El equipo blanco no ha ejercido su derecho de tanteo y el pívot vuela al Barça con un contrato de tres años
Willy en un partido de los Pelicans.
Casi, como si estuviera contando los segundos. Apenas dos minutos después de que terminara el día 12 de julio, el Barça confirmó el fichaje de Willy Hernangómez. El Real Madrid, finalmente, decidió no ejercer su derecho de tanteo sobre el pívot madrileño, quien firmará un contrato por tres temporadas con el club barcelonista y se convierte así en el primer gran fichaje del baloncesto azulgrana tras las despedidas de Sarunas Jasikevicius, Kyle Kuric, Sertac Sanli, un anunciado adiós de Nikola Mirotic que se resiste por ahora en convertirse en una realidad palpable y la llegada, procedente del Joventut, de Joel Parra.
La marcha de Sertac Sanli del Palau dejaba al checo Jan Vesely como la gran referencia en la pintura y al joven y más que prometedor James Nnaji como su alternativa más clara. Las ganas del nigeriano por dar el salto a la NBA, tan elevadas que podrían llevarlo a tratar de probar fortuna este mismo año, han prácticamente obligado al Barça a echar el resto por un Willy Hernangómez que, a sus 29 años, llega a la entidad como agente libre tras desvincularse de los Pelicans y que da un plus de calidad al juego interior barcelonista. Aunque no hay cifras oficiales sobre cuáles serán sus ingresos como azulgrana, en el entorno del Palau se ha hablado con insistencia de unas cifras que podrían rondar los tres millones de euros por temporada.
Willy, además, podría no ser el único Hernangómez que acabe fichando por el Barça este verano. De hecho, la posibilidad de coincidir en el equipo con su hermano Juancho sería también uno de los factores que le han llevado a decidirse por aceptar la oferta azulgrana. Por el momento, el ex jugador de los Raptors no parece estar demasiado por la labor de escucharla, dado que su prioridad, a todas luces, es seguir en la NBA. Con todo, si no llegara ninguna propuesta que le convenciera realmente, la opción del Barça parece ser la que cuenta con más opciones de lograr su regreso a Europa. Con la ventaja, en este caso, de que ningún equipo de la ACB tiene derecho de tanto, ya que el jugador se marchó a Estados Unidos tras finalizar su etapa en Estudiantes.
Cuando Timothy Neocartes Shorts II (Irvine, EEUU, 1997) terminó su periplo High School recibió las mismas ofertas para jugar en la NCAA que el número que luce en su espalda a modo de acicate: cero. Unos años después, reina en la Euroliga en su temporada de rookie. Un impacto como no se recordaba para alguien que aprendió a avanzar bajo sospecha, derribando prejuicios a base de talento. "Demasiado bajito", escuchaba recurrentemente quien este miércoles amenaza al Real Madrid (21.00 h.) a los mandos del Paris Basketball. El equipo revelación, también debutante en la máxima competición continental, sigue en la puja por los puestos de playoffs: se presenta en el Palacio con el mismo balance que los blancos a falta de dos jornadas para el final de la temporada regular.
Sólo Vezenkov presume de mejores números estadísticos que TJ Short, un base eléctrico de 1,75 metros que promedia 18,8 puntos y 6,8 asistencias, con un 42,1% en triples. La semana pasada, en una exhibición antológica en un partido clave para los de Tiago Splitter, el californiano firmó la noche de su vida: 20 puntos, nueve rebotes y 14 asistencias para ganar al Panathinaikos en el OAKA. "Con 20.000 personas gritándote... Fue una noche dulce que recordaré el resto de mi carrera, especialmente si la historia tiene un final feliz. Después de las dolorosas derrotas en Kaunas y Estambul sobre la bocina, podríamos haber perdido la moral. Pero este equipo nunca se rinde. Estamos hechos de esa materia. Y continuaremos hasta el final", desafía un jugador que acaba contrato en unas semanas y al que ya se rifan los mejores de Europa (es internacional con Macedonia del Norte desde 2022, otra ventaja de su pasaporte).
Hace tiempo que ser bajito dejó de ser un hándicap en el baloncesto de elite. Muggsy Bogues, Spud Webb, Nate Robinson, Lentejita Boykins..., aun haciéndose un nombre en la NBA, fueron rarezas lejanas. Otros como Isaiah Thomas realmente rompieron el molde. Shorts, cuya madre mide 1,40 metros (y su apellido de soltera es Long, con lo que ahora se le conoce como Darlene Long-Shorts), tomó como ejemplos a Chris Paul en la NBA y Tyrece Rice y Facundo Campazzo -con el que hoy se enfrentará por primera vez en su carrera (el estadounidense fue baja en el partido de ida en París)-, en esa Europa en la que tuvo que refugiarse tras terminar sus dos años en la Universidad de California en Davis, donde coincidió con el baskonista Chima Moneke (uno de sus mejores amigos) y con el que iba a ser el primero de sus dos grandes mentores.
