El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se desplazará este jueves hasta Francia para asistir a las competiciones de diferentes disciplinas en las que participan deportistas españoles en los Juegos Paralímpicos de París 2024.
El jefe del Ejecutivo, que acudirá a París junto a la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, también realizará una visita a la Villa Paralímpica, justo un día después en el que España ha alcanzado las 33 medallas en los JJPP.
Alegría ya adelantó que el presidente del Gobierno se trasladaría a la capital francesa para dar “apoyo” al equipo paralímpico, que cuenta con una delegación de 150 deportistas, mayor que la que se envió a Tokio 2020. También avanzó que acudirían en otras jornadas el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, y la ministra de Inclusión, Elma Sáiz.
Sánchez recibió el pasado 23 de julio en el Palacio de La Moncloa una delegación de deportistas que van a participar en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París, donde trasladó “el inmenso orgullo de toda la ciudadanía española, más allá de lo que ocurra en la competición”.
El jugador del Mainz Josuha Guilavogui dio las gracias al árbitro Patrick Ittrich por salvarle la vida en un partido de la Bundesliga después de que su lengua le bloqueara las vías respiratorias tras un lance del juego.
Guilavogui recibió un golpe en la cabeza accidental de la rodilla de su compañero Anthony Caci durante el partido del sábado ante el Bayern de Múnich. El jugador francés yacía inmóvil en el campo, aparentemente inconsciente, antes de que llegara Ittrich y lo pusiera en posición de recuperación, luego le manipuló la lengua para que pudiera respirar nuevamente.
"Si alguien está así, hay que actuar rápidamente. He vivido muchas situaciones como esta. Tenía la lengua atrás. Hay que sacarla y, entonces, vuelves a respirar", explicó Ittrich después.
Guilavogui expresó el domingo su agradecimiento. "¡Muchas gracias por la rápida intervención y la ayuda prestada, Patrick Ittrich, mis compañeros y los médicos del Mainz!" escribió el centrocampista defensivo en X, antes Twitter.
El Mainz perdió 8-1 ese partido y se mantiene en la zona de descenso de la Bundesliga.
El día de su 39 cumpleaños, a tres exactos de que se cumplan 22 años de carrera profesional desde que Manel Comas le hiciera debutar con 17 en el Joventut en el Raimundo Saporta, Rudy Fernández, sin pronunciarlo -"es una palabra difícil e impactante cuando la escuchas"-, ha anunciado lo obvio: los de estos días están siendo sus últimos partidos. El mallorquín, tras una carrera de leyenda, cumplirá su última temporada con el Real Madrid y se retirará este verano, para el que guarda el último (ahora sí), desafío. Intentará poner un broche para la historia, ser el único jugador de baloncesto en disputar seis Juegos Olímpicos.
"Ya tengo una edad y empiezo a pensar en otras cosas, en la familia. Me quedan unos meses y espero aportar lo máximo. Me he sentido muy querido y esto se está terminando, pero quedan unos meses para seguir disfrutando de mis compañeros", admitió este jueves, en la rueda de prensa previa al partido contra el Baskonia en el WiZink, el que será el 345 en la máxima competición continental (es 12º en esa lista, cuarto en triples con 591, tercero en robos con 364...).
"Cumplo hoy 39 años y me siento muy agradecido de estar vinculado a este club durante tantas temporadas [13], algo que se está terminando, llevo muchos años, mucha tralla física y mental", comentó el alero, que presume de un palmarés único. A nivel de clubes, incluye tres Euroliga (dos veces en el quinteto ideal de la competición), seis ligas, siete Copas (una con el Joventut y tres MVP), una Intercontinental, una ULEB... Y con la selección española, con la que debutó en 2004 (con Mario Pesquera, en la preparación para los Juegos de Atenas) y en la que nadie disputó más partidos que él (255), dos Mundiales y cuatro oros Europeos (más una plata y un bronce), además de tres medallas olímpicas, las platas de Pekín y Londres y el bronce de Río. Colecciona 11 medallas en total, igual que Pau, sólo le superan las 12 de Laia Palau con la femenina.
Precisamente con la roja de España dirá adiós. Y para ello, para que todo termine como merece, dos condicionantes. La salud que tanto interrumpió su trayectoria -"por desgracia, he tenido lesiones. Cuando tuve la de espalda me dijeron que podría estar tres o, como mucho, cuatro años más de carrera profesional y con el trabajo de los físios y de los preparadores físicos del Real Madrid he podido vivir muchísimos años más. Me siento un privilegiado"- y el billete que los de Sergio Scariolo deberán sacar en el Preolímpico de Valencia el próximo mes de julio, en el que Finlandia, Bahamas, Polonia, Angola y Líbano son los rivales por la única plaza. "Me queda cumplir el sueño que tenía mi padre de vivir otros Juegos Olímpicos", lanzó Rudy, quien escribiría una página única en el olimpismo. Nadie disputó seis (y es probable que nadie lo haga jamás). En la lista de cinco está el balear junto a Pau Gasol, Teófilo Cruz (de Roma 1960 a Montreal 1976), Oscar Schmidt (de Moscú 1980 a Atlanta 1996) y Andrew Gaze (de Los Angeles 1984 a Sydney 2000).
En 20 años, Rudy, "un monumento vivo de la selección" como le define Scariolo, sólo se ausentó un verano de competición, el del Eurobasket 2017. Ni cuando estaba en la NBA (Blazers), ni cuando las lesiones le torturaban (tres operaciones de espalda). Ni cuando era un osado saltarín que irrumpió entre los Gasol, Navarro y compañía, ni cuando era un veterano sabio que lideró el relevo generacional. 17 torneos en total, que serán 18 si logra la clasificación para París. Con momentos inolvidables en lo personal, más allá de los títulos. El mate sobre Dwight Howard en la final de Pekín y sus lágrimas, también en Pekín, cuando levantó el Mundial (ese verano había perdido a su abuelo y su hermana Marta perdió al bebé que esperaba).