El regreso de Joao Félix con la camiseta del Barcelona marcó la previa del partido de Liga en el Metropolitano. El delantero, titular para Xavi Hernández por segunda jornada consecutiva, fue recibido con hostilidad por su antigua afición. No sólo por los pitos recibidos cuando su nombre fue anunciado por la megafonía, sino por los incidentes en el exterior del estadio.
La placa de Joao en el paseo de las leyendas del Atlético fue vandalizada por algunos hinchas, que depositaron todo tipo de desperdicios encima e incluso quemaron una camiseta del portugués. “Son partidos picantes que me dan una motivación extra”, adelantó esta misma semana Joao.
En las horas previas al choque, Xavi restó importancia al recibimiento por el estadio donde jugó entre junio de 2019 y enero de 2023. “Joao es inteligente y sabe que puede competir de manera perfecta”, aseguró el técnico azulgrana en los micrófonos de DAZN.
“Los aficionados tienen que respetar a los jugadores y hay que recibirlo como merece, con aplausos”, aseguró Enrique Cerezo, presidente del Atlético, en declaraciones a DAZN.
Estos incidentes recordaron lo sucedido años atrás con Thibaut Courtois durante una visita del Real Madrid. En mayo de 2022, la placa del portero belga fue arrancada horas después de que Cerezo, enviase un controvertido mensaje a sus hinchas: “Si quieres quitarla, ve con un pico y una pala y quítala”
No es casualidad que Thomas Tuchel y Pep Guardiola señalaran la habilidad de Toni Kroos como la principal que debían frenar si querían pasar de ronda en la Champions League. "Marca el ritmo y lleva las riendas del juego", expresó el primero, mientras que el segundo, que le tuvo a sus órdenes en el Bayern, halagó: "Mueve al Real Madrid de la manera en la que solo Toni Kroos puede hacerlo". Ninguno consiguió detenerle y los blancos están en la final de la máxima competición continental.
El único que ha frenado al alemán ha sido el propio Kroos. Renunció a la selección para centrarse en su club y ahora cuelga las botas en una de sus mejores temporadas porque "quiere acabar su carrera a nivel altísimo". El Real Madrid, que desde 2014 solo ha jugado un 6% de los minutos sin Kroos o Modric, debe ahora pensar en cómo restructurar esa línea de creación sin el alemán.
Esta temporada los blancos sólo han disputado cuatro encuentros con ambos ausentes en el once inicial, tres de liga y uno de Copa del Rey. Camavinga fue el que ocupó su posición ante: Athletic (jornada 1), Celta (jornada 3) y Las Palmas (jornada 7). Mientras que a Dani Ceballos le tocó hacerlo frente al Arandina en tercera ronda del torneo del KO. El Madrid ganó los cuatro encuentros.
Así, Modric es el sustituto natural ante la ausencia del 8, pero el croata, aunque más cerca, aún no ha firmado la renovación para el próximo curso. Además, sus años, 39 en septiembre, hacen que su capacidad física no le dé para disputar una temporada entera jugando de media dos partidos a la semana.
Con Ceballos con pie y medio fuera del club, entre Camavinga, Valverde y Tchouameni deberán intentar suplir al alemán en ese rol de inicio del juego blanco, con el primero como el principal elegido por Ancelotti, al menos esta temporada. Y con la posibilidad también de que los minutos de Arda Güler, que tan buen rendimiento ha dado a final de este año, crezcan ante esta ausencia.
Aunque otra opción para el italiano podría ser recuperar la posición natural de Jude Bellingham, en la que jugaba en el Borussia Dortmund, y retrasarle hacia la zona de creación. No obstante, se perdería esa capacidad de llegada que el inglés ha mostrado este año y con la que ha llegado a disputar el premio Pichichi hasta la penúltima jornada con 19 goles.
La otra solución madridista pasa por sondear el mercado europeo, aunque las opciones existentes no son exactamente iguales a las características que tenía el germano. Igualmente, parece que entre los planes del club blanco para este verano no se contemple ninguna incorporación para esta posición.
Candidatos en Europa
Por proximidad geográfica hablaríamos de Florian Wirtz, el centrocampista del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, como uno de los posibles nombres que podrían ocupar el trono del alemán. Aunque el joven de 21 años es más ofensivo, Kroos en sus inicios también se situaba más cerca de la portería contraria, tiene las cualidades y la visión de juego para adaptarse a ese rol. El 10 del Leverkusen ha anotado 18 tantos y ha dado 20 asistencias esta temporada.