Jim Les fue un base tirador de principios de los 90 en la NBA y fue quien primero vio algo diferente en TJ, que así se llama porque su hermana, dos años mayor, "era incapaz de pronunciar Timothy". Brilló en los Aggies, pero no había sitio para él en la NBA, así que no dudó en hacer las maletas y comenzar su aventura 'overseas' en Letonia (Ventpils). Temporada a temporada cambió de equipo, coleccionando MVP's. Del Hamburg Towers al Crailsheim Merlins, hasta que en el Telekom Bonn su carrera iba a experimentar el impulso definitivo.
TJ Shorts, durante el partido de la semana pasada en el OAKA de Atenas.PETE ANDREOUEFE
Allí coincidió con el segundo hombre clave, el recién nombrado entrenador principal de los Grizzlies, Tuomas Iisalo. Con el finés y su peculiar estilo ofensivo conquistó la Basketball Champions League de 2023, siendo MVP del torneo y de la Final Four. También fue nombrado mejor jugador de la Bundesliga. Cuando llegaron las ofertas, el californiano prefirió seguir de la mano de su entrenador, ambos camino de París. "Tenemos que remontarnos a cuando me fichó. Pronto me dio su confianza y me permitió ser yo mismo en la cancha. Esta es la razón principal por la que lo seguí, sabiendo que París tendría grandes ambiciones, con la Euroliga en la mira", ha reconocido.
El curso pasado repitió hoja de ruta con los parisinos en el Eurocup: campeón (22 victorias y una derrota) y MVP. Y, si había alguna duda de su impacto en la Euroliga en su debut, ahí sus números y la trayectoria de su equipo (llegó a liderar la competición), ahora con Tiago Splitter en el banquillo. "Es un jugador determinante en la Euroliga, pero si solo me fijo en él sería un error de principiante. Están demostrando que son capaces de jugar en equipo y Splitter se lo ha sabido transmitir", admitía Chus Mateo en la previa.
"De pequeño, siempre era lo mismo: 'Es demasiado pequeño'. Pero sé de lo que soy capaz en la cancha y tengo plena confianza en mí mismo. Mi altura puede ser una desventaja, sobre todo en defensa, pero siempre he jugado contra jugadores más altos, así que sé cómo hacerlo: pasarlos al primer paso, rodearlos para robarles el balón, etc...", reflexionaba Shorts en una entrevista reciente.
Dura jornada de la Euroliga para el Panathinaikos pese a su cómoda victoria en casa frente al Baskonia (104-69). El choque, plácido en lo deportivo, se convirtió en un drama sanitario cuando el pívot francés de los atenienses pisó mal y sufrió una terrible lesión que dejó helados a aficionados y compañeros.
La cara del jugador de 29 años lo decía todo. Su pierna derecha, doblada en una antinatural postura a la altura del tobillo no daba lugar a engaño: fractura de peroné. Una lesión de larga duración que tendrá fuera de los terrenos de juego a uno de los pilares del actual campeón de la competición.
La terrible lesión de Lessort fue el detonante, pero la cosa no acabó ahí. Varios aficionados, el número difiere dependiendo a quien le preguntes, sufrieron desmayos en las gradas y tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos del pabellón y de los equipos. Incluso a un seguidor le dio un ataque al corazón
El caos fue descrito tras el partido por el entrenados del Panathinaikos, Ergin Ataman. "Nueve personas se desmayaron y otra sufrió un ataque al corazón. No encontraban suficientes ambulancias para mandar a la gente al hospital", afirmó en rueda de prensa.
Finalizado el encuentro, los jugadores locales y los visitantes hicieron un círculo en el centro de la cancha para rezar por Lessort y desearle una pronta recuperación. Una vez duchados, toda la plantilla visitó al francés en el hospital demostrando que son una gran piña.
En lo deportivo, el duelo se rompió en el primer cuarto. El 33-12 del primer asalto fue fundamental en el desenlace de un choque en el que el Baskonia no encontró el acierto que requería el duelo, pero tampoco pudo contener a su rival en el tiro exterior.
Las 16 pérdidas de los vascos fueron un lastre, pues el Panathinaikos sumó 27 puntos de esos errores con Kendrick Nunn como estilete con 26 puntos.