Los pinchazos telefónicos cazan a la trama de Rubiales amañando un concurso de la RFEF hace sólo un mes: “Nos la han puesto botando. Vamos a presentar nuestra oferta y dos más”
Las intervenciones telefónicas practicadas por la juez que instruye el ‘caso Rubiales’ revelan que la trama del ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) amañó un concurso hace tan sólo un mes a favor de la constructora Gruconsa siendo presidente Pedro Rocha, según recoge el sumario al que ha tenido acceso EL MUNDO. Tal y como revelan las conversaciones interceptadas por la Guardia Civil, el hermano del jefe jurídico de la RFEF y directivo de la constructora, Ángel González Segura, se puso en contacto en torno al 7 de febrero pasado con Jonathan Oliva Quesada, director adjunto de Gruconsa. En dicha conversación le avanzó que “tenían que preparar un proyecto de obra para la RFEF”, en referencia a unas obras de reforma de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y que éste debía ser aprobado en la “Comisión Económica”.
Sólo unos días después, el 20 de febrero, González Segura recibió la llamada del directivo federativo Miguel García Silvero. Los investigadores subrayan que en dicha conversación el también directivo José Javier Jiménez, alias Jota, le indicó que “necesitan tres presupuestos para presentarlos a la Comisión Económica”. González Segura le contestó que se disponía a buscarlos a través de “empresas que trabajan para ellos”, extremo que finalmente llevó a cabo. El propio González Segura, hablando con el arquitecto José Antonio Carranza, vinculado a Gruconsa, es muy explícito respecto al amaño: “Nos la han puesto botando. Vamos a presentar nuestra oferta y dos más”
Tal y como reveló EL MUNDO, la juez que instruye el ‘caso Rubiales’ investiga la adjudicación de obras por valor de al menos 1,3 millones de euros a la constructora Gruconsa, acusada de pagar sobornos al ex presidente de la RFEF, el pasado 27 de febrero. Se trata de trabajos relacionados, entre otras cuestiones, con la adecuación de la licencia urbanística otorgada por el Ayuntamiento de Las Rozas a varios instalaciones del complejo de la Ciudad del Fútbol. Entre otras, la residencia y las cocinas.
Los investigadores han podido acreditar que la adjudicación, a la que concurrieron tres ofertas, fue trucada para favorecer a la constructora Gruconsa. En este sentido, la Guardia Civil considera que al menos dos de estas propuestas eran ficticias y que hicieron las veces de lo que en el argot judicial se denomina ‘mariachis’.
Según la instructora, el ex presidente del fútbol español encabezaba una trama consistente en otorgar obras a Gruconsa para, acto seguido, cobrar comisiones ilegales por las mismas. A criterio de la Policía Judicial la mecánica consistía en otorgar contratos a esta empresa, como por ejemplo la reforma del Estadio de La Cartuja en Sevilla por valor de un millón de euros, para, acto seguido, desviar fondos a las empresas del íntimo amigo de Rubiales, Francisco Javier Martín Alcaide Nene. El siguiente paso, según la investigación, pasaba por que Rubiales cobraba de las sociedades de su íntimo Nene, concretamente de Conecta 17 Consulting, S.L.
Las intervenciones telefónicas revelan además que los responsables de Gruconsa tenían previsto llevar a cabo un estadio de fútbol, una ciudad deportiva y un hotel en Arabia Saudí. Explican que aprovecharían los contactos que establecieron gracias al traslado de la Supercopa a ese país y que tenía “interés” en participar el propio Rubiales. “Si sale esto, hay dinero para todo el mundo”, presumen en las conversaciones grabadas por la Guardia Civil al tiempo que los responsables de Gruconsa se quejan de que Rubiales tuviera que participar del beneficio económico pese a ser “el que menos pinta” al no desempeñar ningún cargo de responsabilidad en el futuro proyecto. También se lamentan del escaso beneficio de la constructora en la zona sur de España por las comisiones que tienen que pagar al íntimo amigo y socio de Rubiales, Nene.
Según ha podido saber EL MUNDO, la RFEF ha dado orden a través de su actual presidente Pedro Rocha, tras la operación judicial puesta en marcha hace unos días, de paralizar cualquier tipo de contrato vinculado a Gruconsa y se han bloqueado los pagos pendientes. El contrato del último contrato amañado no ha llegado a firmarse ni ha sido abonada cantidad alguna.
