta la reducción a dos sesiones en las últimas dos semanas. "Es increíblemente disciplinado", cuentan desde su equipo sobre la mentalidad de un campeón a quien nunca le ha dado pereza una sesión. Ya se trate de boxeo, de trabajo físico o de agilidad mental. Esta última la realizan gracias a una máquina que utilizan para entrenar la cabeza y la memoria, con ocho sensores que proyectan figuras que hay que memorizar, pulsando la respuesta lo más rápido posible.
Esa personalidad es la que le ha llevado a ser considerado uno de los mejores boxeadores de la historia. "Ocho horas en la sala entrenando todos los días, así se consigue. ¿Cómo crees que un futbolista del Real Madrid llega a jugar así? Lo mismo que yo con el boxeo, sin parar. Es la única manera, entrenar sin parar", cuenta a este periódico, sentado en el ring que su equipo dispuso en la sala de entrenamiento. Además de un ring, hay espalderas, una canasta de baloncesto, todo tipo de sacos, tanto para entrenar la fuerza como la velocidad, y pesas de variedades infinitas, así como un equipamiento de boxeo para surtir una velada entera. Lo más importante del espacio no es lo deportivo, sino dos estampas y una cruz, bajo las que Usyk reza cada día, antes y después de entrenarse.
¿Qué es para usted la religión?
Es mi vida.
El ucraniano rezando después de entrenar.David GonzálezAraba
Religión y boxeo. Un deporte que descubrió después de dejar el fútbol a los 15 años y por el que no pudo cumplir uno de sus sueños: ser actor. "Siempre quise apuntarme a una escuela de arte dramático hasta que gané el campeonato de Ucrania de boxeo y me orienté al deporte", revela el campeón.
Fue su padre quien le introdujo en el boxeo. Fue su padre el que le levantaba cuando era pequeño para ver los combates de Vitali Klitschko, hoy alcalde de Kiev y amigo personal de Oleksander. Y fue su padre el primero que creyó en lo que es hoy. Por eso, cuando derrotó a Fury en Riad, por decisión dividida, sus primeras palabras fueron para él: "Papá, ¿me oyes? Lo hemos conseguido". "Fue un momento inolvidable donde me sentí feliz y triste al mismo tiempo, porque no estaba mi padre. Estaba con mis hijos, mi mujer, pero no tenía al lado a la persona que me quería ver ganando, que siempre creyó en mí", cuenta.
Momentos estelares en la carerra de Usyk.David GonzálezAraba
La guerra
La mente de Usyk siempre está con su familia, su pilar, y con Ucrania, su patria. El boxeador, que pasa desapercibido pese a su gran tamaño cuando pasea por la playa de Gandía junto a sus hijos, es un ídolo en su país. Múltiples banderas y mensajes cuelgan en su lugar de entrenamiento. Aunque esté en España, no se siente lejos de su patria. "Allí viven mis hijas y mi mujer, mi pensamiento y mis sentimientos están siempre allí. No puedo decir que esté lejos. En mi patio, en Kiev, han caído muchas veces trozos de escombros y metralla de la guerra", apunta el púgil.
Usyk, a través de su fundación, ha proporcionado multitud de ayuda, no sólo económica. Ha convencido a Fury para donar un millón de dólares de la bolsa de su primera pelea (el pasado mayo) para sus compatriotas, envueltos en una cruenta guerra desde hace más de dos años. Un conflicto en el que él, aunque lo admite de manera lacónica, también ha participado.
¿Has luchado en Ucrania?
Sí, he empuñado armas en la guerra.
Su guerra está ahora en Riad, donde deberá defender su corona y sus cuatro cinturones ante un gran boxeador que buscará borrar el cero de su casilla de derrotas. Tampoco tiene derrotas Ilia Topuria, vecino de entrenamientos en la costa levantina, y al que Usyk le tiene admiración. "Me gusta su apariencia, su forma de pelear, su técnica y me gusta como persona. Creo que si se lo plantea, él podría dedicarse al boxeo, porque tiene mucha técnica de manos", concede el campeón de los pesados.
Las manos de Usyk.David GonzálezAraba
Usyk bromeó en una entrevista al apuntar que cuando se retire del boxeo podría pelear en la modalidad de bareknuckle, pero hoy lo descarta por completo. "Yo ya tengo un estatus en el boxeo, es como si después de conducir un Ferrari me bajara a un cuatro latas", desliza de manera metafórica. "Antes, ahora y siempre, el número 1 de los deportes de contacto es el boxeo", recalca.
Tampoco se prestará a un espectáculo como el que ofrecieron recientemente Mike Tyson y Jake Paul, aunque valora su parte positiva. "Fueron felices con su show. Yo disfruto viendo las actuaciones en estas peleas. El tiempo pasa y eso sirve para que las nuevas generaciones se enganchen al boxeo y crezca el deporte", señala sobre el reto entre el ex campeón y el youtuber.
Sudado y tras hora y media de entrenamiento, toca recoger camino a una nueva cita histórica. Una cita que le puede reafirmar como leyenda del boxeo. "Al mejor rival aún no me he enfrentado", apunta con una sonrisa irónica para dejar claro que no hay otro como él. Ocurra lo que ocurra, Usyk sabe que le debe todo a un deporte que le da "paz, tranquilidad y amabilidad". "Es lo que me hace ser quien soy", incide.