Otro nombre a tener en cuenta es el del italiano Nicolò Barella, centrocampista del Inter de Milán y con características técnicas más parecidas a Kroos. Barella es un jugador de 27 años, ya contrastado, cuya edad no cuadra demasiado en la política blanca de fichajes, pero su rendimiento como interista no deja dudas respecto al nivel de jugador que es.
Por último, se podría mencionar a Maxence Caqueret, ya en el radar blanco hace algunas temporadas. El futbolista de 24 años, que milita en el Lyon, es una de las grandes promesas del fútbol francés y su juego también es parecido al del germano.
La carrera de un futbolista es un vaivén de emociones y la de Raúl García (Zizur Mayor, 1986) ha tenido de todo. No sólo por su periodo en la élite, 20 temporadas en primera y tercer jugador con más partidos en LaLiga (602) después de Zubizarreta y Joaquín (622), sino por el temperamento del jugador. "No busco ser un espejo para nadie, pero esas cifras son porque he sido muy meticuloso", explica a EL MUNDO en un encuentro con periodistas internacionales organizado por LaLiga.
Uno de esos buenos momentos fue un 17 de mayo de 2013. No fue el del Centenariazo, pero casi. Llevaba el Atlético de Madrid 14 años sin ganar al Real Madrid cuando lo hizo a domicilio en una final de Copa del Rey histórica con goles de Diego Costa y aquel cabezazo de Miranda al primer palo para silenciar a la parroquia blanca. "Desde que llegó el Cholo se volvió a ganar y creció esa rivalidad para volver a competir por lo mismo. Uno de los momentos más especiales fue esa Copa del Rey en el Bernabéu, fue muy especial y el inicio de una época que todavía dura", rememora Raúl García.
El malo, afortunadamente para Raúl García, sólo lo tuvo que vivir una vez porque se repetiría un par de años después. Fue aquella final de Champions League en Lisboa en 2014 que tuvieron ganada hasta el mítico minuto 93. "El tema mental y emocional en estos partidos es muy importante. De estar en una situación que vienes con una racha negativa o positiva todo puede cambiar en el primer momento de partido con cualquier cosa que ocurra", valoraba García y la respuesta traía la mente aquella prórroga en la que el Atlético pareció rendirse ante el empuje blanco.
Una característica, por cierto, que no puede estar más alejada no sólo de Raúl García, sino también del capitán del barco, Diego Simeone, del que el navarro guarda un grato recuerdo. "La palabra calma o tranquilidad no existe, es muy pasional y vive su trabajo al 200%. Es inteligente porque tampoco hay que motivar al jugador en partidos de este nivel y él sabe cómo llegar al jugador en estas circunstancias", comentaba.
Así estará Simeone en los momentos previos a un derbi en el que, a juicio de García, conseguirá sacar a sus jugadores "un punto extra" para poder afrontar el duelo ante un Real Madrid que llega con una gran plantilla aunque sin la presencia de Mbappé, lesionado en el muslo. "Yo siempre he querido jugar contra grandes equipos que han tenido grandes jugadores. Es una motivación enfrentarse a ellos, no solo a Cristiano en mi época sino que cuentan con otra ocho o nueve estrellas mundiales. Es un extra poder ganarles porque no es fácil y cuando lo consigues te llevas una satisfacción muy grande".
Jugadores vs equipo
Raúl García confía en la capacidad del grupo frente a las individualidades y cree que el Madrid está echando de menos, y es normal que ocurra por la calidad del jugador, a Toni Kroos. Aunque es consciente de que su potencial ofensivo arriba, especialmente con los tres brasileños debido a la ausencia de Mbappé, es lo más preocupante de los blancos el domingo.
Por la parte rojiblanca, confía en que sea Koke, su amigo, el que imponga su juego en el Metropolitano ayudado por la creatividad de Griezmann, la garra de Gallagher, "que ha caído de pie", y el gol de Julián Álvarez. "Me cuesta no ver un equipo en el que no encaje Julián. Tiene unas condiciones increíbles, tiene hambre y ha llegado al lugar idóneo para sacar todo lo que tiene. Se le va a exigir, pero se le ve poco a poco más cómodo y terminará siendo el que conocemos y le dará mucho al Atlético", afirma.
Se suele decir, y más entre las incorporaciones jóvenes del Atlético de Madrid, que no hay continuidad sin hacer la mili con Simeone. Pocos son los futbolistas que han encajado en el once rojiblanco sin pasar un periodo de adaptación saliendo desde el banquillo.
