La selección española viajará a Elche para disputar su partido contra Georgia el sábado, el mismo día del choque, debido a la alerta roja por lluvias extremas que Protección Civil, en previsión de la dana Alice, ha decretado en la provincia de Alicante para los próximos días.
La UEFA ha autorizado este cambio, permitiendo al equipo ofrecer la rueda de prensa previa en Madrid este viernes. La normativa indica que esa comparecencia debe ser en el escenario del partido, en este caso el Martínez Valero, pero ante la alerta, la Federación pidió a UEFA que hiciera una excepción. A última hora de este jueves llegó.
Por la mañana, un mensaje a los móviles advertía a la población de la zona de que evitase en la medida de lo posible los desplazamientos, algo en lo que ha insistido el Ayuntamiento de Elche.
Así las cosas, la selección viajará el mismo día del tercer partido de clasificación para el Mundial 2026. El equipo de De la Fuente es líder con seis puntos tras los dos primeros partidos.
Cuando ya se iba, Luis de la Fuente vio a un periodista quejarse porque no había podido preguntar, e hizo darse la vuelta al responsable de comunicación de UEFA y al de la Federación, ambos con cara de sorpresa. El seleccionador ha estado suelto en la rueda de prensa que ha ofrecido esta tarde en el Allianz Arena, previa a la final de la Nations contra Portugal de este domingo.
Lo primero que hizo fue agradecerle a Cristiano las palabras de elogio que por la mañana había tenido hacia él la estrella portuguesa. "Agradezco sus palabras, cómo no. Pero las palabras de admiración deben ser mías hacia él. Es un ejemplo de todos los valores que son importantes para mí. Trabajo, esfuerzo, perserverancia, constancia...", le devolvió los cumplidos antes de centrarse, ¡sorpresa!, en Lamine Yamal.
"Lamine transmite una calma, una tranquilidad... Os sorprendería verlo. Lo que para otros serían situaciones de máximo estrés, él lo vive desde la naturalidad. Resuelve los inconvenientes, las exigencias de estas situaciones, con una madurez impropia de su edad", ha explicado el seleccionador, que no parece que vaya a hacer cambios en el once respecto a los que jugaron contra Francia a excepción de la entrada de Fabián por Merino.
Corroboró las sensaciones del entrenador Mikel Oyarzabal. "A todo el mundo nos sorprende Lamine, tiene una seguridad en sí mismo que es importante. Hasta ahora le ha tocado vivir todo cosas buenas, y creo que en el proceso seguro que le tocará vivir momentos malos. Eso le hará crecer como jugador y como persona. La gente no es consciente lo que supone ser campeón de Europa con 16-17 años", dijo el delantero de la Real Sociedad.
Volvió también a poner en valor un título como la Liga de Naciones, de la que por cierto su colega en el banquillo de Portugal, Roberto Martínez, ha dicho por la mañana que era la competición más difícil de ganar, más incluso que un Mundial o una Eurocopa. "¿Y como Roberto ha dicho eso ahora sí que le dais importancia no? Lo pensamos muchos profesionales. En esta Final Four estamos cuatro de los cinco mejores equipos de Europa. No hay más que decir", afirmó.
Capítulo aparte mereció el capitán, Morata, que ha perdido foco en esta concentración. "Sigue siendo el mismo líder, independientemente del número de minutos que juegue. Es un jugador muy querido, muy respetado, muy valorado... Habrá momentos que participe más, que participe menos, pero para nosotros es fundamental"
Tener a un menor de edad en el seno de la selección es complejo a nivel burocrático. España tiene a dos. Lamine Yamal (16 años) y Pau Cubarsí (17). Brasil tiene a uno. Endrick (17). En el caso de la Federación española, como todas las instituciones que trabajan con menores de edad, tiene su propio Protocolo para la protección de la Infancia y la Adolescencia. Pero, por empezar con lo más elemental, los responsables de organización de Las Rozas debieron pedirle a los padres de los chicos una autorización firmada para poder viajar a Londres y otra autorización firmada para poder hacerles fotografías y vídeos y poder publicarlos.