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil está registrando la Real Federación Española de Fútbol en una investigación relacionada con supuestos contratos irregulares en los últimos cinco años.
Dentro de esta operación, los agentes de la UCO llevan a cabo este miércoles registros en 11 domicilios y detenciones en varias provincias españolas. Entre los domicilios registrados está el de Luis Rubiales, ex presidente de la RFEF, en Granada, aunque él se encuentra fuera de España, en República Dominicana.
En concreto, se espera la detención de siete personas y otras cinco están siendo investigadas. Entre los detenidos, según confirman a EL MUNDO fuentes de la investigación, está el abogado Tomás González Cueto, hombre fuerte de Rubiales durante su etapa en la Federación en su calidad de asesor jurídico externo de la Federación. Por él pasaban todos los asuntos importantes de la Federación.
Las mismas fuentes confirman que los registros se han practicado en la mañana de este miércoles porque los investigados no habían entregado los contratos que los agentes les habían requerido.
Los agentes investigan presuntos delitos relacionados con la corrupción en los negocios, la administración desleal y el blanqueo de capitales.
Están previstos más de una decena de registros en domicilios particulares y al menos media docena de detenciones, además de requerimientos judiciales a distintas entidades públicas y privadas.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Majadahonda es el que comenzó a investigar el contrato para el traslado de la Supercopa a Arabia Saudí firmado por el entonces presidente federativo, Luis Rubiales, con el empresario y exfutbolista Gerard Piqué.
Ese juzgado está siendo el encargado de instruir la querella que, en mayo de 2022, presentó Miguel Galán, presidente de CENAFE, contra Luis Rubiales y Gerard Piqué por el asunto de la Supercopa de Arabia.
En esa querella, de 25 páginas, Galán acusaba a ambos de los delitos de corrupción en los negocios y administración desleal a cuenta de varios motivos, siendo el principal la comisión de 24 millones de euros que ambos pactaron para Kosmos, la empresa del ex jugador del Barça, a cambio de trasladar el torneo al país árabe.
Sin embargo, en ese escrito también se pedía al juzgado la investigación de otros posibles delitos como la contratación, mediante una empresa interpuesta, de detectives para espiar a David Aganzo (presidente de AFE), el cobro irregular por parte de Rubiales de una ayuda a la vivienda y el hecho de haber realizado, también Rubiales, un viaje de placer a Nueva York con cargo a los presupuestos federativos.
«Vamos allá. Vamos a meter valores en el Excel a ver qué nos queda. La primera prueba de las 800 que haremos hasta que nos cuadre con el resultado». María Tato, directora de la Candidatura del Mundial 2030 en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), se dirigió en estos términos al resto de evaluadores en la caótica reunión que mantuvieron el 25 de junio de 2024 en la Ciudad de Fútbol de Las Rozas.
De ese encuentro salió la primera clasificación, que incluía el estadio de Balaídos entre los 11 estadios elegidos. Sin embargo, dos días después, tal y como ha desvelado este periódico, se modificó la puntuación para dejar caer al estadio gallego y dar entrada al vasco de Anoeta.
La alteración en las puntuaciones se llevó a cabo sin que se volviera a reunir el equipo del Mundial 2030 y sin que se justificara debidamente el cambio, que variaba por completo el resultado de la votación.
EL MUNDO ha tenido acceso en exclusiva a la grabación de la reunión en la que se puntuaron las sedes del Mundial que organizará España junto a Portugal y Marruecos. La cita se celebró en el despacho del ex jugador del Real Madrid y ex responsable del equipo organizador, Fernando Sanz, y le acompañó Joana Soares, del Área de Estrategia.
A lo largo de unas tres horas, los presentes, a los que se incorporó posteriormente otra empleada federativa, Marta Alcalde, fueron analizando las diferentes sedes y puntuando de manera confusa y desordenada. «Vamos a ir dando puntuaciones y ya está», dijo Tato. «Las que des tú, están bien», indicó Sanz.
