La Ertzaintza ha detenido a cinco personas tras los incidentes registrados en Anoeta durante partido de la Europa League entre la Real Sociedad y el Anderlecht, en la zona ocupada por los aficionados del equipo belga.
Según ha informado el departamento vasco de Seguridad, una de las personas ha sido detenida por atentado a la autoridad, otra por desórdenes públicos y la tercera por daños y resistencia a los agentes. Las otras dos han sido detenidas posteriormente en relación con los incidentes registrados en la grada visitante.
Durante la primera primera parte, ultras del Arderlecht han logrado romper la valla de seguridad instalada y han arrojado objetos, entre ellos asientos, a la grada inferior, desde donde presenciaban el encuentro los aficionados de la Real Sociedad. “Lo que ha pasado en la grada nos ha sacado del partido”, admitió Mikel Oyarzabal, capitán txuri urdin.
Unos minutos de parón
Muchos socios tuvieron que abandonar esa zona para evitar ser golpeados y el árbitro ha detenido durante escasos minutos el encuentro. Sin embargo, el holandés Pol van Boekel pero no ha llegado a suspenderlo, pese a las insistentes reclamaciones de los jugadores de la Real Sociedad.
“La UEFA tiene que dar un paso adelante y no ha hecho nada. Se lo estábamos diciendo al director del partido porque estaban cayendo cosas incluso al césped. Les dijimos que tenían que parar y no hicieron nada”, añadió Oyarzabal, que saltó al césped en el minuto 74 en sustitución de Orri Óskarsson.
A estas críticas se sumó Imanol Alguacil, decepcionado por la segunda jornada sin conocer la victoria, tras el 1-1 inaugural ante el Niza. “Evidentemente, si corría peligro nuestra afición, entiendo que se debería haber parado el partido”, aseguró el técnico donostiarra. “Soy consciente de que hoy mucha gente no ha venido por miedo. Estábamos advertidos y no sé quién, pero tienen que cortar y dejar de vender entradas a esta gente”, concluyó el preparador blanquiazul.
El Candidatos de Toronto es un drama fascinante desde el primer minuto, pero los sucesos ocurridos fuera de los tableros han engrandecido el espectáculo, que ahora tiene tintes de thriller y de comedia. Mezclar tantos géneros es complicado y la cosa podría acabar mal, pero de momento podemos sentarnos cada noche a disfrutar las partidas y comprobar por dónde salen los Firouzja.
Ayer se subió al escenario el padre de Alireza, invitado sorpresa de la parte menos seria de esta película. Lo más inesperado de todo es que no solo habló de la polémica que mantuvo su hijo con el árbitro principal en la jornada anterior. Tras la queja de otro jugador, el juez reprendió al gran maestro nacido en Irán por lo ruidosos que eran sus paseos. Como respuesta, Firouzja denunció al árbitro y pidió que lo sancionen por distraerlo durante la partida.
Para saber más
En las reacciones al suceso predomina la prudencia y hay división de opiniones. Unos piensan que Marghetis se extralimitó y otros que hizo bien para proteger a los otros participantes por el exceso de ruido. Con este trasfondo, Hamidreza Firuozja afirmó ayer que su hijo está pensando seriamente en dejar el ajedrez, por el acoso recibido, y que él mismo pensaba llamar a la policía si la organización no le permite estar en el balcón desde el que pueden verse las partidas todo el tiempo que quiera.
En Toronto, como ya pasó en Madrid, la sala de juego no está pensada para albergar a un gran número de espectadores. Las partidas se retransmiten por internet y la FIDE cree que con eso es suficiente, pero luego entre el público local, los invitados VIP y los allegados a los ajedrecistas hay tortas para estar en primera fila. En el Great Hall de la ciudad canadiense se ha resuelto con un puesto de observación peculiar: el balcón del piso superior. En realidad, desde allí no se ven los rostros de los jugadores y para seguir las partidas hace falta un catalejo, pero al menos está todo a la vista.
"¿Cómo voy a hacer trampas?"
Para resolver la falta de espacio, se limita el tiempo que pueden pasar los familiares y miembros de los equipos a 15 minutos, también con la excusa de luchar contra las trampas. El padre de Alireza se quejaba indignado: «No sé jugar al ajedrez y ni siquiera sé colocar las piezas. ¿Cómo voy a hacer trampas?». Mientras, abría su chaqueta para demostrar que no llevaba nada escondido.