La fiscalía francesa inició una investigación tras la denuncia de acoso cibernético que presentó la campeona olímpica de boxeo Imane Khelif tras el aluvión de críticas y acusaciones falsas sobre su sexo durante los Juegos Olímpicos, según confirmó este miércoles la oficina del fiscal de París. El abogado de la atleta, Nabil Boudi, presentó el viernes pasado la denuncia ante la unidad especial de la oficina del fiscal de París que combate los discursos de odio en línea.
Boudi indicó que la boxeadora fue objeto de "una campaña misógina, racista y sexista" en su camino a ganar la medalla de oro en la categoría de peso welter femenino y que llevó a que se convirtiera en una heroína en su natal Argelia y dio atención global al boxeo femenino.
Para saber más
La oficina del fiscal recibió la denuncia y su Oficina para Combatir Crímenes contra la Humanidad y Discursos de Odio abrió la investigación bajo los cargos de "acoso en internet basándose en su género, insultos públicos basados en su género e incitar públicamente a discriminar e insultos públicos en base a su origen".
Khelif fue empujada a una confrontación global, sin su consentimiento, sobre identidad de género y regulaciones en el deporte tras su primera pelea en París, cuando su rival italiana Angela Carini se retiró después de apenas unos segundos de combate, citando el dolor por los golpes iniciales. Las acusaciones falsas de que Khelif es transgénero y un hombre surgieron en línea y el Comité Olímpico Internacional tuvo que salir a defenderla y denunció a aquellos continuaron propagando información incorrecta. Khelif aseguró que aquellos que propagaron ideas erróneas sobre ella "perjudica la dignidad humana".
Grandes personalidades
Entre aquellos que desinformaron en línea sobre la atleta están el expresidente de Estados Unidos Donald Trump, Elon Musk o J.K. Rowling. Khelif denunció a redes sociales, incluyendo "X", en lugar de un perpetrador específico, una fórmula común bajo las leyes francesas que deja a criterio de los investigadores determinar qué persona u organización podrían ser culpables. La oficina del fiscal de París no dio nombres específicos.
En Argelia, su exentrenador Mustapha Bensaou indicó que la denuncia de la boxeadora en Francia fue iniciada por las autoridades argelinas y deberá "ser una lección en la defensa de los derechos y honor (de los atletas) en Argelia y en todo el mundo". Además, continuó, "todos los involucrados serán juzgados por violar la dignidad y honor de Imane", aseguró Bensaou en una entrevista con The Associated Press. Y añadió: "Los ataques contra Imane fueron diseñados para romperla y perjudicar su moral. Gracias a dios triunfó".
El dominicano Alberto Puello venció este sábado por decisión dividida al español Sandor Martín con lo que conservó el título mundial de la división súper ligera del Consejo Mundial de Boxeo en un combate en el Barclays Center en Nueva York. Dos tarjetas de los jueces favorecieron al dominicano 115-113 y 116-112, y una al español, por 115-114.
Puello, de 30 años, permanece invicto en 24 combates, de los cuales ha ganado 10 por la vía rápida. Martín, de 31 años, quedó 42 peleas ganadas, 15 por nocáut, y cuatro derrotas.
En el primer asalto 'La Avispa' Puello sacó ventaja de su mayor estatura, 1.77 metros, mantuvo a raya a su rival, 1.70, con rectos de izquierda y un insistente jab de derecha. Sandor buscó hacer daño con su gancho de derecha.
Martín, nacido en Barcelona, arrancó el segundo con mayor empuje. Trató de poner contra las cuerdas a su rival e invitó al intercambio de golpes en el que castigó a un monarca que se vio apurado.
En la vuelta al ring el dominicano conectó el rostro del retador con la izquierda, lo llevó a las cuerdas, pero Sandor salió del apuro con el poder de su derecha; absorbió los golpes al cuerpo y estremeció al nacido en San Juan de la Maguana con el gancho.
La velocidad del catalán le permitió conectar en el inicio del cuarto par de zurdas al pómulo, Puello contestó con volado de derecha al rostro en un incesante tira-tira al que ninguno rehuyó. Sandor recibió al campeón con una potente izquierda al rostro en la quinta vuelta y continuó con golpes a las partes blandas.
La intensidad no amainó en el sexto y séptimo round. Ambos pugilistas se enfrascaron en constantes intercambios en el centro del cuadrilátero con ligero dominio de Puello.
En el octavo 'La Avispa' hizo sangrar la nariz de Martín con par de ganchos de derecha y le provocó un corte en la ceja izquierda, a pesar de lo cual el retador no reculó.
El noveno y décimo ofreció una exhibición de velocidad en el uno-dos del catalán que contrarrestó la efectividad del monarca.
El undécimo asalto perdió fuelle ante el desgaste de ambos boxeadores; fue el preámbulo a un cierre frenético, con un Alberto Puello que se quedó fuera de distancia con la zurda y un Sandor más certero con la derecha en una intensa y pareja batalla.
"Tuve problemas en los primeros asaltos, empecé mal, pero luego pude mantener el ritmo. La capacidad de ir de menos a más me llevó a la victoria", señaló el dominicano al final de la contienda.
Por su parte, Sandor Martín aseguró este domingo que no bajará los brazos hasta conseguir su objetivo de ser campeón del mundo. "Sentí que gané esta pelea, pero yo no soy parte de los jueces y claramente ellos lo vieron de una forma distinta. No sé qué me falta, pero no estoy por bajar los brazos", afirmó el púgil barcelonés.