No se libra ni siquiera Griezmann, la gran estrella y leyenda rojiblanca. Cuando fichó procedente de la Real Sociedad en la temporada 2014/15, apenas completó tres partidos en las primeras 30 jornadas, luego ya fue difícil sacarlo del campo.
Hay excepciones, claro, y Samuel Lino (Santo André, 1999) es una de ellas. El brasileño es el décimo jugador más utilizado por el Cholo por delante, por ejemplo de veteranos como Savic, Saúl o Giménez. Aunque el primer año de su fichaje saliera cedido al Valencia, la salida de Carrasco, le abrió las puertas del equipo y sus buenas actuaciones, la de la titularidad. Ahora, ya es un fijo en el once de Diego Simeone.
¿Qué ha hecho para convencer al Cholo?
Trabajar, pelear y buscar mi espacio dentro del grupo y sólo puedo agradecer al míster por la confianza que me ha dado. Toca seguir dando todo de mí para seguir jugando.
A principio de temporada, parecía destinado a turnarse con Riquelme.
El mister nos da confianza. Riquelme también es un gran jugador, de mucha calidad y me gusta coincidir con él dentro del campo. Creo que van a venir más oportunidades de jugar juntos y espero que las cosas salgan bien.
¿Cómo ha sido el camino de la favela de Sao Bernardo a los cuartos de una Champions League?
Es una evolución muy grande en estos últimos años y me hace mucha ilusión estar aquí. Estar en cuartos de Champions es una locura, pero una locura buena entre todo lo que me ha pasado y soy muy afortunado de estar aquí.
¿Qué opciones ven?
Va a ser muy difícil, pero estamos preparados y confiados de que vamos a hacer un gran partido contra un gran rival.
Volviendo a Sao Bernardo, ¿qué recuerdos tiene de esa época?
Calle, amigos, fútbol... disfrutando sin responsabilidades.
Allí quería ser Ronaldo y hoy se parece más a Roberto Carlos.
No chuto tan fuerte (risas). Pero quizás sea por la posición de carrilero, lateral y extremo... de todo.
A usted le costó empezar y se tuvo que marchar a Portugal, ¿cómo recuerda sus inicios?
Fue todo nuevo pero muy bueno para mí. Salí de mi ciudad, de mi casa, de mi zona de confort para poder evolucionar a nivel personal, para convertirme en hombre y también progresar como jugador. La escuela portuguesa es muy buena y fue muy importante para mí porque ahí el fútbol es muy rico tácticamente, muy fuerte. Me sirvió para aprender. Es un buen país, un buen campeonato, para empezar en Europa.
¿Hubo algún momento en que pensó que no lo conseguiría?
Nunca pensé que estaría aquí un día y tampoco lo contrario. Solo dejé que las cosas fueran pasando. Pensé solo en disfrutar. Si soy bueno y puedo estar en un equipo grande, top, pero si me quedo jugando en mi ciudad, también bien. Y eso es lo mejor que he hecho, porque yo creo que disfrutar del fútbol te acaba trayendo cosas buenas.
Influencias
¿Cuánto ha influido Dios en la suerte que has tenido?
En todo. Si no fuese por Dios, no estaría aquí hoy.
También le han ayudado e influido mucho sus padres.
Primero siempre Dios y después la familia. Mis padres fueron muy importantes para mí en todos los aspectos. Mi madre como apoyo, para hablar, aunque era dura. Mi padre también era duro, pero me llevaba a todas partes a jugar. Mi familia fue fundamental en mi desarrollo. Cuando hablo con mi padre me sigue analizando cada partido que juego.
Sus padres se separaron cuando era pequeño y otro amigo que se tuvo que separar de usted fue Joao Félix.
Estuvimos mucho juntos en pretemporada, pero a mi el grupo me ha acogido muy bien. Soy amigo de todos, aunque Joao era una gran persona también. No pasa nada porque se fuera. Está en el Barcelona y le deseamos lo mejor. Seguimos siendo amigos. Después del último partido, nos quedamos a charlar un rato.
Y para terminar, ¿qué me dice de Simeone?
Buenas sensaciones con él, siempre intenta ayudar a los jugadores a evolucionar. Está mucho con los futbolistas para hablar de sus defectos, de sus cualidades, de qué hacer y qué no. Es bueno que además de ganar, quiera que sus jugadores evolucionen y den lo mejor de sí tanto en partidos como en entrenamientos.