Los clubes apuestan por modificar el actual convenio y que pasen a depender de la patronal tras el estallido del ‘caso Negreira’. Pero los colegiados, que se sienten solos, señalados y bajo presión, se rebelan: “No quieren independencia, quieren controlarnos”
El árbitro Martínez Munuera.EFE
Una ronda de llamadas y mensajes con algunos clubes de Primera y Segunda División, a cuenta del intento de LaLiga de cambiar el modelo arbitral a raíz del caso Negreira, descubre una doble paradoja: Paradoja número 1: la gran mayoría de los equipos d
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Contrariamente a lo que suele ser habitual, la selección durmió en Londres la noche del viernes. Lejos de salir corriendo hacia el aeropuerto, Luis de la Fuente y sus chicos descansaron en el hotel, a apenas unos minutos del campo, y regresarron este sábado por la mañana para luego entrenar, a puerta abierta, por la tarde. En Las Rozas hubo gente, sí, pero no mucha, pues esta selección, como casi todas, pasa bastante desapercibida en los periodos de entreguerras, es decir, en los periodos que pasan entre un gran campeonato y otro. Los focos sólo volverán sobre el equipo patrio el próximo 15 de junio, cuando debute en la Eurocopa contra Croacia. Si acaso, pasado mañana la gente, desde sus lugares de vacaciones, verá el amistoso contra Brasil porque es Brasil, y porque es Vinicius, y todo lo que rodea al madridista interesa. Pero poco más. De la prueba ante Colombia ya nadie se acuerda.
Nunca mejor escrito lo de «prueba». Guardada la columna vertebral (Unai Simón, Carvajal, Le Normand, Rodrigo, Olmo o Morata) para el choque del próximo martes, la intención única de jugar contra Colombia era ver jugadores. Tal es así que, de los 17 futbolistas que tuvieron algún minuto en Stratford, apenas dos o tres serán titulares en la Eurocopa. La alineación fue: Raya, Pedro Porro, Vivian, Laporte, Grimaldo, Zubimendi, Merino, Sarabia, Oyarzabal, Joselu y Gerard Moreno. Después salieron Remiro, Baena, Morata, Nico Williams, Cubarsí y Lamine Yamal. De todos ellos, apenas Laporte, Merino, Morata y, si acaso, Lamine Yamal, se pueden intuir en un once tipo para iniciar el torneo a disputar en Alemania.
«Claro que no nos gusta perder, pero tenemos varias conclusiones positivas», decía el seleccionador en la sala de prensa del Olímpico de Londres. Las conclusiones positivas apuntan a Vivian, el central del Athletic de Bilbao, bien valorado por el cuerpo técnico pese a confiarse en el balón que le arrebató Luis Díaz y que terminó en el gol colombiano. También quedaron en buen lugar Gerard Moreno, que aporta muchísimas soluciones al equipo en la parte ofensiva, y Grimaldo, dueño, un recién llegado, de todas las jugadas a balón parado, incluyendo los córners por los dos perfiles y la falta directa al borde del área en los estertores del patido. No tan buenas resultaron las pruebas con Pedro Porro o Sarabia, algo coja su banda durante toda la noche.
La duda
En cuanto a Cubarsí, que apenas dispuso de 10 minutos, las conclusiones las está sacando De la Fuente de los entrenamientos. Ya tenía la idea de no exponer demasiado al chico en esta ventana, y de hecho no parece probable que sea titular ante Brasil, un equipo con potencial suficiente para desbordar a cualquier central. Hay quien opina dentro de la concentración que sería exponer demasiado a un chico tan joven. Ocurre que De la Fuente ha demostrado ya que puede poner a jugar a un niño sin problemas. El chaval, el segundo más joven en debutar con la absoluta después de Lamine Yamal, ha caído de pie en Las Rozas por su timidez y modestia, cuestión nada desdeñable en un cuerpo técnico que valora, y mucho, las cualidades humanas que permitan a un jugador integrarse en un grupo sin grandes egos.