"Estamos tardando la de Dios"
«Empezamos con Riazor», coincidieron los evaluadores, mientras fueron leyendo los diferentes criterios de puntuación sin ponerse de acuerdo ya desde el inicio en qué querían decir exactamente. De esta forma comenzaron a discutir, por citar algunos ejemplos, sobre el plazo de finalización exacto de las obras de los estadios o las infraestructuras de las ciudades y se fueron alargando en la interpretación de los criterios mucho más de lo previsto. «Con un estadio estamos tardando la de Dios», advirtieron, al ver que el proceso se iba a alargar indefinidamente.
«Aquí la que se conoce los aeropuertos soy yo», terció Tato como máxima responsable, que llevó en todo momento la voz cantante, en referencia las conexiones entre las diferentes sedes mundialistas. «El aeropuerto de Coruña es pequeño, es la mitad que el de Bilbao, es muy pequeñito [...] (Conexión) con Marruecos no tienen una mierda», incidió a la hora de valorar esta cuestión.
El análisis de los criterios se fue complicando hasta provocar que los miembros del grupo de trabajo del Mundial perdieran los nervios al no tener claro de qué manera calificar. Tato expuso: «Vamos a meternos en la cabeza un criterio que nosotros consideramos 5 (puntos)». «Pues yo no tengo claro cuáles son los criterios de los aeropuertos», indicó otra de las presentes, ahondando en el desconcierto. De tal forma que los evaluadores coincidieron, por señalar otro ejemplo, en que no entendían bien los baremos de la FIFA en relación con las conexiones entre sedes y que llegaban a ver incluso criterios que estaban «duplicados».
«¿Tren tiene Coruña? ¿Sí, no? Pues ponle un 10»
«¿Tren tiene Coruña? ¿Sí, no? Pues ponle un 10», sentenciaron, intentando agilizar el ritmo del proceso de puntuación. «Esto va a ser más lento de lo que íbamos a pensar», se quejaron todos al tiempo que Tato advirtió de que «esto hay que mirarlo porque no es ponerlo a huevo, creo».
«No hay que tener tanto miedo», indicó Sanz, intentando desatascar la situación. El grupo de trabajo del Mundial también abordó cuestiones como si las sedes habían albergado acontecimientos deportivos o de otro tipo relevantes durante los últimos años. «¿Un concierto de Guns N' Roses es relevante?», se preguntaron. «No sabemos cómo interpretarlo», concluyeron. «Está muy mal explicado», consensuaron.
El proceso de puntuación se fue enrevesando entre problemas de comprensión de los baremos, la urgencia por tener listas las puntuaciones y la falta de información sobre las sedes hasta desembocar en escenas en las que los evaluadores llegaron a perder la compostura. «María, no te líes, coño, por no repetir todo 70 veces. ¿Cuenta con el certificado ambiental? Pues 20. Tira».
«Es que no tiene ningún tipo de sentido lo que han adjuntado, te cuentan aquí la historia de Las Palmas», se quejó Alcalde, en referencia a otro de los apartados al comprobar que una de las ofertas, en lugar de cuestiones técnicas, incluía referencias históricas.
María Tato, responsable evaluadora del Comité Técnico.RFEF
De aquella reunión salió finalmente un Excel con un ránking de puntuaciones en el que resultaban elegidos 11 estadios. El último clasificado era el del Celta de Vigo con una puntuación de 10,2004 puntos, superando a Anoeta, que quedaba en ese momento fuera, con 10,1226.
Sin embargo, apenas 48 horas después, el equipo evaluador retocó el Excel alterando la puntuación del estadio donostiarra, que pasó de golpe a tener una puntuación de 10,6026 (hasta ese momento disponía de 10,1226). De esta manera superaba a Vigo, dejando en el lugar número 12 a la opción gallega, que quedaba automáticamente eliminada.
Sanz intervino en la fase de evaluación pero no en la confección y modificación posterior de las puntuaciones. No en vano, ha explicado a este periódico que sólo tuvo conocimiento de la segunda clasificación y, en ningún caso, de la primera. Por lo que se considera una «víctima» si el proceso liderado por Tato alberga irregularidades.
En el caso de Anoeta esta empleada federativa modificó al alza uno de los subfactores, vinculado al proyecto técnico, pasando de 15 a 20 puntos. Concretamente el Subfactor A1, que llevaba por título: «Considerar el nivel de intervención que debe llevarse a cabo». Este subfactor representaba el 30% de la valoración total de este apartado.