Además, todos los que estén en contacto con ellos, empezando por el seleccionador, Luis de la Fuente, deben acreditar que no tienen antecedentes por delitos sexuales, como explicaba Marca la semana pasada. Por ejemplo, el chófer que fue a recogerles al aeropuerto también debió presentar ese certificado. Y, por supuesto, fueron acompañados hasta el mismo avión en Barcelona por un adulto y recogidos por otro, empleados ambos de la compañía aérea, el lunes de la semana pasada, cuando viajaron a Madrid.
Tampoco un adulto, sea cual sea, puede quedarse en una sala a solas con ellos. Si el seleccionador quiere darles instrucciones individuales, ha de haber al menos otro adulto presente. Protocolos similares existen en la Confederación Brasileña de Fútbol, donde el talento precoz es incluso más habitual que en casi cualquier otro fútbol.
Estrellas en el Bernabéu
Esos niños estarán hoy en el imponente nuevo Bernabéu, bajo el influjo de un intento, elogiable, de luchar contra el racismo. Se enfrentan España y Brasil, dos selecciones que apenas se han cruzado nueve veces y que, según de la fuente, «podría ser perfectamente la semifinal o la final de un Mundial». Más allá de la hipérbole del seleccionador, y soslayando, si eso fuera posible, el objeto del choque, el foco bien podría ponerse en estos muchachos, cuya titularidad no está asegurada, pero cuyo concurso en algún momento del partido es seguro. Todos los focos los apuntarán hoy.
Endrick, en el entrenamiento de Brasil.KIKO HUESCAEFE
Por uno, Endrick, el Real Madrid pagó en diciembre de 2022 (entonces tenía 16 años) alrededor de 35 millones, que serán casi el doble si cuando aterrice, el próximo verano, ya convertido en un hombrecito mayor de edad, empieza a cumplir los objetivos que marca el contrato. Por el otro, Lamine Yamal, cuentan en Barcelona que su club, el Barça, ha rechazado ofertas que sobrepasaban los 150 millones de euros, una cantidad que solventaría muchos de los problemas económicos de la entidad, que no son pocos precisamente. Sin embargo, parece claro que ambos están destinados a protagonizar una rivalidad de, como mínimo, una década en los estadios de la liga española.
«Dan el nivel, y eso es lo que importa», decía ayer Dani Carvajal, que se va a medir a su compañero en el Madrid y que va a conocer, en directo, a su futuro compañero. Endrick marcó el pasado sábado el gol de la victoria de Brasil ante Inglaterra, y eso ha disparado todos los elogios hacia un chaval, dicen, destinado a marcar una época. «Es un jugador de 17 años, un muy buen futbolista, como también tenemos nosotros, pero hay que darle tiempo al tiempo y ser muy prudentes. Pensar que puede ser el sustituto de Pelé... ¡casi nada! Eso es meter mucha presión, generar estrés y una exigencia para la que quizá no está preparado en cuando a madurez.
Es un flaco favor el que le hacemos si hablamos así. Por eso yo soy partidario de que estos chicos vayan tranquilos, que vayan desarrollando su proceso formativo. Ya llegará el tiempo para exigirles», dijo De la fuente, que de ayudar en la maduración del talento joven sabe un rato, y ha trasladado esos conocimientos a la selección absoluta.
No hay rastro de ella en la página web de la Federación Española, y tampoco se ha hecho pública su convocatoria, pero para el próximo día 10 de febrero, lunes, el presidente de la Federación Española de Fútbol, Rafael Louzán, ha convocado una Asamblea General Extraordinaria a las 12.30 de la mañana. Fuentes conocedoras del proceso sitúan en el 9 de enero la convocatoria, y ese sigilo alrededor de la reunión provoca extrañeza en algunos sectores, entre ellos el Gobierno.
En el orden del día de esa asamblea, hecho público por Mundo Deportivo, se tratarán varios temas, entre ellos el «presupuesto para el año 2025 y ratificación de la retribución establecida para el Presidente». Sin embargo, el punto más llamativo es el 6: «Asuntos jurídicos». Y más concretamente el 6.1: «Adaptación de los Estatutos a la normativa vigente y modificación». ¿Qué parte de los Estatutos quiere modificar Louzán? Esa información tan concreta sólo la tienen un puñado de personas muy cercanas al presidente, pero pocos creen que los movimientos no tienen relación con el 5 de febrero, es decir, cinco fechas antes de esa asamblea.
