Durante un encuentro de Tercera Andaluza Juvenil de Córdoba entre el CD Priego CF y la UD Las Palmeras B, la árbitra del partido ha sido agredida, tanto física como verbalmente, por parte de varios de los jugadores del equipo visitante.
El partido, que fue subiendo de intensidad conforme pasaron los minutos, se descontroló en su recta final cuando, en el minuto 83, la colegiada mostró una tarjeta amarilla al conjunto local, así como tres expulsiones al equipo visitante, una de ellas producida cuando el encuentro ya había finalizado.
Esta última expulsión es en la que se produjo la agresión, puesto que el futbolista de la UD Las Palmeras B se dirigió a la árbitra con insultos e increpándole con frases como “no tienes vergüenza”, “has conseguido lo que querías” y “eres una perra”.
Tras ello, este mismo jugador, según relata la propia árbitra, le golpeó “con su mano en la zona del hombro izquierdo en dos ocasiones con uso de fuerza excesiva”, matizando que tuvo que acudir a urgencias y que, además de todo ello, cuando ya se dirigía hacia los vestuarios, otro jugador se le acercó “con la cara desencajada y cerrando los puños mostrando agresividad”, llegando a insultarla en varias ocasiones.
La rencilla también ha incluido en el acta del partido que el delegado del equipo visitante, que también fue expulsado, se dirigió hacia su vestuario al término del partido y, estando ella en el interior, “aporrea la puerta” y la amenaza con los siguientes términos: “Voy a entrar, sinvergüenza, vas a tener que salir y te lo explico”.
Por otro lado, también matiza que hubo varios insultos, una vez finalizado el partido, por parte de varios aficionados del equipo visitante, que vociferaron términos como “eres una sinvergüenza” o “ha tenido que venir una mujer a pitar”, además de amenazarla con expresiones como “vas a tener que salir por la puerta” y “te voy a matar”.
El acta del partido también explica que, incluso, lograron abrir la puerta del vestuario tras la finalización del partido, ante lo que “un jugador del equipo visitante golpea con su puño en la cara del delegado de campo” y otro le “empuja por la espalda con uso de fuerza excesiva”, tras lo cual, la árbitra contactó tanto con la Policía Local como con la Guardia Civil.
Mientras aguardaba la llegada de las autoridades, se produjo una “trifulca en la zona de los vestuarios entre jugadores y el delegado del equipo visitante contra miembros del club local, debido a que se ponen delante de la puerta del vestuario”, intentando proteger a la colegiada en todo momento de los intentos de agresión por parte de jugadores del equipo visitante, que le vociferaban términos como “sal perra”, “sinvergüenza”, “te voy a matar”, “desgraciada” y “vamos a por ti y a por tu familia”.