En el Bernabéu, pues, pasado mañana, se verá una versión mucho más reconocible de la selección, algo similar al bloque que, en un año, ha construido Luis de la Fuente y que volvió a perder el viernes, 12 meses después de haberlo hecho en Glasgow, en marzo de 2023, en el camino hacia la Eurocopa. Dos tropiezos en 11 partidos dirigidos. No se le da bien al entrenador viajar al Reino Unido.
Luis de la Fuente ha dirigido 15 partidos a la selección absoluta, a la que cogió inmediatamente después de que fuera expulsada de mala manera por Marruecos en el Mundial de Qatar luego de ofrecer 1.019 pases (un 77% de posesión) para un solo disparo a puerta. En ese invierno de 2022, mes de diciembre, se hizo famosa la necesidad de un Plan B, que en realidad no era otra cosa que buscar deshacerse, definitivamente, de una herencia tan bonita como nociva. La gran España, la España de la posesión, del tiqui-taca, la campeona en 2008, 2010 y 2012, había muerto hacía tiempo, pero nadie parecía haberse dado cuenta. De la Fuente ha sido el encargado de enterrarla.
La selección, cómodamente instalada en su lujosísimo hotel, escuchando a Estopa, La Oreja de Van Gogh y El Barrio cuando llegan a su campo de entrenamiento, ya no se detiene en cuestiones estéticas. Es más, repasando esos 15 partidos de De la Fuente, se descubre un dato. Quitando a la debilísima Chipre, el partido donde más posesión acumuló este equipo (77%) fue en la derrota, muy dolorosa, ante Escocia, en marzo de 2023. Es más, algunas de las mejores victorias (que son 12), algunas de las más importantes, presentan porcentajes discretos: un 62% ante Italia en la semifinal de la Liga de Naciones, un 54% en la final contra Croacia o un 59% en la victoria sobre Noruega en Oslo (59%).
"La vida pasa, y no podemos estar pensando siempre en lo que hicimos en aquellos años", sostiene Rodri, el arquitecto de este nuevo proyecto. "Luis quiere una selección más vertical, más contundente en las áreas, aunque una cosa es decirlo y otra implementarlo. Le da dos o tres pautas al jugador, no más, nos da mucha libertad", explica el mediocentro del City, que no lo dice, pero sí lo piensa: todo lo contrario que Luis Enrique, que dejaba mucho menos espacio a la improvisación del futbolista. El asturiano, por cierto, solía decir: "Nosotros jugamos siempre igual". Pues bien, esto también ha cambiado: "El juego cambia a nivel táctico dependiendo del rival, dependiendo del partido", explica Oyarzabal.
Lamine Yamal, en una sesión.AP
No confundir con no tener una idea. "Al revés, tenemos una idea clara, y no todas las selecciones tienen eso, así que hay que aprovecharlo. Intentamos dominar cada partido a través de la posesión y, sin pelota, hacemos una gran presión tras pérdida", analiza Grimaldo, uno de los nuevos. Posesión sí, pero ¿qué tipo de posesión? Intercede en este debate, de nuevo, Rodri. "Es una filosofía parecida, pero es verdad que intentamos ser un poco más verticales, sin tanta posesión. Digamos que queremos la posesión, pero para intentar hacer daño al rival".
¿Y dónde empezó todo? Pues fue en Tiblisi, capital de Georgia, en septiembre del año pasado. De la Fuente empezó con Dani Olmo y Marco Asensio en los extremos, pero ambos se lesionaron, y en el segundo tiempo salieron Nico Williams y Lamine Yamal, que debutaba. El festival terminó 1-7, con los dos chicos hiriendo a una selección no tan débil (de hecho está en la Eurocopa, pues se clasificó en la repesca). Tener esos dos aviones en las bandas ha terminado de empujar a De la Fuente a romper con el pasado. "Muy pocos extremos en Europa pueden igualar a Lamine y Nico, así que tenemos que aprovecharlo", cuenta Oyarzabal.
