LaLiga presentó un escrito a la Comisión contra la Violencia contra el grupo radical “Frente Atlético” por considerarle responsable de los actos violentos que obligaron a suspender el derbi del 29 de septiembre entre Atlético y Real Madrid.
La máxima organización del fútbol profesional anuncia también que ejercitará las acciones penales que correspondan contra los sujetos que pertenezcan a este grupo radical responsable de 142 incidentes entre las temporadas 2015/16 y 2022/23.
A través de estas acciones penales, LaLiga pretende “responsabilizar individualmente a sus componentes así como la disolución del colectivo”. Se trata de adoptar medidas cohercitivas como el cierre de locales y establecimientos donde se reúnen y prohibición de cualquier tipo de actividad desarrollada por este grupo. Por último, la prohibición permanente de asistir al Metropolitano.
La organización pretende añadir más presión judicial sobre un grupo que no se reconoce como peña del Atlético de Madrid desde 2014, año del fallecimiento del seguidor del Deportivo de la Coruña, Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy, del que fueron responsables.
Además del apoyo de la Comisión Estatal contra la Violencia en el Deporte, LaLiga busca también el de la Abogacía del Estado para “garantizar que estos procedimientos judiciales se desarrollen con la máxima efectividad y que se tomen medidas firmes contra la violencia en el fútbol español”.
De momento, tres han sido los identificados por parte del club y la Policía como responsables de los incidentes que obligaron a suspender el derbi durante 14 minutos por el lanzamiento de objetos al portero del Real Madrid, Thibaut Courtois.
Estas tres personas, socias del Atlético de Madrid, han sido suspendidas permanentemente su condición de socio y se les ha prohibido el acceso de manera definitiva a cualquier instalación del club.
Describe el efecto mariposa de Edward Lorenz que una pequeña variación en un sistema no determinista puede producir efectos divergentes. La pregunta en clave rojiblanca es si la mariposa de Leganés va a afectar al equipo de las 15 victorias consecutivas pese al épico triunfo ante el Bayer Leverkusen. Diferentes competiciones y diferentes motivaciones. Una tiene final y la otra sólo tiene partido a partido según dijo Simeone. Pues quizás el equipo necesite una meta clara, como en Champions. Ante el Villarreal se quedó corto en voluntad o suerte. [Narración y estadísticas, 1-1]
La mariposa del Atlético es Julián Álvarez. Dos aleteos suyos acabaron con el Bayer y ante el Villarreal, con una posición algo más retrasada, quiso influir en el flujo de los acontecimientos desde todos los parámetros. Suyo fue el primer pase en profundidad del partido y también el primer tiro a puerta, aunque ante los amarillos se le negara el gol.
Comandados por el argentino, el Atlético salió fuerte, dominador. Más que a aletear como una mariposa y a picar como una abeja, quiso apabullar desde el inicio. Lo hizo con una asfixiante presión arriba y mucha atención de una renovadísima línea defensiva con pocos habituales frente a Oblak. Por delante, Koke, el capitán, con pocos minutos este año en un centro del campo muy sólido sin su nombre entre los titulares.
El Villarreal no encontraba el balón, esperaba en su campo las acometidas del Atlético y apenas amenazaba la portería de Oblak. Entonces llegó una temeridad de Reinildo tras un mal control de Witsel en una jugada aislada. Se tiró el mozambiqueño a los pies de Gerard Moreno y, pese a que toca balón, arrastra con la pierna de atrás al delantero amarillo que no falló desde los 11 metros. Tocaba remontar. No es mala opción esta temporada. Ocho veces se ha conseguido. Pero la moneda no siempre va a salir cara.
Gerard Moreno transforma el penalti ante Oblak.PIERRE-PHILIPPE MARCOUAFP
El gol descolocó algo a los de Simeone. Fue un golpe psicológico al equipo que estaba jugando mejor y que más lo merecía. Pero el fútbol no entiende de justicia, sólo de goles. Que le pregunten al Leverkusen, cuya primera parte en el Metropolitano mereció bastante más premio. Se perdió hasta Koke, el timón rojiblanco, un error suyo cerca del área casi le cuesta el segundo a su equipo si no llega a ser por Witsel, rapidísimo, que tapó a Gerard. El quite del perdón.