Otro correo electrónico a Louzán
Tato recibió en su correo electrónico las dos versiones de los Excel el 27 de junio a las 15.16 horas, tal y como acredita la documentación que obra en poder de este periódico.
Que la opción de Vigo estaba incluida en los primeros planes de la RFEF lo ratifica, además, otro correo electrónico que obra en poder de este diario, que fue remitido por María Tato al actual presidente y entonces vicepresidente, Rafael Louzán, el 26 de junio. «Querido Rafa, te escribo unas líneas sobre la situación actual, siguiendo tus indicaciones para poder informar al detalle a Pedro (Rocha, entonces presidente de la RFEF)». Tato le contó a Louzán los «criterios de baremación» que habían estado empleando, «basándonos en los usados por la FIFA en el último mundial elegido: Brasil 2027 Femenino».
Le resumía que habían valorado en un «80» los «criterios técnicos» y en un «20% los documentales», pero que el Gobierno había terciado pidiendo que se introdujeran, además, «criterios estratégicos». que debían contar con un peso de un 35%. Le indicaba que el Ejecutivo quería premiar la «vecindad», es decir, «aquellas sedes que estén cerca de la frontera de los otros dos países» y que ese criterio «únicamente afecta a Vigo».
Por lo que, con la propuesta gubernamental, «garantizan la sede de Vigo», subrayaba. Por último, le apercibía de que la información que le facilitaba era «únicamente a efectos de su conocimiento y del presi», que «no se debe filtrar nada» y que contenía «datos no confirmados, sólo propuestos» hasta ese momento, ya que estaban analizando si aplicaban la modificación de los baremos propuesta por el Ejecutivo.
«Rogamos nos deis indicaciones, en caso de no recibir ninguna entendemos que podemos proceder»
Pese a ello, el 28 de junio, esta trabajadora de la RFEF remitió la clasificación retocada en favor de Anoeta a los miembros del Comité Ejecutivo de la candidatura mundialista y desechó la versión inicial que favorecía a Vigo y las indicaciones gubernamentales. Lo hizo en un correo remitido a las 12.43 horas.
«Estos son los documentos de trabajo con los que hemos realizado la elaboración del listado de las sedes seleccionadas», comunicó a otros responsables federativos como Elvira Andrés, Manuel Lalinde o Jorge Mowinckel. «Asimismo, adjuntamos el Excel con la valoración», añadió.
«Según nuestros cálculos, existen tres candidatas que no se evalúan ya que no han firmado requisitos fundamentales de la FIFA, como puede ser el acuerdo del estadio o de la ciudad por causas relacionadas con la negociación de las cláusulas de dichos acuerdos con FIFA». Se refería a «Gijón, Murcia y Valencia». «Asimismo -agregó- la sede de Vigo tendría la menor puntuación».
María Tato, en 2019, durante su etapa como vicepresidenta del Athletic.LUIS TEJIDO
Tato urgió a sus compañeros porque dijo que tenía que presentar el listado definitivo de sedes «en dos horas». «Rogamos nos deis indicaciones, en caso de no recibir ninguna entendemos que podemos proceder adelante con esta selección».
La referida selección acabó siendo definitiva y la RFEF la hizo pública varias semanas después. El viernes 19 de julio mediante un comunicado se anunciaban los estadios que «serán incluidos como candidatos a albergar encuentros en España de la Copa del Mundo FIFA 2030 tras el trabajo desarrollado durante los últimos dos años por el Comité Ejecutivo para nuestro país de la candidatura conjunta con Marruecos y Portugal, en el que está integrado el Gobierno a través del CSD».
La RFEF desvelaba, además, que se había «analizado» la posibilidad de «ampliar hasta 13» el número de estadios, pero que las federaciones portuguesa y marroquí habían «considerado que debe respetarse la normativa FIFA, donde se establecen 20 sedes como máximo».
De tal manera que las sedes elegidas fueron finalmente los estadios de Anoeta, Camp Nou, Gran Canaria, La Cartuja, La Rosaleda, Metropolitano, Nueva Romareda, Cornellá-El Prat, Riazor, San Mamés y el Santiago Bernabéu.