Hikaru Nakamura fue el otro triunfador de la jornada y se coloca a medio punto de los líderesMARIA EMELIANOVA | FIDE
Anoche, Firouzja hijo volvió a perder y ya está del todo descartado para el triunfo final. Algún comentarista deslizó la idea de que por su cabeza podría incluso pasar (o pasear, en su caso) la idea de abandonar hoy mismo el torneo. Es imposible que el francés tenga ahora la cabeza fría y, antes de estos incidentes, ya había dicho que su prioridad actual son los estudios de moda, que lo han mantenido alejado de los tableros durante demasiado tiempo. Alireza regresó a la alta competición cuando vio que podría clasificarse para el Candidatos, lo que consiguió, por otro lado, en un torneo algo turbio organizado con la idea evidente de facilitarle los puntos Elo necesarios.
En la décima jornada, su verdugo fue Fabiano Caruana, número dos del mundo, que gracias a esta victoria se acerca a medio punto de la cabeza, a falta de cuatro partidas. El otro estadounidense, Hikaru Nakamura (3 del mundo), venció a Nijat Abasov, con lo que se une a su compatriota y también tiene a tiro a los dos líderes, el ruso Ian Nepomniachtchi y el indio Gukesh D, la gran sensación del torneo con 17 años.
Torneo femenino
En el Candidatos femenino, la jornada no fue más cuerda. Varias partidas fueron muy emocionantes, gracias en gran medida a la profusión de errores y regalos mutuos, que provocaron constantes alternativas en las partidas. El duelo más relevante fue el que sostuvieron la rusa Aleksandra Goryachkina y la china Lei Tingjie, quien ganó con negras y prolonga una racha excepcional, con cuatro victorias en las últimas cinco partidas.
Más errores aún hubo en la partida entre Salimova y Vaishali. Las máquinas ofrecían una evaluación distinta cada cinco minutos y los humanos apenas entendían qué estaba ocurriendo en ese tablero. Al final, la india se hizo con una victoria que alivia algo sus penurias, aunque sigue en última posición.
En cabeza se han colocado las dos jugadoras chinas, Lei y Tan Zhong Yi, que mantienen la distancia casi confortable de un punto frente a las rusas Goryachkina y Cateryna Lagno. La tensión irá en aumento y la que mantenga el espíritu más templado tendrá medio campeonato ganado.
Este martes es jornada de descanso, antes de las cuatro últimas partidas. Si hubiera empates al final del torneo, el día 23 se celebrarían partidas rápidas de desempate.
Georgia y República Checa firmaron tablas en un duelo en el que los primeros se encomendaron sobre todo al acierto bajo los palos de Mamardashvili y lograron adelantarse en el añadido del primer tiempo con un penalti convertido por Mikautadze. Schick, en el primer cuarto de hora de la segunda parte, sería el encargado de anotar el gol que sellaría un empate que deja las opciones de ambos combinados por ahora en el aire. [Narración y estadísticas, 1-1]
De nada le sirvió inicialmente a la República Checa llegar con peligro al área de una Georgia a la que, en apariencia, le bastaba con mantenerse con vida gracias a su portero. Y, cuando Hlozek envió el balón a la red tras un primer rechace del meta, fue el VAR el que invalidó el tanto por mano. Otra mano, de Hranac, en el otro extremo del campo, acabaría también tras intervención del videoarbitraje por convertirse en un penalti, transformado por Mikautadze, que les permitió a los georgianos ponerse por delante en el marcador en el tiempo añadido. Y con 1-0 se llegaría al descanso, gracias, eso sí, a otra buena intervención de su arquero.
En arranque del segundo tiempo, Georgia se permitió dejar gran parte de la iniciativa en manos de la República Checa para buscar sin prisa alguna la opción de ampliar distancias. Una apuesta arriesgada que acabó por cristalizar en un a la postre afortunado remate de Schick tras saque de córner que se convirtió en el 1-1 con 30 minutos de tiempo reglamentario aún por delante en el crono.
Rozaron, además, los checos el 1-2 muy poco después y eso provocó que los georgianos se espabilaran. Ni unos ni otros, a pesar del arreón final checo y la postrera contra georgiana, lograron que el marcador volviera a moverse.