Y repitió nada más empezar la segunda parte. En una contra en inferioridad defensiva, Witsel se lanzó a los pies de Barry para evitar el segundo del Villarreal. Acción de mérito para el belga reconvertido a central. Esa contra peligrosa no fue un espejismo, el Villarreal repitió a la espalda de Molina e hizo sufrir mucho a los colchoneros en los primeros minutos.
Respondió el Atlético con la inspiración de De Paul y la amenaza de Julián, aunque fue Correa el que finalizó mal tras un rebote de Junior. El portero se ha asentado en la portería del Villarreal ante la ausencia de Diego Conde. En la siguiente, el brasileño no pudo hacer nada contra los dos rojiblancos que había en boca de gol. Falló Correa el pase atrás de Julián, pero Lino embocó el balón suelto para empatar el duelo con media hora por jugarse.
Espectáculo arbitral
Un partido sin bronca alguna se ensució por la falta de control de Sánchez Martínez, con la mano muy suelta para soltar amarillas por doquier y una roja al banquillo del Atlético. Esa locura tarjetera quitó ritmo al juego, pero Julián enseguida lo volvió a acelerar con una carrera en solitario que consiguió detener Junior. El Atlético volvía a dominar al submarino amarillo, que se abandonaba a las contras que pudiera conducir Baena, con todo el frente de ataque renovado desde el banquillo. También recurría el submarino al balón parado, cinco córners dispuso y los remataron todos. Afortunadamente para el Atlético, fuera de los tres palos.
Los últimos 10 minutos fueron de acoso rojiblanco, cuatro saques de esquina seguidos reflejaban el agobio de los de Marcelino. El Atlético buscaba el liderato. Casi lo encuentra Griezmann con un cabezazo que se fue por milímetros. O, también, por el aleteo de una mariposa.
Cuatro aficionados españoles han sido detenidos por la policía polaca en una noche de enfrentamientos entre los seguidores del Real Betis y del Chelsea en la previa de la final de la Conference que enfrentará este miércoles a ambos conjuntos.
Parecía un ambiente de hermanamiento el que vivían las aficiones de Chelsea y Betis por las calles del centro de Breslavia. Con cánticos y contracánticos entre unos y otros especialmente en los alrededores de la plaza del Mercado, centro neurálgico de la ciudad polaca y lugar en el que la UEFA ha establecido el punto de reunión de los visitantes para la final de la Conference.
No obstante, a primera hora de la tarde hubo un primer conato de violencia en una cafetería del centro en el que ultras ingleses y españoles se estuvieron lanzando mobiliario del propio establecimiento y alguna botella que otra.
A primeras horas de la noche, en cambio, un fuerte dispositivo policial pareció controlar y evitar que se repitieran ese tipo de imágenes, pero a medida que fueron avanzando las horas, la plaza del Mercado terminó tomada por ultras de los dos conjuntos y los enfrentamientos entre ambos se recrudecieron.
Con ese lugar del centro de Breslavia ya más vaciado de los miles de aficionados que han venido a apoyar a su equipo, se cree que hasta 15.000 vendrán de parte del Betis, aunque solo 12.000 podrán hacerlo con entrada, los ultras comenzaron a tomar el control y a olvidar los cánticos que cantaron por la tarde al unísino con los del Betis, principalmente los que se metían con el eterno rival de la capital hispalense.
Así, la plaza del Mercado se convirtió en una batalla campal con numerosos lanzamientos de objetos, botellas y demás agresiones entre ultras del Chelsea y del Betis. Algunas páginas especializadas en el movimiento ultra hablaban del grupo radical bético United Family.
La policía polaca tuvo que intervenir de inmediato con lanzamiento de gas y despliegue de antidisturbios "lo que evitó una mayor escalada del conflicto o comportamientos negativos", escribió la Jefatura Provincial de Breslavia en un comunicado. "La cantidad de fuerzas policiales preventivas y operativas, junto con su presencia constante en los puntos donde se reúnen o circulan residentes y aficionados deportivos, es tan grande que todos pueden sentirse seguros", continuó el comunicado.
Según informaron fuentes polacas, cuatro aficionados españoles han resultado detenidos por estos enfrentamientos. Uno de ellos ha sido por conducta agresiva y otros tres por el robo de unas banderas de la afición rival en las fan zones.