Otro fútbol
"Nos han venido los dos, con condiciones diferentes a lo que estábamos acostumbrados, y no podemos dejarlo pasar. Tienen regate, velocidad... Es una grandísima ayuda. Para mí, como mediocentro, jugadores que piquen al espacio son fundamentales", insiste Rodri, que ha visto cómo debe modificar sus hábitos respecto al City. "Aquí la clave", cierra Álvaro Morata, el capitán, "es que hay muchísimas soluciones, hay un abanico de tácticas diferentes que nos vendrán bien en los partidos que se complican".
En los alrededores del equipo, las cosas están más claras todavía. "Hace tiempo que no tenemos jugadores para hacer lo que se hacía hace 15 años", cuenta un veterano de Mundiales y Eurocopas, que las ha visto de todos los colores. Existe la impresión en la concentración de España, siempre desde la óptica de los que vivieron aquella época y viven esta, de que nadie ha sido capaz de asumir esa ruptura con la mejor herencia posible. Pero si Xavi, Iniesta, Silva o Cesc ya no existen, y hay futbolistas verdaderamente diferenciales en otro tipo de fútbol como Lamine o Nico Williams (sin olvidar los laterales, Dani Carvajal y Grimaldo), quizá sea el momento de olvidar los complejos. De la Fuente lo sabe.
Este miércoles, nada más conocerse la noticia de que la Guardia Civil estaba dentro de las oficinas de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, un empleado veterano resumía por Whatsapp sus sensaciones: "Estos [los Guardias] son ya como de la familia". El empleado, que ha visto entrar a los agentes varias veces desde 2017, cuando investigaron el caso Villar, ya no se sorprende de nada.
La sensación de interinidad que acompaña a muchos trabajadores de la Federación desde septiembre, cuando Rubiales fue desalojado de su despacho por la FIFA, se incrementó a lo largo del miércoles. La fecha elegida por la Guardia Civil para entrar a recoger documentación coincidía en el tiempo con la reunión de la Comisión Gestora que se debía haber producido ayer a las 16.00 horas, y en la que Pedro Rocha, la persona al mando de la Federación en estos momentos en tanto que presidente de la Gestora, iba a convocar la primera de las dos elecciones a las que se ha visto obligado el organismo.
Rocha también iba a anunciar que él se presentaba a ser el presidente que condujera los destinos de la Ciudad del Fútbol al menos hasta el último trimestre de este año, cuando se producirán otras elecciones, estas ya sí, con Asamblea nueva y nuevos rostros que puedan presentarse, como el de Carlos Herrera.
Sin embargo, esa reunión quedó aplazada a última hora de la mañana por motivos obvios. Los agentes estuvieron en las oficinas hasta última hora de la tarde, y con las detenciones de los directores de los departamentos Jurídico y de Recursos Humanos no parecía lo más recomendable moverse. No conviene olvidar que Pedro Rocha era el vicepresidente económico de la Federación en la época que ahora se investiga.
Este dato no es menor, pues aunque su nombre no aparece en las pesquisas, su vinculación con la época más oscura de Luis Rubiales se hace aún más evidente, dejando en nada sus intentos, durante estos meses, de granjearse el apoyo de todos los estamentos del fútbol, desde el CSD hasta LaLiga presidida por Javier Tebas. Todo lo que ocurra de aquí en adelante es una incógnita, y dependerá mucho del rumbo que tome la investigación del juzgado número 4 de Majadahonda.
El Mundial 2030
El otro foco de atención ayer era la residencia de futbolistas de Las Rozas, situada apenas a 300 metros de las oficinas. Mientras los jugadores entrenaban, el ir y venir de coches de Guardia Civil y agentes volvió a alterar el normal desarrollo del primer equipo, que no gana para sustos, por mucho que Luis de la Fuente trate de aislar al grupo. Es un nuevo episodio que no contribuye de ninguna manera a la preparación de los partidos de mañana ante Colombia y del próximo martes contra Brasil.
Otra arista que también es importante es que, sólo un día antes de ver de nuevo escenas de detenciones y registros en la Federación, tuvo lugar en Portugal la presentación oficial de la candidatura al Mundial 2030, que España encabeza junto a los lusos y a Marruecos. A ellos, a los compañeros de candidatura, no les hizo ni mucha ni poca gracia lo visto ayer. Falta saber si habrá consecuencias.