Para saber más
Ese día, el 5 de febrero, a las 10.30 horas, se celebrará en el Tribunal Supremo la vista del recurso de casación interpuesto por Louzán contra la condena a siete años de inhabilitación para cargo público que le impuso la Audiencia de Pontevedra en 2022. Este órgano judicial consideró probado un delito de prevaricación en las obras de un campo de fútbol. En esa vista del próximo miércoles, el Supremo escuchará a las dos partes, recurrente y recurrida (y al Ministerio Fiscal si así lo solicita) y unos día o semanas después emitirá su veredicto. Previsiblemente antes de que se produzca el fallo será la asamblea de la Federación.
Si el Supremo le da la razón a Louzán, tendrá el camino libre para cumplir sus cuatro años como presidente, aunque siempre con el Gobierno atento a cualquier desliz. Pero, si el Supremo no le da la razón y confirma la inhabilitación, su salida debería ser inmediata. Por varios motivos, todos ellos amparados en la legislación vigente:
1. La Ley del Deporte. En su artículo 60.6 dice textualmente: «Cuando la persona titular de la presidencia o cualquier miembro de la junta directiva de una federación o liga profesional sean condenados por sentencia firme, deberán abandonar el cargo de forma inmediata, notificando tal circunstancia al Consejo Superior de Deportes». Esta misma Ley, además, permite al Consejo Superior de Deportes, es decir, al Gobierno, «suspender motivadamente, de forma cautelar, a la presidencia o a los demás miembros de los órganos directivos, cuando se incoe contra estas personas expediente sancionador como consecuencia de presuntas infracciones calificadas como muy graves». Parece obvio que una condena de este estilo sería considerada una infracción «muy grave».
2. Los Estatutos de la Federación, que en su artículo 19, referido a los requisitos para ostentar la condición de miembro de los órganos de la RFEF, establece, en su punto cuarto, lo siguiente: «No estar inhabilitado para desempeñar cargos públicos».
El presidente, junto al seleccionador.EFE
Sus no partidarios, que los hay en la Federación, sospechan que va a intentar algún movimiento para seguir en el cargo pase lo que pase el día 5, como ya hizo para poder presentarse a las elecciones el pasado diciembre. Sus pretorianos, que también los hay, se encargaron de buscar los resquicios legales necesarios para lograr sus objetivos. Por ejemplo, pese a que la Orden Ministerial por la que se regulan los procesos electorales en las federaciones deportivas establece, en su artículo 17.3, apartado B, que para presentarse a presidente es imprescindible «no estar inhabilitado para para el desempeño de cargo público o representación por sentencia judicial firme», esgrimieron esta última palabra, «firme», para justificar su validez como candidato. Efectivamente, la sentencia entonces no era firme, pues quedaba el trámite que ahora aborda el Tribunal Supremo.
MODUS OPERANDI
Siguiendo ese mismo modus operandi, y al margen de la discreción en la convocatoria de la Asamblea, de los alrededores de Louzán también empieza a salir estos días una teoría según la cual, como la sentencia de la Audiencia de Pontevedra (mayo de 2022) es anterior a la Ley del Deporte (diciembre de 2022), no sería aplicable el artículo 60.6 anteriormente explicado. Eso se filtra más allá de que la lógica indique que la sentencia será firme ahora, es decir, en una fecha posterior a la entrada en vigor de la Ley.
«Ya me lo habían comentado, pero es una insensatez. No tiene salida», explica a este periódico una fuente jurídica que conoce muy bien la Federación. Otra vía que sale de las cercanías de Louzán son las palabras «cargo público» recogidas en los Estatutos. Entiende el gallego que el de presidente de la Federación no es un cargo público al no ser un organismo público, jurídicamente hablando, como dictó una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en septiembre del año pasado.
El Gobierno permanece alerta. Su postura la dejó clara la ministra, Pilar Alegría: «Si se ratifica esa condena, actuaremos con arreglo a la Ley del Deporte y habrá que convocar elecciones». Un último detalle: cualquier modificación de los Estatutos debe ser aprobada por el CSD, y no parece que vaya a ser el caso. Pero quizá con lo que salga de esa asamblea, Louzán logre ganar, al menos, tiempo.